Invisible »Jb. |Finalizada

Capítulo 089.

"Soy fuerte porque ya fui débil" aquella frase resonó en mi mente, haciéndome cerrar los ojos con fuerza. Papá había logrado por fin sentirse una persona fuerte y llena de vida aún en sus últimos respiros. Aun cargando con el peso de su enfermedad y el miedo de dejarme sola frente a tantos peligros. Debía tomarlo como un ejemplo. Cuando entré a su habitación de hospital pude notar su sonrisa vigente y sus ojos brillosos. Había hecho un esfuerzo enorme y doloroso para poder abrazarme con todas sus fuerzas. Y luego me había intentado tranquilizar, mientras la muerte lo miraba directamente a los ojos.

Perderlo sería un dolor insoportable, no estaba preparada y jamás lo estaría. Todo este tiempo junto a él había sido hermoso. Nos rodeaba la felicidad, pero yo no había podido verlo. No había logrado aprovechar cada segundo con papá cuando su salud no era una preocupación.

"Si hay algo irreversible es el tiempo".

Me eché hacia atrás en el incómodo sofá de cuero. Logan observaba el exterior por la ventana, mientras en su mano derecha sostenía una taza de café. Eran las once y veinte de la noche. No tenía sueño ni hambre, sólo quería que fuera mañana así los doctores despertarían a papá y yo podría sonreír una vez más.

El cielo estaba repleto de estrellas y una luna llena preciosa las acompañaba. Recordé cuando Justin y yo estábamos en su balcón, hundidos en un silencio cómodo y con nuestras manos entrelazadas. Sus ojos me observaban sin ningún miedo, él sabía que odiaba que me miraran de esa forma y aun así lo hacía. Me intimidaba y hacía que lo amara mucho más cada segundo. Quizás por esos lindos momentos me negaba a dejarlo ir.

Cuando amas de verdad haces todo por tener a esa persona cerca. Decepcionas, haces que te odien, haces llorar. Justamente eso me estaba ocurriendo. Las personas me veían triste y se decepcionaban de ello. Odiaban que me odiara a mí misma. E incluso estaba segura de que Marie había llorado más de una vez cuando solía discutir con mi padre por no querer comer. Aquellas simplezas hacían que me diera cuenta de cuánto dolía estar enamorada. Los obstáculos siempre existirían y estarían en nuestro camino tratando de alejarnos. ¿Qué quedaba de mí? ¿De mis sentimientos? ¿De todo lo que había perdido y ganado por haber encontrado el amor?

Porque sólo era eso; amor. Sólo quería tener a Justin junto a mí como antes y oír su voz diciéndome cuánto me amaba. Algo en mi interior me repetía que estaba siendo una estúpida al creer que él me perdonaría, pero no perdería las pocas esperanzas que resguardaba.

Logan aclaró su garganta, logrando sacarme de mi burbuja. Pretendí regalarle una sonrisa, la cual estaba segura que había sido una mueca. Me tendió una taza de café y la tomé sin ningún problema, mientras ese delicioso olor se adentraba por mis fosas nasales.

—Ve a dormir, _____. Yo me quedaré con él. —Dijo, haciéndome negar.

—No, no me iré. —Solté con cierto enojo.

—Estás cansada y no quiero que verte así. —Insistió mientras se acercaba a mí y tomaba mi mano. —Tienes que dormir.

Volví a negar. —Logan, de verdad. —Pausé, soltando un suspiro. —Quiero quedarme con mi padre.

Renegó en silencio pero se rindió, dejándome quedarme aquí. Lamentaba tener que vivir esta situación con Logan, pero realmente sentía que no podía dejar a papá. Yo tenía que ser fuerte junto a él y demostrarle que siempre tendría mi apoyo y amor incondicional.

Vi a Logan sentarse frente a mí y observarme de una forma rara. Era atención pura. Comencé a ponerme nerviosa cuando se acomodó en el sofá y siguió mirándome como si yo fuera una exhibición de arte en un museo. Examinaba mi rostro y bajaba por mi cuerpo hasta mis pies. No pude evitar morder mi labio y hacer muecas. A medida que los segundos pasaban, más nerviosa me ponía. Hasta que él sonrió de oreja a oreja.