Treasure ⸺ateez。2019

#28 Please

SEONGJOONG¡!

en donde hongjoong no está listo para salir del armario
o, en donde seonghwa ya no quiere ser su juguete

Seonghwa se golpeó la cabeza al caer de la cama por un empujón de parte de Hongjoong, el menor estaba enojado con él. Con algo de resentimiento, Seonghwa tomó la chaqueta que se reposaba en la silla del escritorio de Hongjoong y salió de la habitación ante su atenta mirada.

Esperó por un momento parado frente a puerta, anhelando que el menor fuese a por él y pidiese disculpas, que hiciera algo, cualquier cosa. Seonghwa lo necesitaba, pero Hongjoong no hizo nada. Abrió la puerta de la casa y salió, esperando que esa fuera la última vez que perdía la dignidad.

La relación de Seonghwa con Hongjoong comenzó hace cerca de tres meses, Kim era el chico perfecto ante la mirada del mayor, o eso fue lo que creyó de él en un principio viéndole desde lejos, era tan dulce y atento con todos; bueno, con todas. Era también el típico chico de clóset que no se atrevía a sentarse muy cerca de otro hombre.

No recuerda muy bien cómo fue que sus manos terminaron dentro de los pantalones de Hongjoong y pudo sobrevivir a aquello; ocurrió con el jueguito tonto de cinco minutos en el paraíso en que todo el mundo creyó que Kim había golpeado a Park por este tener el labio partido al salir, y sí, lo había hecho, aunque no hasta después de divertirse silenciosamente.

Seonghwa se había sorprendido cuando Hongjoong tocó su puerta a las dos de la madrugada esperando repetir lo que había ocurrido en el armario de Song Mingi hacia unos días. Así, en silencio, ambos mantuvieron esa relación. Hongjoong llegaba muy tarde a la noche y se desnudaba sobre su cama, abría las piernas con timidez y esperaba que el mayor le hiciera suyo.

Durante ese tiempo, Seonghwa había cometido el error de enamorarse. Ese cínico e idiota chiquillo de bonita nariz había bajado las estrellas para él, sólo para luego arrebatárselas.

Park había perdido la dignidad, la paciencia, el amor propio, las ganas de lucir bien, e incluso la confianza que había logrado forjar. Hongjoong lo había reducido a nada en sólo tres meses. Aunque Seonghwa tuvo el valor de detenerlo, de decir basta, porque sabía que si seguía quedándose terminaría saliendo aún más herido. No le importaba a Hongjoong realmente, y le costó un poco de tiempo reconocerlo.

Seonghwa acarició el hematoma que se había formado en su frente debido al golpe de hace dos días, mientras se miraba al espejo recordando algunos de los momentos bonitos que había pasado con Hongjoong en la soledad de su cuarto, y se odió por ser tan débil.

Peinó su cabello de forma en que este cubriera su frente y así salió rumbo a la universidad, sólo esperaba no tener que cruzarse con Hongjoong demasiado en el día, no por el menor, sino por él mismo. Sabía que Hongjoong sólo voltearía la cabeza sin importarle en absoluto, y en cambio, él podría caer de nuevo si este solo se lo pedía; aunque dudaba de esto. No había recibido llamadas de Kim en todo el fin de semana.

Con algo de recelo, Seonghwa salió de la cafetería al ver a Hongjoong entrar a ella, junto a su grupo de amigos. Siempre había sido así, desde que comenzaron esa relación, solía ir detrás de Hongjoong como perro faldero incluso si este le ignoraba enfrente de todos sus amigos, porque ellos eran más importantes que cualquier cosa que él quisiera decir.

―¿Estás bien? ―Jung Wooyoung tocó el hombro de Seonghwa, quien estaba sentando detrás de un muro, bajo la sombra.

―Sí ―respondió apenas, dirigiendo la vista a la persona pequeña que se acercaba a él con furia―, bueno, quizás no.

Hongjoong se paró frente a él con el ceño fruncido y los brazos cruzados sobre su pecho.

―Ya no haré tu tarea de matemáticas ―dijo Seonghwa, levantándose para irse lo más lejos posible, siendo seguido por Wooyoung.

Tampoco voy a cuidarte de nuevo, ni hacerte de comer, o arroparte otra vez.

―A la mierda con la tarea, quiero hablar contigo. ―Hongjoong se veía tan malditamente lindo que Seonghwa apartó la mirada, huyendo―. ¿No escuchas lo que digo? ―preguntó molesto, siguiéndole.

Seonghwa volteó, mordiedo sus labios.

―Si no vas a besarme delante de todas estas personas, entonces no tenemos nada de qué hablar. ―Las lágrimas de Seonghwa se ocultaban detrás de su largo cabello y gruesas gafas.

Sabía que estaba presionando al menor a algo que no estaba listo, pero sabía que Hongjoong no lo haría de todos modos. No era así de importante para él.

Hongjoong no era realmente malo, no era cruel cuando se acurrucaba bajo él buscando calor y protección, o cuando dejaba decenas de caricias en sus brazos y pecho sin darse cuenta durante la noche. Sólo era jodidamente homofóbico, repulsivo ante su propia naturaleza.

―Supuse eso. ―La voz de Seonghwa sólo le permitió modular aquello.

Hongjoong vio la espalda del mayor alejándose de él, en blanco y sin enterarse de nada. Él no pudo permitir aquello, así que corrió y tomó el brazo ajeno dispuesto a detenerlo. Mas un fuerte empujón que lo hizo caer de culo, lo desorientó.

Seonghwa estaba mirándole de nuevo, con las lágrimas bañando su rostro entero, con las mejillas y ojos rojos. Sus labios temblando entre querer decir algo y no poder hacerlo.

―Basta ―pidió, tan roto―. Ni siquiera entiendo qué esperas, pero no. Ya no voy a ser tu juguete.

Hongjoong aún en el suelo, le vio marcharse mientras trataba de limpiarse el rostro, quizás sintiéndose patético. Hongjoong sabía que se había equivocado mucho, que le había lastimado más de una vez, que sus palabras habían sido duras, pero algo le oprimía en el pecho impidiéndole darle al mayor lo que deseaba.

No aún.

Dom., 20 de octubre 2019

nOS HIZO VOTAR POR ESTA MIERDA?

sí, eso hice.

Aún subiré el yunho x jongho porque tuvo bastantes repuestas qudjshhd procuraré que sea soft o lemmon, no sé, algo lindo. ♥️