Cumpliendo los catorce

37. Cuernos, cuervos.

NARRA SOFIA

Hoy después de tantos días de esfuerzo y ensayo, llego la hora de representar el musical. Aún recuerdo aquel día en donde anunciaron quienes serían los protagonistas y la piel se me erizo nada más escuchar mi nombre.

Me miro por cuarta vez en el espejo. La verdad es que esta semana ha sido complicada para mi, sobretodo porque he tenido que ignorar Anastacia en todos sus intentos por explicarme lo ocurrido.

Por el momento he decidido mantenerme al margen en ese asunto. Bastantes problemas tengo yo ya como para que encima también tenga que comerme lo de los demás.

Además, ni siquiera sé que sería lo correcto en esta situación. Muchas veces me he sentido tentada a contarle la verdad a mi hermana porque todos merecemos saber la verdad sobre con que clase de persona estamos saliendo. Sin embargo, a pesar de sus errores, sigo apreciando a Anastacia como si fuese una hermana más en mi familia y es por ello que he decidido que sean Jackson y ella quienes le cuenten la verdad a Susan. No yo.

—¿Podemos hablar? —Anastacia golpea con insistencia la puerta del baño mientras que yo sigo haciendo caso omiso. Han pasado cinco días desde que la encontré en nuestra habitación con Jackson pero yo aún no puedo perdonarla.

Es cierto que ella está soltera y puede hacer lo que quiera pero yo nunca me liaría a escondidas con el novio de la hermana de mi mejor amiga.

—Sofia, ¡te estás comportando como una cría actuando de esa manera! —me reprocha elevando el tono de voz.

Cierro los ojos mientras respiro hondo, aguantándome las ganas de contestarle.

Cuando termino de arreglarme salgo y me dirijo hacia mi cama en donde agarro un libro que dejé antes en mi cómoda y comienzo a leerlo. Anastacia, que sigue sin rendirse, se acerca a mi y se queda de brazos cruzados.

—No puedes ignorarme toda una vida —dice con la esperanza de que le conteste—. Nosotras somos buenas amigas Sofi —sigue insistiendo llamando mi atención cuando pronuncia las palabras "buenas amigas".

—Éramos buenas amigas hasta que tú me ocultaste lo de Jackson —le rectifico sin tan siquiera mirarla. Yo sigo sujetando mi libro mientras que finjo que estoy leyendo.

Anastacia da un suspiro y se lleva la mano a la frente.

—Eres imposible Sofia, yo solo quiero explicarte mi versión de los hechos y tú te niegas a escucharla —comenta con cierto enfado.

Ahora soy yo la que suspira. Sabiendo que tal vez después me arrepienta de lo que voy a hacer, alzo mi mirada y la invito a sentarse a mi lado.

—Vale, explícame tu versión.

—La primera vez que tuve algo con él fue en la fiesta de cumpleaños de Hunter —comienza a explicarme la pelirroja, un tanto ilusionada—. Para mí fue algo inesperado, tú sabes que él al principio pasaba de mi pero días antes a la fiesta de Hunter él había venido a mi a disculparse por lo ocurrido con Susan y así comenzamos a hablar dándonos cuenta de que tenemos bastantes cosas en común. En la fiesta él dio el primer paso y yo le seguí. Sé que estuvo mal porque tú eres mi mejor amiga aquí dentro y él es el novio de tu hermana pero Sofia, él me gusta y yo le gusto —termina explicándome.

Quiero intentar creer y entender a mi amiga pero hay muchas cosas que no me encajan.

—¿Y si le gustas por qué está con Susan? —cuestiono enarcando una ceja. Anastacia duda sobre su respuesta.

Jackson no es trigo limpio y eso lo sé desde que vi lo que John, Dylan y él hicieron con Brent y su amigo.

—No lo sé —termina contestándome.