Me convertí en una bestia espiritual y abracé el muslo equivocado

Capítulo 96

Martirio

Horrorizado, confundido . . . No había nada que describiera cómo se sentía en ese momento.

Mu Lin estaba arrodillado junto a Wu Ming, con la cabeza gacha y los ojos muy abiertos. Su rostro estaba inexpresivo, y el sudor frío seguía filtrándose, manchando su pelo y goteando por sus mejillas.

("Snap, snap . . ." ) El sudor goteaba sobre la solapa de Wu Ming, mezclándose con su sangre.

Sus hombros temblaron violentamente. Con un ruido sordo, Mu Lin levantó la vista y golpeó el suelo con el puño:
"¿Qué está pasando?"

"¡Mayor . . . . es el Demonio Nigthmare que quiero matar! ¿Por qué eres tú?"

El puñetazo fue lanzado con tanta fuerza que sólo escuchar el sonido dolía. La carne del dorso de su mano se abrasó, desangrándose en unos instantes. Sin embargo, Mu Lin no sintió ningún dolor, sólo miró fijamente a Wu Ming y murmuró: "Por qué . . . . . por qué . . . ."

"¿Cómo puedes ser tú . . . . . ."

Un rastro de sangre se derramó por la comisura de sus labios, Wu Ming giró la cabeza para mirar a Mu Lin y dijo lentamente: "A'Lin . . . . . lo siento".

"Lo siento . . . . . por mentirte durante tanto tiempo".

La sangre brotó del gran agujero de su corazón como un manantial, sus ropas blancas se mancharon de polvo, volviéndose de un miserable negro y rojo. Su piel estaba tan pálida que era casi transparente, pero sus labios estaban deslumbrantemente rojos por la sangre.

"¿Me has mentido? ¿En qué me has mentido? ¿Por qué lo sientes ?" Mu Lin rompió en llanto: "¿Eres Nigthmare?¿Eres mi enemigo?¿Entonces por qué me salvaste en la Formación Siete Muertes?¿Por qué me enseñaste el manejo de la espada?" Mu Lin gritó: "¡Habla!¿Qué está pasando?"

Mu Wuqing no era mucho mejor que Mu Lin. Como si no pudiera oír las preguntas y los rugidos de Mu Lin, su cara estaba tan fría como la escarcha, y no dijo ni una palabra, mirando fijamente la herida de espada en el pecho de Wu Ming, presionando su muñeca derecha para canalizar su energía espiritual.

Pero la velocidad del flujo de energía espiritual era mucho menor que la velocidad de la pérdida, mientras la respiración de Wu Ming se hacía cada vez más débil, y el rostro de Mu Wuqing se volvía cada vez más pálido.

El resto del grupo estaba aún más aturdido por este giro de los acontecimientos, congelados en sus pasos y sin atreverse a acercarse. Solo Yi Shu miró suavemente hacía otro lado, incapaz de soportar mirar más.

Mientras Mu Wuqing estaba distraído y Mu Lin en estado de confusión, Xu Feng rompió la semilla de mostaza con todas sus fuerzas y cayó de rodillas junto a Mu Lin.

"¡A'Lin! ¡Maestro de la Espada!"

"Mayor . . . ." Xu Feng sostuvo la espada inmortal hecha del hueso de costilla en una mano y se la entregó a Wu Ming, ahogándose. "La Espada Floreciente Flor de Durazno, ¿por qué está en posesión de Nigthmare?"

La espada era muy familiar para Mu Lin y Xu Feng: en el sendero de la montaña, en la tormenta de lluvia con el sombrero de bambú y abrigo de paja, había matado a todos los demonios con la espada; en la Formación Siete Muertes había usado esta espada para dividir la oscuridad y arrastrarlos fuera de esas ilusiones; en el sueño Primavera de Flor de Durazno usó esta espada para levantar la jarra de vino y atrapar las flores de durazno que caían del cielo . . . . .

Tras la despedida de Wu Ming, Mu Lin se quedó mirando el Espejo Flor Luna de Agua innumerables veces, observando aquella espada danzante, recordando la técnica de espada que Wu Ming le había enseñado, y grabando firmemente en su corazón las tres figuras bajo el árbol de flores de durazno.