❤️#8-Vistazo rosa❤️

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La puerta se abrió suavemente e, inseguro, un ojo (T/C/O) se asomó por una rendija y los miró a todos hacia abajo con nerviosismo. Al estar en su visión, el erizo azul le sonrió amistosamente junto con Tails y le levantó un pulgar; una señal de que todo estaría bien.

Tragando saliva, la gran forma de (T/N) salió tímidamente de la habitación. La chica tuvo que agachar la cabeza para mirarlos, ahora mucho más alta que antes.

"Oh, mi..." la rosada abrió los ojos como platos, alejándose con los otros de la puerta para hacer espacio a la robusta eriza transformada.

Esta evitó mirarla directamente, con la orejas gachas y muy nerviosa ante ella por su nueva apariencia. Los chicos habían sido un caso diferente porque, bueno, no había habido remedio cuando se transformó en la sala, pero mostrarse a Amy voluntariamente fue una sensación muy diferente, como si... como si estuviera saliendo en ropa interior.

Así de expuesta se sentía.

"H-hola, Amy..."

La susodicha solo parpadeó, estupefacta, y miró el rostro ahora más peludo de su amiga; con un hocico alargado de color (C/P) claro/oscuro y una boca de donde sobresalían un par de colmillos de can. Siempre había tenido que alzar la mirada para ver los ojos (T/C/O) de (T/N), pero- ¡Diablos, ella era muy grande ahora!.

...

En más de un sentido...

Y tan fuerte era el cambio en su cuerpo que la eriza rosa se tomó un momento para examinar visualmente a su otra amiga eriza, queriendo aclarar mejor las imágenes que había captado de ella antes de que Sonic la atrapara en el porche.

Había conocido a (T/N) hace tres años, cuando Amy era una preadolescente bastante intensa de 12. La muchacha en cuestión, de 14 en ese entonces, se había vuelto amiga de Sonic y Tails unos meses antes y el dúo dinámico había empezado a introducir a la chica al resto del grupo, pues, la eriza mayor no tenía muchos amigos. Desde el principio, (T/N) siempre había sido más grande en más de una forma, lo cual no era muy común. Los erizos Mobian no solían crecer mucho, pues su especie era pequeña por naturaleza. En especial, los erizos hembras eran naturalmente más pequeños que los machos.

Pero (T/N) no.

(T/N) era más alta que el promedio, a saber por qué. Y Sonic, quien en sus actuales 18 poseía una altura promedio en conjunto con la gran población de erizos Mobian comunes, era vencido por la altura de (T/N). Ella era naturalmente un puñado de centímetros más alta que él, con los ojos (T/C/O) habiendo sido capaces de rebasar la frente azul desde que ambos se conocieron cuando Sonic tenía solo 15 años. Ni siquiera el estirón que tuvo que lo hizo rebasar su inicial altura de un metro había hecho algo para ayudarlo, pues (T/N) tuvo un estirón mayor que volvió a dejarlo más bajito que la muchacha.

Y también, (T/N) tenía sobrepeso.

Por supuesto, eso no era algo necesariamente malo. La gente siempre tenía la maña de pensar en una persona obesa con la palabra "sobrepeso", y (T/N) no era para nada obesa. Nuh-uh. Claro que no. Ni siquiera era lo suficientemente ancha como para poseer el calificativo de "gorda".

Médicamente, su peso sobrepasaba el considerado "promedio", y no solo para su especie como erizo. Para su altura y complexión, (T/N) era pesada, pero no era horriblemente enorme; era gordita y llenita, con una gruesa figura de pera o de campana bastante marcada gracias a sus caderas anchas a comparación de sus hombros. Tenía los brazos y piernas gruesas y, por supuesto, una barriga. Algo bastante natural dado a que era la zona más propensa a ganar peso con más facilidad y a perderlo con más dificultad. Así que sí: (T/N) tenía un vientre regordete que no era muy fácil de ocultar con la ropa.

"Werehog" por una Noche. (Sonic y tú)Where stories live. Discover now