Capítulo 26: Preguntas importantes

1.2K 133 48
                                    

Se giró segundos más tarde de que escuchase que la llamaba. Está delante de mí. Algo intranquila. Sus ojos verdes me apuñalan el esófago. ¿Cómo es capaz de llegar tan dentro? No me aguanto. No aguanto verla delante de mí y no hacer nada más que contemplarla. ¡Oh, vamos! Joder, Gus. Sabes que no podemos hacer eso. No podemos. No puedo. Yo no puedo permitirme caer de ese modo otra vez. No puedo confiar en alguien que conozco de tan solo unos días. No puedo. No. No. No puedo. O no debo. Porque poder... Sí parece que pueda. ¿Por qué confiar en ella?, ¿por qué tan a ciegas? Y ¿por qué no hacerlo?

—Escúchame, Gus. Puedo irme al módulo yo sola. Puedo cuidarme yo sola. No me pasa nada. Estoy bien. Y aunque me pasase algo, no es de tu incumbencia. No tienes que estar como si fueses mi padre. No necesito a un hombre que me proteja. Sé hacerlo yo bastante bien. Así que... Gracias. Gracias por venir, pero mi respuesta es no. No quiero que vengas conmigo. Ya has oído a Jorge. Tienes que entrenar. Así que ve a entrenar.

Lo dice tan rápido, tan atropelladamente y tan nerviosa que agrando mis ojos sorprendido por sus palabras y me quedo un rato de más en silencio, contemplándola fijamente.

—¿Eso es todo?, ¿has terminado ya? —pregunto pausado.

—Sí. Eso es todo. —Se yergue en su postura y hasta casi me parece más alta de lo habitual.

—Bien. Toma. —Extiendo mi mano izquierda mostrándole su iPad.— Te lo has dejado en las bancas. Venía a devolvértelo.

Los ojos de Bibi se tornan más verdes. Más verdes y más profundos. Como una selva. Salvajes. Naturales. Embriagadores. Diferentes. Se me escapa una pequeña sonrisa torcida por el estiramiento de uno de los vértices de los labios.

—Yo... Yo... —Intenta hablar, pero no le salen las palabras.

¿Por qué me siento fuerte y débil a la vez? Quiero castigarla. Quiero regañarla por rechazarme, incluso cuando no le ofrecí mi ayuda. Quiero sentirla más cerca de mí. Quiero que sepa que puedo tener el control, si quisiera. Si quisiera... Pero con ella no quiero. Disfruto con seguir sus órdenes, a medias. Disfruto con esta dicotomía entre lo que parece que queremos hacer y lo que hacemos. Me siento como un muñeco en sus manos si ella me lo pidiese. ¡Joder! ¡Joder! ¿Qué está pasando?, ¿por qué logra dominarme de ese modo?

Estira su brazo para alcanzar el iPad y yo lo elevo por encima de mi cabeza. Levanto el brazo sin estar estirado por completo, sin embargo es suficiente para que ella no llegue. En su intento por recoger el dispositivo pisa un paso más cerca de mí. Aún no está todo lo pegada que siento que la necesito tener. Es una locura. Esto es una locura. Sus cejas cambian de posición y su rostro se asemeja más al de una Bibi bastante molesta conmigo.

—¿Qué haces? —pregunta con rabia.

—No me ha gustado lo que me has dicho. Incluso sin ofrecerte mi ayuda, a veces puedes llegar a ser irritante, Bibiana —pronuncio su nombre casi separándolo por sílabas.

—Dámelo. —Da un paso hacia delante.

—Cógelo. —Reduzco la distancia entre los dos, adelantándome un paso, aún con la mano en alto.

—Gus. Para. Estoy mareada. No tengo un buen día y... encima... Encima tú me mientes. Dijiste que Jorge sabía lo de las entrevistas. ¿Para qué me querías?, ¿para qué si tú sabes hablar inglés perfectamente?, ¿por qué llevarme a mí?

—Porque quería pasar tiempo contigo. —No temo admitirlo. Mi voz choca casi con la frente de Bibi. Ella está bastante pegada a mí, sin darse cuenta, y su cuello está completamente hacia atrás, obligándola a mirarme de lleno—. Y yo creo que tú también.

—¿Qué te hace pensar que yo quiero pasar tiempo contigo? —Su voz es seca y tranquila. La expresión de su cara no cambia. No lo hace para reírse de mí. No lo dice como un insulto, sino como una pregunta real. Bibi quiere saberlo. Quiere saberlo, quizás, para asegurarse de contenerse la próxima vez. Yo me voy a volver loco. Me voy a volver loco porque en realidad no sé si verdaderamente está esperando a que le responda.

Un amor de alturaWhere stories live. Discover now