Lღcɑʍєитє Eиɑʍღʀɑdɑ 💕

CAP 51 LLEGADAS

"Me quedo contigo, porque aún en nuestros malos ratos, sigues siendo una de las mejores cosas que podría pasarme". No me rindo así de fácil.

-¿Qué? ¿En serio? Es que es tan romántico. -La tía Rachel unió sus manos bajo su mentón mientras se retorcía de amor y alegría a la vez.

Liz, Rachel y Nat se encontraban en la sala de estar charlando, comiendo pizza y tomando un poco de vino blanco espumoso, bueno, a excepción de la tía Rachel quien solo estaba tomando jugo de manzana espumoso sin alcohol. Las tres chicas estaban pasando una tarde agradable tal y como solían hacerlo antes mientras él muy encantador, chismoso y caballeroso tío Chad trataba de arreglar una tubería rota en el cuarto de lavado, justo junto a la cocina.

El muy bobo se había ofrecido a repararlo aún cuando no tenía una sola idea de cómo hacerlo, pero bueno, era mejor que nada.

-Si, tía. Emily nos contó que de último minuto su madre decidió que sería aún más perfecto si ambos celebraban su 40 aniversario renovando sus votos.

Nat le explicó mientras se sentaba en el descansa brazos del sofá donde se encontraba su tierna tía Rachel, reposando su tobillo. La pelirroja se abrazó a su costado y su tía no dudó en acurrucarse contra su sobrina para corresponderle. Faltaban tan solo 4 días para el maravilloso día.

-Es la cosa más romántica que he escuchado últimamente. ¿Se imaginan? Un amor que perdure 40 años y que sea tan fuerte como para volver a contraer matrimonio. Es tan conmovedor. -Rachel suspiró toda enamorada del amor mientras le daba un sorbo a su copa de jugo de manzana.

-Lo sé, es algo que muy pocas veces sucede en la vida real. Luce más como una de esas historias de amor que tanto nos gusta leer, tía. Me encanta.

Nat celebró al igual que su tía Rachel, consiguiendo que Liz negara con la cabeza. Ese par eran tal para cual, pero bueno, de alguien debido haber salido su mejor amiga. Cursi, romántica, soñadora, dulce, súper adorable, y cosita encantadora. ¿De quién más? sino de su tía Rachel.

-Bueno, pero lo verdaderamente importante aquí y lo más emocionante de todo es que el otro día la señora Virginia le llamó personalmente a mi querida hormiguita para pedirle, no, para suplicarle, que por favor aceptara ser su dama de honor. -Liz soltó la bomba, provocando que la tía Rachel casi escupiera su jugo. Nat se puso de pie para ir junto a su castaña amiga.

-¿Sorpresa? -Nat les dijo en tono divertido.

-¿Qué? ¡Ahhhhhhhh que emoción! ¡Eso es tan dulce de su parte!

Rachel chilló a todo pulmón aún en su sitio, provocando que la chicas rieran divertidas mientras un muy desesperado y asustado Chad atravesaba la cocina como alma que llevaba el diablo para entrar a la sala de estar e ir al rescate de su futura mujer.

-¿Qué? ¿Qué sucede, mariposa?

Chad preguntó todo alterado, consiguiendo que Liz y Nat rieran aún más fuerte mientras Rachel sentía como sus mejillas comenzaban a arder, por la vergüenza y por la furia mezclada también. ¿Cómo se le ocurría aparecerse así?

-Ashhh, no sucede nada... Dios... podrías... ¿Podrías cubrirte? Ponte la camiseta, por favor, mi niñas estás aquí. No seas indecente. ¡Heeey! ¡Ustedes dos, no miren!

Rachel reprendió a todos en la sala, sintiéndose realmente indignada y consiguiendo que Nat y Liz se cubrieran los ojos mutuamente mientras se resistían a soltar una fuerte carcajada. Chad miró todo a su alrededor para descartar el peligro, se cruzó de brazos y miró fijamente a la hermosa mujer que parecía querer desintegrarlo con esa mirada aceitunada que tanto amaba.