Capítulo 99

1.7K 77 8
                                    

Dayan.

Muestro mi mejor sonrisa, lo hago para que ninguna de las personas que están frente a mi comiencen a dudar o que crean que me siento mal —aunque de verdad es que sí me sentía así— pero nada que una ligera sonrisa y un par de palabras pudieran con aquellas sospechas.

Lamentablemente fallo en aquel intento de mantener esa sonrisa por más de diez segundos, porque pasado ese tiempo, se desvanece de un instante a otro. Si de verdad fallo por completo frente al espejo, ¿Cómo es que lo haré estando de verdad frente a más personas?

Me siento cohibida y sigo encerrada en el baño, encerrada en esas cuatro paredes de colores tan claros que junto con la luz parece que me dejarán cegada, es tan molesta esa luz... Pero tampoco quiero salir de aquí tan pronto, no me siento lista, algo dentro de mi parece querer explotar, estallar, haciendo que pronto me quedaría vacía.

Miedo.

Es lo que siempre siento, me miro al espejo y lo único que veo es una chica dolida y mal, en todos los sentidos, de todas las maneras posibles.

Muerdo mi labio inferior con algo de fuerza, limpio la lágrima rebelde que se resbala por mi mejilla, a punto de perderse en mi barbilla. Cuando la limpié lo hice de la manera más brusca, casi haciendo que mi piel ardiera en demasía.

Inhalo pausadamente, cerrando así mismo mis ojos cuando empiezo a exhalar, de la misma manera, lenta.

Cuando abro mis ojos, me encuentro con esa misma chica débil y cansada, de ojos apagados y de autoestima baja... ¿Cómo se podía recuperar todo aquello que había perdido?

Estaba esperanzada a que la decisión que tomara, estaría bien y me devolvería al menos un poco de lo que había perdido con anterioridad.

Sí puedo...

Gruño bajo, limpio las últimas lágrimas que resbalaban por mis mejillas, me arden las mismas. Chasqueo mi lengua abriendo el grifo del agua del lavabo, me inclino para mojar mi rostro, importándome poco que el agua estuviera fría, después de todo me serviría de algo para poder despejarme de tantos pensamientos negativos que me habían comenzado a invadir.

El agua escurre por mi rostro, solo puedo cerrar el grifo y seguir viéndome frente a aquel espejo, como lo odiaba.

Odio con tantas fuerzas ser débil y demostrarlo con facilidad cuando ya no puedo más, odio por igual sentirme tan mal y no saber qué hacer para cambiarlo... Odio tanto ser y estar así justo ahora, que me pase de un momento a otro.

—Dayan, ¿Estás bien?

La voz fuera del baño me hace sobresaltar, apresurándome a tomar un poco de papel y secar aquellos rastros de las gotas de agua resbalando por mi rostro; una última mirada hacia el espejo y mis ojos se ven ligeramente rojos, lo que me hace casi entrar en pánico, porque no quería que nadie me viera.

—Eh, ya voy...

—Ya has tardado mucho y mamá no nos ha dejado probar ni un sólo bocado de comida...

—Perdón —Murmuré— Ya voy, en seguida voy.

—Dayan... —Queda en silencio por un tiempo— Tú, solo no tardes...

Los pasos alejándose por el pasillo me son más que suficientes como para dar una gran inhalación, sintiendo como mi corazón palpita fuertemente contra mi pecho, con miedo de que me pasara algo más.

Tragué duramente, una última —ahora sí— mirada hacia el espejo, esperando en nadie allí afuera me comenzara a bombardear con demasiadas preguntas.

La Nerd Más Hermosa; Horan1Where stories live. Discover now