La princesa de dragones

My name

Los días pasaban en el norte, eran agradables dentro de lo que cabía, me pasaba la mayoría del tiempo en compañía de Sansa, incluso llegue a hablar con el hombre de barba rojiza cuyo nombre resultó ser Tormund y estaba locamente enamorado de Brienne, era gracioso ver su cara cuando ella estaba cerca. Ya habían llegado varias cartas confirmando la reunión de los señores, Jon aún no sabía nada... de hecho el me evitaba a toda costa, a veces solamente me saludaba por cortesía pero no pasaba más haya de ello, Tormund me contó que conoció a una salvaje del otro lado del muro y que ella murió... el la amo demasiado, yo sabía que Jon no tenía interés alguno en mí, nunca respondió mi carta y lo entendía, al morir Robert pude haber ido al muro, fugarnos juntos... pero no podía, el era un hermano juramentado y yo estaba en la espera de un hijo, además de que Dany me necesitaba, primero está el deber y luego el amor.
Estaba paseando por el castillo, estaba sola y escuché ruidos provenientes de una habitación, camine hacia ella tratando de no hacer ruido, cuando abrí la recámara ví a Jon, no tenia la camisa puesta y su mano estaba sangrando, las cosas estaban regadas por la habitación, supuse que el las había tirado, su respiración era acelerada y su cuerpo se veía tenso.
-¿Jon? ¿Estas bien?-. Dije preocupada desde la puerta.
-Si princesa, estoy bien, sólo un arranque, es todo-.
-Jon... Somos más que íntimos como para que te dirijas a mi por mi título, tenemos una historia lo quieras reconocer o no-.
-Esta historia murió cuando te casaste con Robert y se sepultó cuando te casaste con el hombre que ordeno la muerte de mi hermano-.
-Sabes que tenía que hacerlo... Me consideraban una traidora, de no haberlo echo Joffrey habría pedido mi cabeza-.
-Tu hermana hiba a ser reina, como te podrían haber lastimado -.
-Tu sabes que Cersei me odia, me odiaba a mi, a mi familia... De no casarme con Tywin no estaría aquí, Tywin era el único que podía impedir mi muerte... Y aún así no pude evitar el destino de mi familia, Cersei los aniquiló a todos y quiero mi venganza... ¿crees que mi vida allí fue un lecho de rosas Jon? Tuve que dejar a mi hijo recién nacido para viajar al otro lado del mundo en busca de mi hermana, soporte semanas sin comida en medio de un desierto, intentos de asesinato, no solo en mi contra si no en la de mis hijos, no eh visto a mis hijos en meses, no estaré allí para verlos decir sus primeras palabras, sus primeros pasos pero todo lo hago para que tengan un mundo mejor cuando yo no esté, eh soportado Miles de cosas, cosas horribles, eh matado, eh sido humillada, ultrajada y rebajada a nada no solo por una persona... Eh derramado Miles de lágrimas, ni siquiera pude estar con mi familia en sus últimos momentos, pero también eh luchado, eh montado a lomos de mi dragón sintiendo el viento en mi rostro y siendo feliz, eh conocido lugares los cuales nunca soñe visitar, le eh dado esperanza a aquellos que no la tienen; una luz en la obscuridad y ni tú ni nadie me hará sentir mal al respecto de mis decisiones-. Dije saliendo de la habitación sin esperar respuesta, aunque trataba de controlar mis emociones no podía, con el no podría mantenerme en calma, con el todo era distinto.
Pase el resto del día en mi habitación, Sansa estaba algo indispuesta por lo cual no pude estar con ella.
Cuando la cena llegó, pedí que se me entregará en la recámara, no tenía nada de ganas de confrontar a Jon.
Pasaron solo unos días y todos los Lores estaban reunidos para discutir la situación, estábamos en el salón, en el centro estaba Jon y a su lado Sansa, parada protegiendo a Sansa estaba Brienne, yo estaba sentada a lado de Jon, sin embargo evitaba tanto contacto con el.
-Majestad, a que nos ha convocado en esta ocasión-.
-Me temo mi señor que ni siquiera yo lo sé, mi hermana y nuestra invitada han sido las responsables de esta reunión-.
-Los eh reunido para discutir un asunto de mayor importancia para todos en el norte-.
-¿Cual es ese majestad?-.
-El derrocamiento de los Lannister y la ascensión al trono de la legítima reina de Poniente; Daenerys Targaryen madre de dragones-.
-¿La hija del rey loco? Por que la querríamos a ella en el trono-.
-En estos momentos ella es la mejor opción que tienen-. Dije yo.
-¿Y quien es usted?-.
-Mi nombre es Dracarys de las Casas Targaryen-Tyrell soy la princesa de Rocadragón y por lo tanto heredera al trono-.
-¿Acaso Dracarys no era el nombre de la segunda esposa de Robert Baratheon-. Pregunto un lord.
-En efecto mi señor, esa mujer soy yo, soy el fruto de la unión de Aerys Targaryen con Lady Maryella Tyrell de Altojardin-.
-Nos unimos para derrocar a el rey loco y ahora nos piden que nos unamos para poner a su hija y a su bastarda en el trono de hierro, acabamos de salir de una guerra y nos piden adentrarnos a otra-.
-Yo no soy su enemigo, ni mi hermana ni yo lo somos... Nosotras somos las hijas de nuestro padre, sin embargo no somos el y no tenemos por que cargar con sus actos... Nosotras no fuimos las que cortamos la cabeza de Lord Stark, nosotras no fuimos las que planeamos la boda roja, nosotras no fuimos las que tomaron Invernalia, los Lannister son el dolor que nos aqueja a todos nosotros, el verdadero enemigo está allí afuera, sentada en el trono de Hierro y no se detendrá hasta tener nuestras cabezas en una estaca a menos de que nosotros ataquemos primero los Lannister iniciaron esto, ustedes son el enemigo de mi enemigo y por lo tanto mi amigo... Solamente pido justicia, por la vida de mi familia, Cersei los mato a todos, mato a mi padre, a mi hermano y a mi hermana, quiero venganza, quiero que pague tanto como ustedes-.
-La locura corre por sus venas... Como confíar-.
-Asi como estuvo mi padre estuvo Jahaerys El conciliador, Alyssane, Aegon, el caballero dragón, todos Targaryen... Por que yo o mi hermana seríamos la diferencia, Daenerys a liberado ciudades enteras de la esclavitud, tiene un ejército de Dothrakis a los cuales incluso Robert les temía, tiene mercenarios, tiene Inmaculados los cuales la siguen por que le tienen fe, tiene dragones, no les pido su lealtad a ella, si no una alianza, nos reconocemos como soberanos gobernantes y nos unimos por una causa común-.
-Es su decisión majestad-. Le dijo Davos a Jon.
-Hace años dejaste Invernalia y nunca creí volver a verte, hoy estás aquí pidiéndome ayuda a pesar de  los riesgos... Por que tienes la certeza de que te ayudaré, si no lo supieras no hubieras recorrido tanto, no hubieras dejado a tu hijo, tú siempre haces todo por un cometido... Siempre admire tu sentido del deber, siempre fue eso antes que todo, incluso antes que tu corazón, el enemigo de mi enemigo es mi amigo...
-El norte se unirá para derrocar a los Lannister y vengar la muerte de mi familia, sin embargo no las reconocemos como soberanas de nuestras tierras, Los Starks gobiernan el norte AHORA Y SIEMPRE-. Dijo Sansa.
La reunión se dió por terminada, sin embargo se convoco una junta del consejo de Invernalia, al cual yo tendría que asistir como aliada.