Capítulo 64: La familia Dupain

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- Dime por qué no lo hiciste. Se supone que eres la cabeza de los Dupain. Que Max era... tu nieto... tu sobrino, no lo sé. ¿Por qué no fuiste a su funeral? - preguntó ella en reclamo y con los ojos un poco cristalizados. 

- Marinette, quería hacerlo. Lo prometo, pero no me permitieron hacerlo hasta que fuera presentado como William Dupain. Claro que quería llorarlo y rezar por él, pero no pude. Lo único que me permitieron hacer... Fue mirar el funeral desde la distancia. Sólo eso - 

Intentó convencerla tomándola de los hombros, pero Marinette se alejó. - Entiendo eso. Está bien - dijo en un murmullo. 

- ¿Por qué no me dijiste que habías recordado quién eras? Por qué si estabas tan cerca de mí... ¿Nunca me dijiste que eras tú quien me adoptó? - preguntó sin entender. 

Thomas le sonrió. - Te explicaré todo lo que tú quieras, lo prometo. ¿Te parece si salimos a cabalgar? - propuso. Minutos después y luego de que ambos cambiaron sus ropas por ropas adecuadas para montar, se dirigieron al establo. 

- Aún no se me olvida que te prometí un regalo. Un caballo - mencionó él. 

Marinette lo miró confundida. - ¿Cómo? - él volvió a sonreír. 

- George dijo que en un evento familiar cuando recién te adopté, Chloe se burló de ti porque eras la única que no tenía un caballo personal - comenzó a decir. 

Marinette sonrió con suavidad recordando aquel momento. 

- Eso es clara señal de que nunca serás una de nosotros, Marinette. El apellido sólo es tu adorno - expresó la rubia con despotismo. Usual en ella a tan corta edad. 

Ella se cohibió un poco, pero no dijo nada. - Marinette - la llamó Louis con una suave sonrisa. La azabache enfocó sus azules ojos en su castaño favorito. - Acompáñame, puedes ir conmigo en mi caballo - propuso. 

- ¿Enserio? - preguntó ilusionada a sus casi 14 años. Louis la miró algo sonrojado y asintió. - Anda, te cuidaré muy bien - dijo extendiendo su mano a ella. La cual Marinette tomó sin dudar. 

Louis la ayudó a subir al caballo y luego subió a él, abrazándola con delicadeza. - ¿Lista? Me detendré en el momento que quieras - 

Y con las quejas de Chloe tras ellos, emprendieron el pequeño paseo. 

- ¿Marinette? - la llamó Thomas.

- Lo siento, sólo... recordaba - respondió abrazándose a sí misma. 

Thomas abrió una de las caballerizas, sacando de ahí una preciosa yegua en color blanco. Encantando al instante a Marinette. - Ella es Tikki, será tu mejor amiga en este lugar - expresó acercándola a Marinette. 

- Es... Es preciosa - susurró acariciándola. - Es una pura sangre. Hice el trato para comprarla hace años, pero quería esperar a que Tikki creciera un poco más, que fuera adecuada para ti -

Marinette lo miró algo seria. - Entonces... ¿Es mía? - 

Thomas asintió con una suave sonrisa. - Toda tuya - 

Ensillaron los caballos y comenzaron con un tranquilo paseo hacia las extensas tierras de las que él era dueño. Y no sólo él, también Marinette. 

Ataron los caballos a un árbol y caminaron un poco. - Entonces... ¿Qué hiciste después de "desaparecer"? - preguntó Marinette. - En sí nada - respondió con honestidad. - Era sólo un niño en ese entonces. Mi tía Marianne, era demasiado dura conmigo. Demasiado exigente para sólo tener 5 años - 

- Me encantaba pasear por los alrededores, no había peligro alguno porque mi padre tenía todo muy bien vigilado y todos los empleados me conocían. Mis días pasaban en ignorar los regaños de la tía y centrarme en mi hermana mayor - respondió. 

Todo Comenzó en un Barco (Miraculous AU)Where stories live. Discover now