CAP 2 UN CHANCE

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"Y de pronto, vi pasar al hombre más espectacular del mundo y desde ese momento supe qué haría todo para conquistar su corazón".

-Señora Natalia de Rogers... No... No...

-Señora Johansson de Rogers, no, ya sé... Solo será señora Rogers ¡Si! Se escucha tan lindo.

Natalia suspiró profundamente mientras dibujaba un corazón sobre su cuadernillo de apuntes. Colocó las iniciales de ambos S & N y decoró cada extremo con la punta de una flecha de cupido atravesándolo.

Cursi, pero Nat no había necesitado más para saber que alguien se había robado su corazón de un solo tirón.

Hacía exactamente tres semanas que había visto aquel misterioso hombre por primera vez y después de eso solo lo había visto atravesar los pasillos y entrar a su oficina desde el cubículo pequeño que le habían asignado como su área de trabajo, la cual decoró a su gusto a los pocos días, podría no ser una oficina enorme como la de los jefes, pero al menos sería suya durante el tiempo que estuviese ahí.

En fin, el destino era malvado, pero habían días en el que la suerte y la posición correcta le obsequiaba una vista espléndida, una donde a través del reflejo de los ventanales podía ver la silueta de aquel perfecto espécimen caminar por su oficina y rascar su barba, claro, sólo cuando la puerta de su oficina quedaba abierta.

Sin embargo, hacía exactamente 7 días en el que tanto el presidente como el vicepresidente de la empresa habían tenido que salir de viaje de negocios. Un viaje eterno en el que tanto ella como Liz fueron privadas de ver aquel par de hombres hermosos. Emily se había quedado a cargo junto a su esposo John quienes mantenían contacto directo con ambos hombres a través de video conferencias y en las que por obvias razones no eran invitadas.

Su período de adaptación había sido duro y Sadie no hacía las cosas más fáciles. Ella y Taylor se habían quedado juntos en el mismo piso mientras que Liz y Tessa habían sido enviadas al piso 6 para trabajar en el área de contabilidad. Si, la vida de adulto no parecía ser tan mala, su jefa inmediata, Emily, era muy considerada con todos ellos. Los trataban bien, era dulce y estaba al pendiente de que siempre tuviesen todo lo necesario para trabajar en las condiciones adecuadas.

-¡Despierta Nat!

Liz dejó caer una pila de carpetas sobre el escritorio de Nat causando que ésta pegara un respingo gracioso y que por inercia arrancara la hoja en la que había estado rayando para lanzarla al bote de basura.

-Lo siento, no te escuché entrar, he estado algo ocupada. -Nat se acomodó en su asiento completamente avergonzada para después evadir la mirada burlona que le dedicó su mejor amiga.

-Si, se nota cuán ocupada has estado, pensado en tu nuevo crush. -Lis se recargó en el marco de la puerta y se cruzó de brazos en espera de una mejor excusa. La había atrapado infraganti.

-¿Son los contratos que mencionó la señora Emily? -Nat trató de desviar la atención, Liz asintió para después entrar al cubículo y sentarse frente a su escritorio.

-Te tengo un chismecito recién salido del horno... -Liz bajó la voz y elevó ambas cejas de forma graciosa para llamar la atención de la pelirroja frente a ella.

-Sabes que no me gusta escuchar chismes de pasillo...

Nat rodó los ojos y continuó revisando los archivos que le habían llegado para luego abrir su correo en la computadora de escritorio que le habían instalado hace poco. Se suponía que Taylor le compartiría unos archivos también.

Lღcɑʍєитє Eиɑʍღʀɑdɑ 💕Where stories live. Discover now