Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C094 - Educación Prenatal

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El padre del hijo de Yan Qiu apareció de repente con un aire asesino. Desprendía un aura hostil.

Los dos alfas que estaban luchando entre sí parecían electrocutados. Sintieron que un escalofrío desde sus cráneos viajaba directamente hasta los extremos de sus espinas dorsales, y después de temblar violentamente, ya no se atrevieron a hacer un sonido.

Xie Yu sabía que el padre del niño había llegado, así que ya no dijo nada. Mientras tanto, Chen Gou era del tipo que sólo intimida a los débiles, y sólo se atrevía a usar su tamaño para luchar contra Xie Yu. Cuando se encontraba con un alfa al que no podía ganar, se convertía inmediatamente en un cobarde.

Ambos habían recordado haber experimentado lo imponente que era un alfa de primera clase la última vez, así que ya no se atrevieron a luchar.

Yan Qiu estaba atrapado en esta lucha a tres bandas por el poder, y ya podía sentir un dolor de cabeza.

Apenas había estado fuera de la vista de Ji Xinglan por cinco minutos y este tipo vino a perseguirlo. Incluso lo atrapó con las manos en la masa.

Sólo habían sido cinco minutos. Olvídate de tratar de engañarlo, ni siquiera habría tenido tiempo de hablar con esta gente.

Xie Yu y Chen Gou habían decidido temporalmente pactar una tregua. En su lugar, dirigieron miradas cautelosas al alfa que tenía una mano en el marco de la puerta. Observaron cómo agarraba la muñeca de Yan Qiu y se marchaba.

Cuando desaparecieron de la entrada, la presión de sus feromonas finalmente desapareció.

Las dos personas que estaban en el lavabo salieron de su aturdimiento.

―¿Qué está pasando? ¿No eres el padre del niño? ―Chen Gou entrecerró los ojos. El pliegue del entrecejo se arrugó y sus ojos brillantes estaban llenos de perplejidad.

Parecía que la etiqueta de 'tramposo' estaba estampada en las cabezas de Xie Yu, Chen Gou y Yan Qiu.

―¡Padre, mi pie! ―Xie Yu no podía tolerar que alguien calumniara a su jefe, así que golpeó a Chen Gou con la escobilla del inodoro.

Cuando se dio cuenta de que era sólo un malentendido, Chen Gou finalmente apartó la mirada con resentimiento.

¿Así que el niño era realmente de Ji Xinglan?

―¡Duh! ¡Soy el hermano mayor del niño! 

Xie Yu se quedó mirando el zapato de Chen Gou. Estaba en su camisa, y una huella sucia fue dejada atrás. Él sabía que definitivamente iba a ser regañado cuando fuera a casa ahora. ―¡Suéltalo! 

. . .

Ji Xinglan colocó su chaqueta casualmente sobre su hombro y, sin decir una sola palabra, arrastró a Yan Qiu en la dirección que se alejaba del campo.

Cuando las emociones de los alfas se enfurecieron, no pudieron controlar sus feromonas.

Pero en su ira, no se dio cuenta de que estaba liberando feromonas aterradoras mientras caminaba, y ningún alfa en un área circular de diez metros podía resistirlo.

Qué infantil. Este era claramente su bebé y el de Yan Qiu. Su sangre fluía en el niño. Esos bastardos no podían interferir

Trabajó duro para conseguir al bebé. ¿Acaso hicieron algo por eso?

Ji Xinglan nació con piernas largas y caminó rápido, por lo que Yan Qiu casi no pudo seguir sus pasos.

Cuando vio que Yan Qiu se tambaleaba un poco, Ji Xinglan no dijo nada pero redujo la velocidad.