▪42▪

324 40 9
                                    

「part.2」

〖 𝓢𝓮𝓷𝓽𝓲𝓶𝓲𝓮𝓷𝓽𝓸𝓼 〗

Una vez más Hitch y yo acordamos reunirnos, ya que no pudimos estar a solas por completo y sin movernos de un lado a otro. Fue al día siguiente cuando acordamos vernos.

La esperaba en el parque que estaba cerca de la academia, miraba a las personas patinar sobre el hielo. Note la nieve falsa que habían montado, jamás la había visto, ese año fue el primero.

Estaba recargada en el respaldo de la banca, me mantenía calientita a través de la chamarra de mi color favorito.

Miré a Hitch acercarse con una mochila y me levanté para saludarla. Sus ojos brillaron al mirar la pista de hielo, corrió hacia mí para abrazarme y ponerse sus patines en seguida.

Ella estuvo patinando por un rato, la gente le aplaudía o la miraba cuando hacía algunos movimientos o molinetes. Sin duda era muy buena en lo que hacía.

Me mantuve pensativa en cómo iniciaría la conversación. Hitch me miró con una sonrisa, se acercó a mí y se sentó.

—Ah, ahora sí, cuéntamelo todo —comentó quitándose los patines.

—Creo que me gusta alguien, Hitch —confesé mirando los edificios alejados frente a nosotras.

—¿Es el chico llamado Jean? Es súper buena onda, ahora entiendo el porqué... —respondió guardando los patines en la mochila.

—No es él —añadí—. El hermano de Mikasa.

—Ah—rió—, Ackerman, el hijo de la persona que te la pasabas hablando cada día de tu vida, me debí imaginar.

—No debería sentir esto por él —respondí.

—Enamorarse no es un delito, es natural —se puso el gorro de invierno en su cabeza.

—No para mí, no en este momento —comenté cruzando una de mis piernas.

—Mmm creo que deberías de darte la oportunidad de querer a alguien más, lo de tú y Reiner ya fue hace seis meses...

—Reiner, el idiota de Reiner —coloque el codo en mi rodilla y recargue mi mandíbula en la palma de mi mano—. ¿Acaso no puedo dejar que me persiga por una sola vez en la vida? —hice una pausa para hablar de la bestia del piano—. Hay una cierta parte de mi que no acepta, aún, este sentimiento que tengo hacia él y lo único que puedo oír es: te hará daño. Hitch, ¿eso es cierto? —el pavimento comenzaba a mirarse distorsionado—. Levi, la persona que quiero y admiro... ¿Sería capaz de hacerlo? —mi mejilla se humedeció—. Pasar tiempo con él es algo que solo he sentido una vez en la vida y bailar con él es lo que quiero por ahora. Pero a la vez esa pequeña voz va incrementando con mi sentimiento, que pasaría si decide traicionar mi confianza, que pasaría si él no siente lo mismo o que pasaría si él también decide irse.

Limpié con el dorso de mi mano algunas lágrimas y Hitch me abrazó.

—No pienses que todos son idiotas como Reiner —comentó.

Sí, llegué a extrañarlo. Pero no la parte donde me trataba como algo más. No todo el tiempo fue así, no malinterpreten, realmente me quería, llegó a quererme.

Iba a recogerme después de las clases de ballet.

Al cenar carne él mismo se ofrecía a cortarla por mí.

Viajábamos en su coche a la tienda más cercana para comprar mis zapatillas.

Lo apoyaba en lo que pudiera, pero después de un tiempo deje de recibir el mismo cariño.

océan parfait | Levi Ackerman [editando]Where stories live. Discover now