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-Creo...que me veo bien.- Murmuraba una media pelirosada mientras se veía al espejo. Vestía un top beige con una falda blanca, dejando ver parte de su abdomen. O al menos la parte que no tenía cicatrices. Dejo su pelo suelto como de costumbre y se puso unos tenis blancos.

Al ver su celular noto que tenía un mensaje de Kirishima.

Tiburoncin

🔴Suerte en tu cita ;)

Fuiste tú el que me metió en esto idiota -.-

🔴Te divertirás!

Aja

En eso sonó el timbre. Bueno...aquí vamos

En seguida tomo su teléfono y un pequeño bolso blanco donde guardaba dinero y se dirigió a la puerta. Al abrirla era nada más y nada menos que Bakugo Katsuki, quien vestía una camisa negra y un par de janes azules. Bastante casual.

-¿Te vas a quedar ahí parada todo el tiempo?- Le preguntaba Bakugo.

Tsukiyama rodo los ojos por el comentario y salió junto al rubio. –Si no quieres salir conmigo solo dilo y nos ponemos de acuerdo para ver que decimos cuando los demás nos pregunten como nos fue.-

-¿Estas sorda? ¿Acaso dije que no quería salir contigo?-

En ese momento por alguna extraña razón en las mejillas de la chica pareció un sutil rubor. -¿A dónde iremos?-

-¿A dónde quieres ir?-

-¿Te parece si vamos por un ramen? Hay un lugar que recién abrió y tienen los ramens más picantes de la ciudad.-

En ese momento apareció un brillo en los ojos de Bakugo al escuchar la palabra picante. No dudo ni un segundo y fueron a dicho lugar.

En cuanto llegaron al restaurante de ramen pidieron aquel platillo no sin antes haber decidido que competirían por ver quien aguantaba más.

-No perderé idiota extra.-

-Bueno, no vengo a perder tampoco Kacchan.-

-Perdonen la demora.- Decía le mesera mientras venia cubierta por completo de la cara junto con otros dos meseros que sostenían cada quien un plato y ambos estaban cubiertos de la misma forma.

En cuanto olieron el aroma los ojos de ambos casi lagrimeaban en automático.

-Si lo terminan en menos de una hora su comida es gratis.-

-¿¡NOS ESTAS RETANDO!?- Bakugou gritaba.

-Discúlpelo, le falta una neurona...o tal vez varias.-

-Es una promoción del restaurante, nadie ha podido terminarse eso sin salir corriendo.-

-Entonces es un reto.- Decía un desafiante Bakugo.

-Hey, tienes el reto conmigo no con el lugar.- En ese momento la mesera se alejó sutilmente de aquella escena.

-Kacchan, amo la comida picante pero esto huele a peligro.-

-Débil, no esperaba menos.- Dijo y en seguida se metió un buen bocado de ramen. (T/N) espero a ver su reacción. En cuestión de segundos la cara del rubio comenzaba a sudar ligeramente mientras se pasaba aquel trago con pesadez.

La chica hizo lo mismo y en ese momento deseo no haber nacido. Este nivel de picante era otro, ni siquiera era un pica rico. Era un pica en bruto. (Mexicanos entienden xd)

Mi otra mitad (TodorokixReader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora