Capítulo 103

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CIENTO TRES

CIENTO TRES

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Era una noche fría. En una habitación en la casa de los Dursley, se encontraban dos jóvenes con sus mascotas totalmente dormidos.  Harry roncaba escandalosamente en su cama. Mientras que Hannah había pasado casi cuatro horas sentada en una silla junto a la ventana de su dormitorio contemplando la oscura calle, y al final se había quedado dormida con un lado de la cara pegado al frío cristal con la boca abierta. El resplandor anaranjado de la farola que había frente a la casa hacía destellar la mancha de vaho que su aliento dejaba en la ventana, y la luz artificial le hacía palidecer el rostro, que parecía el de un fantasma bajo la mata de desgreñado cabello castaño.

La habitación estaba semi acomodada, al menos en la parte de Hannah quien tenía todo plumas, libros, cuadernos sobre su cama en la cual dormía Crott entre el montón, en el lado de Harry habían varios objetos y bastante porquería esparcidos por la habitación: plumas de lechuza, corazones de manzanas y envoltorios de caramelo cubrían el suelo; unos libros de hechizos entremezclados con una arrugada túnica se hallaban encima de la cama, y sobre el escritorio, en medio de un charco de luz, un montón de periódicos. El titular de uno de éstos rezaba:

HARRY Y HANNAH POTTER: ¿LOS ELEGIDOS?

Junto a ese periódico había otro con el siguiente titular:

SCRIMGEOUR SUSTITUYE A FUDGE

La mayor parte de la primera plana la ocupaba una gran fotografía en blanco y negro de un hombre con espesa melena de león y el rostro muy castigado. La fotografía se movía: el hombre saludaba con la mano al techo.

A la izquierda de ese periódico había otro doblado que mostraba un artículo titulado «El ministerio garantiza la seguridad de los alumnos».

El resto del artículo estaba tapado por la gran jaula que le habían puesto encima. Dentro de ésta había una espléndida lechuza, blanca como la nieve, que recorría imperiosamente la habitación con sus ojos de color ámbar y de vez en cuando giraba la cabeza para mirar a Hannah. En un par de ocasiones hizo un ruidito seco con el pico, impaciente, pero Hannah dormía tan profundamente que no la oyó.

En el centro de la habitación se hallaban dos enormes baúles con las tapa abiertas, como expectante; sin embargo, estaban casi vacíos: dentro sólo había ropa vieja, caramelos, tinteros gastados y plumas rotas que cubrían el fondo. Cerca de ellos, en el suelo, habían unos folletos de color morado con el siguiente texto impreso: Distribuido por encargo del Ministerio de Magia

CÓMO PROTEGER SU HOGAR Y A SU FAMILIA CONTRA LAS FUERZAS OSCURAS

La comunidad mágica se halla en la actualidad bajo la amenaza de una organización compuesta por los llamados «mortífagos». El cumplimiento de las sencillas pautas de seguridad que se enumeran a continuación lo ayudará a proteger de ataques a su familia y su hogar.

Mi patronus ¿Una Potter? Parte I -Draco MalfoyOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz