CAPÍTULO 27.

622 42 0
                                    

Aarón.

Por supuesto Aisley está muy nerviosa, ni siquiera yo mismo sé cómo va a reaccionar Andrei o que preguntas hará, por suerte no vio la sangre que había en el piso ni nada más. Cuando pasamos a verlo en la noche dormía tan tranquilamente como siempre. Antes pasamos a la habitación de Aidan que ya está despierto y al parecer Alejandra lo cambió de pañal hace poco.

— Buenos días bolita. — Dice Aisley acercándose a su cuna, pero soy yo quién lo levanta.

Tener a mi hijo entre mis brazos no lo puedo comparar con alguna otra cosa, ver como abre sus ojitos azules y me mira fijamente, las mejillas sonrojadas como Aisley, sus pequeñas manitas cubiertas con guantes para que no se rasguñe la cara. Es perfecto y hermoso. Pero según Aisley, es enojón como yo y en este momento lo está confirmando cuando no se siente cómodo del lado que lo estoy cargando.

— Igual de enojón que papá. — Le da un beso en la cabeza.

Salimos de la habitación, pero en el pasillo se atraviesan M&M y Princesa llorando y tocándome las piernas con las patas.

— Mi amor, sabes que lo quieren ver. — Me pongo en cuclillas para que puedan ver a Aidan e inmediatamente se sientan para observarlo fijamente.

Acaricio la cabeza de M&M que gruñe levemente, pero es un gruñido de cachorro consentido. Lo olfatean un poco y Princesa pone su cabeza encima de él.

— ¿Listo? ¿Ya nos podemos ir? — No puedo negar que me encariñe con los cachorros al punto de hablar con ellos.

Se acercan a Aisley para que los acaricie y bajan ladrando las escaleras, Aidan se ha acostumbrado a escucharlos ladrar y ya no llora, solo parpadea varias veces. Cuando entramos a la habitación de Andrei justo está despertando.

— Buenos días mi amor. — Aisley le da un beso y nos regala una sonrisa somnolienta.

— Buenos días campeón. — Choca su mano con la mía y me da un beso.

— ¿Puedo cargarlo? — Asiento y se acomoda.

Lo pongo sobre su regazo mientras detiene la cabecita de Aidan con su brazo, luego se inclina para darle un beso.

— Papá, ¿Qué fue lo que pasó ayer? — No quita la mirada de Aidan.

Pasamos la siguiente media hora explicándole todo, sabemos que es un niño muy inteligente y no le gusta quedarse con duda alguna de nada, nos hace algunas preguntas y respondemos todo, pero omitimos la parte de que Adrik Ivanova es su padre biológico.

— ¿La tía Annia y su bebé están bien? — Nos mira a ambos con preocupación.

— Si mi amor, no te preocupes, de hecho, todos van a regresar en un rato, tienes que abrir tus regalos, ¿Recuerdas? — Sus ojos verdes se iluminan con una sonrisa sin dientes. — Arriba, vamos a poner el agua calientita para que te bañes. — Tomo a Aidan antes de que Andrei le dé un beso y entre al baño tomado de la mano de Aisley.

Toda su habitación está decorada en la temática del Capitán América, las mantas, las almohadas son de él o bien, tienen el escudo, hay algunos cuadros colgados de lo mismo y otros de los cachorros.

Dejo a Aisley ayudando a Andrei y yo bajo con Aidan, pero en la cocina me encuentro con Danielle.

— Buenos días. — Me dice mientras se sirve un vaso de whisky. — ¿Estás seguro de lo que vas a hacer? — Alza una ceja y me quita a Aidan.

— Danielle, tenemos dos hijos, no seas estúpido. — Miro por encima de mi hombro para ver si Aisley no viene y luego le doy un sorbo a su whisky.

UN BESO DE SEDUCCIÓN. (TS #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora