La Nerd Más Hermosa; Horan1

Capítulo 32

Dayan.

En los pasillos, mientras caminaba por un lado de el rubio, que permanecía callado y llevando su mochila entre sus brazos que se aferreaban fuertemente a la mochila. Me parecía extraño que hasta ahora estuviera siendo callado, porque mayormente no lo era así. Me temía a qué hubiera pasado algo malo.

—¿Qué sucede? ¿Por qué tan callado?

Me atreví a preguntar, soltando solamente de repente. Lo miré por cortos segundos antes de apartar mi mirada de él. Seguía recordando lo que había pasado en la mañana y me seguía sintiendo algo avergonzada, podría ser que no fue nada malo ante los ojos de los demás pero, ¿Cómo debía de reaccionar a ello? Él mismo lo admitió, pudo haber un posible beso entre ambos si Harry no hubiera intervenido, no me lo esperé de Niall pero, me cuestionaba sobre algo, ¿Qué hubiera sido si él sí me hubiera besado?

Una imagen de ambos haciéndolo cruzó por mi mente, obligándome a eliminarla de inmediato.

—Yo... —Dudó— Sólo pienso.

—Y... ¿En qué piensas, Horan?

Le codeé, manteniendo una pequeña sonrisa en mi rostro, para animarlo y que no siguiera así.

Porque existía también la posibilidad de que se haya quedado pensando en lo que sucedió en la mañana. Era algo difícil de sacar de la mente, si para mi resultaba de esa manera, ¿Por qué para él no lo sería?

—Si es por lo de la mañana no debes de...

Fui interrumpida.

—¿Cómo que querías besar a mi mejor amiga? —Apareció Claudia, saltando, gritando y señalando— ¿Cómo te atreves? No puedes hacer nada sin mi permiso, agradezco que llegara Harry por haberla salvado de una posible violación.

Me sorprendía la rapidez con la que hablaba y todo lo que le decir al chico que parecía igual de avergonzado que yo. No era novedad que nos encontráramos así si teníamos amigos que les daba por gritar las cosas privadas de los demás estando en un lugar demasiado público, y además, rodeados de personas chismosas.

Cubrí la boca de mi amiga con mi mano, haciéndola callar por un momento antes de sentir algo húmedo en la palma de mi mano.

—¡Claudia! —Reprendí— ¿Por qué lamiste mi mano? —Dije, limiándola en mi ropa.

El rostro de mi amiga era único. Esa distinguida sonrisa burlona en su rostro, me miro por unos segundos más y volvió al rubio.

—Explícame lo que hiciste.

—Pero si tú una vez me...

—¡Cállate, no me respondas!

—Pero es que tú...

—Yo no te dije nada. —En seguida apareció el rizado— Mi amor, te extrañé.

Se abrazaron ambos.

—Sólo fueron tres minutos que tardé en ir al baño y regresar...

—Cállate.

Llegó el timbre. Cansada de las clases, Me despedí de ellos y es que a todos nos tocaba una clase diferente está vez, bueno, Harry iba junto a mi.

Esto era más como un pequeño curso, uno que cada estudiante eligió y que se daba una vez entre semana.

Harry y yo habíamos elegido escritura, y bueno, hace tres semanas que iniciaron las clases de este curso. Niall terminó eligiendo clases de música y Claudia simplemente se fue por matemáticas. Pude haber ido al mismo curso que ella, pero eso sólo me haría estresarme más de lo que ya me encontraba; me gustaban las matemáticas, pero no para estar rematando todo el tiempo con ellas.