Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C093 - ¿Quién es el padre del niño?

◦✤✤✤◦

Con los ojos bien abiertos en la oscuridad, Yan Qiu vio la imagen borrosa de la luna junto a la cama.

Desde detrás de él, un par de brazos lo rodearon suavemente antes de abrazarlo con fuerza. Yan Qiu fue entonces arrastrado al abrazo de Ji Xinglan.

Yan Qiu podía sentir claramente los latidos de su corazón y escuchar su respiración.

Ji Xinglan levantó un poco la cabeza y vio la luz plateada de la luna brillando en el perfil de Yan Qiu. Sintiéndose travieso, pellizcó la mejilla de Yan Qiu. ―Es bastante delgado.

La mente de Yan Qiu originalmente fue directamente a la alcantarilla, pero muy pronto se dio cuenta de que Ji Xinglan estaba hablando de su cintura. Naturalmente, pensó que Ji Xinglan sólo estaba diciendo que aún no se le notaba, así que dejó escapar un humm.

Las estructuras biológicas de los omegas los hacían aptos para el embarazo. No sufrían tanto como los demás, incluso cuando aún no se habían desarrollado en sus géneros secundarios.

Un estrecho canal conectaba la cavidad reproductora de un omega con sus intestinos. Se abría cuando estaban en periodo de celo. Cuando estaban embarazados, la cavidad reproductora se cerraba para proteger al bebé.

Además, con los avances técnicos médicos actuales, las omegas no corrían ningún riesgo durante el embarazo, y este récord ha durado décadas. No sólo estaban a salvo de todas las probabilidades, sino que, una vez estabilizado el feto, podían incluso realizar algunos ejercicios básicos sin problemas.

Pero ésta era la primera vez que Ji Xinglan se convertía en padre. Aunque el médico le había dicho con tacto que podían dormir juntos mientras Yan Qiu estaba embarazado, no hizo ningún movimiento. Sólo lo abrazaba, sentía lo suave que era la piel de Yan Qiu y lo cálido que era, para satisfacer sus impulsos.

Era una bendición poder abrazar a alguien para dormir durante las noches de invierno. Yan Qiu se acostó de lado, con el gran cuerpo de su alfa apretado contra su espalda. La temperatura de su cuerpo no sólo se filtraba a través de la fina ropa de Yan Qiu, sino que también podía oír los constantes latidos de su corazón.

Siempre que estaban solos en la casa, Ji Xinglan no se molestaba en controlar sus feromonas.

Cada vez que un alfa liberaba sus feromonas cerca de un omega, básicamente le estaba diciendo sin reparos al omega que se sentía amoroso y que una parte particular de su cuerpo estaba dura.

Yan Qiu sintió que todo su cuerpo estaba empapado de feromonas. En algún momento, su bata de baño se había abierto.

Cerró los ojos y se entregó antes de recordar algo de repente. Giró la cabeza y le preguntó a Ji Xinglan con preocupación: ―Dime, ¿crees que mi cintura será tan gruesa como la tuya en unos meses? 

Ji Xinglan frunció los labios y deslizó las manos por el cuerpo de Yan Qiu para pellizcarlo en venganza. ―¿Estás diciendo que mi cintura es gruesa? 

Como alfa, las proporciones de su cuerpo eran perfectas. Su cintura era fina y sus piernas largas y musculosas. Su cuerpo era poderoso pero no voluminoso.

Tenía esa combinación ideal entre la delicadeza de un adolescente y la sensualidad de un alfa adulto.

Cada vez que mostraba su línea V, todas las omegas excitadas gritaban y hablaban de los perfectos abdominales del ídolo escolar y de cómo iban a quedarse embarazadas en cuanto lo vieran, en los foros.

Nunca nadie había despreciado su figura. ¡Jamás!

¿Cómo podía Yan Qiu fabricar falsedades y mentiras, y despreciar a su propio marido?