"Werehog" por una Noche. (Sonic y tú)

★#6-Gruñidos★

Los erizos se quedaron solos en la cocina una vez Tails se marchó para contactar con el Profesor, el cual, la última vez que Sonic supo, debía de estar en Shamar continuando sus investigaciones.

Pero dejando de lado a los científicos, miró de reojo a la chica a su lado... lo que conllevó a que alzara bastante la vista por los nuevos cambios. (T/N) siempre había sido un puñado de centímetros más alta que él, pero el hecho de que ahora tuviera Dark Gaia Energy en su cuerpo que la afectara del mismo modo que como lo hizo con Sonic en su momento hizo que ahora su altura máxima se alzara a por lo menos una cabeza sobre su persona. Tal vez más.

Lo que simplemente le remarcó el desastre que había hecho.

Y ver la expresión de la chica de nuevo luego de lo que había dicho Tails solo le empeoró el sentimiento. Indudablemente, ella estaba molesta. Pero si Sonic recordaba bien su propia experiencia, sabía de sobra que los sentimientos debajo de esa irritación se acercaban más a la preocupación y a la angustia por su "nueva condición".

Pero por fuera, el rostro de (T/N) se amargó y sus ojos le devolvieron una mirada de desprecio desde arriba, con la cual soltó un gruñido.

Se dió la vuelta y fue a la sala rechinándo los dientes y pisoteando. Sonic, aunque nervioso, no dudó en seguirla.

"Estúpido erizo que no piensa en nada..." logró escucharla murmurar. "Siempre arruinándolo todo..."

Él suspiró, afectado. "Oye, ya te dije que lo siento. Créeme que esto es lo último que hubiera querido que pasara" la vió llegar al sofá y dejarse caer en él, cruzándose de brazos con amargura. El sofá crujió audiblemente con el nuevo peso de la chica, pero aparte de hacer que las sus orejas se crisparan, ambos lo ignoraron. "A quién fuera"

"Bueno, pues lo hecho, hecho está y tú eres un maldito estúpido que no sabe leer o prestar atención" masculló de vuelta, enfurruñada. "¿Ahora como se supone que vuelva a mi casa?"

"Nadie te está echando, te puedes quedar aquí hasta la mañana. Además, probablemente te tengas que quedar, de todos modos. Si Tails cree que es necesario hacerte pruebas y eso. Te dejaré mi habitación y todo"

Por el gruñido que produjo, eso no la satisfació.

"Ay, anda" Sonic se acercó a la eriza transformada e ignoró como el gruñido de advertencia que salía de ella se hacía más fuerte. Se dejó caer de rodillas al pie del respaldo y entrelazó sus manos como si fuera a rezar. "¿Por favor, perdoname?"

Y sólo para asegurarse de que se veía lo suficientemente arrepentido por sus acciones (lo cual indudablemente hacía), puso los ojos de cachorro más lindos que hubiera podido hacer en conjunto con un puchero triste, sabiendo de sobra que sus encantadores ojos verdes eran una debilidad para la muchacha. Después de unos segundos de ataque y ver cómo (T/N) hacia una difícil mueca entre ceder o mantenerse firme con su odio, el azul sintió que con un poco más lograría apaciguar a la chica.

Hasta que (T/N) produjo un gruñido involuntario.

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Uno de estos por día no suena mal, ¿Cierto?.

También les recuerdo que si se les ocurre algo que les gustaría ver en estos Drabbles, pueden ir a la Nota de Bienvenida al principio del libro y comentar en el lugar designado una palabra, situación o diálogo.

Tengan linda noche.

Adieu.