Mimosa - Nadie sabe que te quiero

｢Extra X｣ - Li Chengyan & Xie Yu (3)

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La madre de Xie Yu volvió a la sala de estar y no se dio cuenta del extraño ambiente que había entre los dos. Se limitó a servir a Li Chengyan.

Había pasado mucho tiempo desde la última vez que se vieron, así que la madre de Xie Yu tomó la mano de Li Chengyan y le hizo todo tipo de preguntas. También estuvo a punto de hacerle pasar la noche.

Xie Yu sabía que si se lo pedía de verdad, lo más probable es que Li Chengyan no rechazara la oferta.

Mientras estaban sentados en la mesa del comedor, la madre de Xie Yu se reía de todas las cosas que habían hecho en el pasado. Pero ella era la única que pensaba que eran bromas.

Con la barbilla apoyada en la palma de la mano, Li Chengyan cooperó con ella y la escuchó con una sonrisa.

Hacía mucho tiempo que la madre de Xie Yu no tenía a alguien dispuesto a escucharla cotorrear. Xie Yu era de los que se impacientan después de escucharla hablar aunque sea un poco.

En comparación con él, Li Chengyan le parecía aún más agradable a la vista.

Venía de una buena familia, tenía buena apariencia y era culto. Estaba a leguas por delante de su descuidado hijo.

Mientras escuchaba a su madre hablar sin parar de su pasado y de las veces que había mojado la cama, Xie Yu se metió la comida en la boca y casi enterró la cara en el cuenco.

―Xie Yu era inmaduro entonces. ―La madre de Xie Yu se burló de él con una sonrisa: ―No te preocupes, Chengyan. Si quieres, puedes besarlo

Con el permiso de la madre de Xie Yu en la mano, Li Chengyan sonrió débilmente. Miró fijamente a Xie Yu como un águila mira al conejo.

Hizo que la piel de Xie Yu se erizara y su nuez de Adán se moviera.

¡¿Cómo pudo su madre traicionarlo así?!

. . .

Terminaron la cena. Xie Yu no comió mucho. Ya estaba lleno al escuchar las historias de su madre sobre él.

Sólo ahora se daba cuenta de lo escandaloso que había sido durante el jardín de infancia.

Antes de la pubertad, Li Chengyan era justo y delgado, y tenía hermosos rasgos faciales. Por eso, Xie Yu lo trataba como el omega más lindo de la clase y le gustaba mucho.

Por lo tanto, Li Chengyan, que había hecho la prueba del alfa al nacer, era tratado como un omega por el niño tonto.

Xie Yu besaba a menudo la mejilla de Li Chengyan, lo que aterrorizaba al 'dulce omega'.

Más tarde, la familia de Li Chengyan se mudó y él cambió de escuela. Xie Yu no volvió a encontrarse con él después de eso, hasta ahora.

Mientras escuchaba a su madre dar vivas descripciones de lo mucho que intimidaba a Li Chengyan y lo lamentable que había sido Li Chengyan, Xie Yu se sentía culpable.

Mientras su madre limpiaba los platos, Xie Yu se acercó a Li Chengyan con pesar en su corazón, y le preguntó en voz baja: ―¿Cómo te intimidé exactamente? 

Li Chengyan lo miró y dijo con aire de superioridad: ―Me besaste.

Xie Yu no quería escuchar esto. ―¿Qué más? 

Pero Li Chengyan se limitó a repetirlo: ―Me besaste.

No importaba de cuántas otras maneras Xie Yu lo intimidara. Esto era lo más importante.