Cumpliendo los catorce

89. El cumpleaños sorpresa de Susan

En multimedia la canción que sale en el capítulo, Enchanted de Taylor Swift.

Capítulo sin editar

NARRA SOFÍA

La vuelta a casa fue un tanto incómoda. Susan y yo por motivos evidentes no hablamos en todo el trayecto. La pobre Samantha, que no sabía que había pasado entre nosotras en mi habitación, intentó hablar y sacar diversos temas de conversación que murieron en el intento. Sin embargo, lo peor no ha sido eso.

Al llegar al internado Susan ha recibido una carta para ir al gimnasio. En ella ponía que teníamos que acompañarla Samantha y yo. Ha sido extraño y aún así aquí estoy, después de haber dejado mis cosas en el cuarto, caminando junto a mis dos hermanas hacia allí.

Me pongo a examinar nuevamente la carta. No reconozco la letra así que tal vez simplemente ha sido un graciosillo o una persona que solo conoce Susan. Lo que no entiendo es por qué tenemos que ir las tres.

Solo espero que no sea una broma pesada. Después del mal rato que he pasado estos dos últimos días no me apetece otro más.

—¿Para qué será? —pregunta Susan una vez llegamos al lugar, antes de abrir la puerta. Ella también está nerviosa, se le nota en la voz.

—A lo mejor es una broma pesada —Mi hermana mayor me fulmina con la mirada.

—Tú siempre tan optimista.

Ruedo los ojos. No me importa su opinión y menos ahora que me ha dado a entender que va a quitarme al novio.

Finalmente, Susan se anima a tirar de la puerta y para nuestra sorpresa hay mucha gente detrás de ella, quienes comienzan a cantarle cumpleaños feliz a mi hermana.

Dylan corre hacia ella y la envuelve entre sus brazos de forma muy cariñosa. Trago saliva y aparto la mirada. Eso me sienta como una patada en el estómago después de lo que he hablado con mi hermana.

—¿Qué te pasa? —pregunta Samantha sacándome de mis pensamientos.

—Nada —miento y finjo una sonrisa que sé que no convence a mi hermana pero aún así no insiste más. Cosa la cual agradezco.

Cuando Dylan termina de abrazar a Susan dirige su mirada hacia mi. Me sonríe. Con una sonrisa de oreja a oreja. Está contento por verme y eso es algo que se nota.

Aún no le he dado una respuesta pero ahí está él esperándome porque según lo que me dijo el otro día, me quiere. Lo peor es que se me sigue haciendo fan raro que uno de los chicos más guapos y populares del internado me quiera que aún no soy capaz de creérmelo.

—Hola —me saluda una vez que se acerca a mi.

De reojo veo cómo Susan nos mira.

—Hola —respondo con cierta timidez.

—¿Qué tal estos días fuera del internado?

En el fondo sé que se muere por saber que he decidido y la verdad es que yo también me muero por darle mi respuesta. Estos días lejos de él y habiéndolo hablado con Susan me he dado cuenta de que a mi también me gusta mucho Dylan, incluso creo que en cierta forma le quiero a mi manera. Además, como ya no está el problema de que se entere mi hermana mayor, ya no hay ni siquiera por qué ocultarlo.

—No muy buenos la verdad... —Me detengo para pensar en cómo decirle mi respuesta sin que quede mal. Sin embargo, antes de poder seguir hablando Jackson nos interrumpe.

—Sofía, ¿podemos hablar?

Dylan pilla la indirecta, no tan indirecta de que se marche de ahí para dejarnos a solas y lo hace con la primera excusa que se le viene a la mente.