- Y Tom le propuso a sus amigos Joe Harper y Huckleberry Finn marcharse lejos de allí, y empezar una nueva vida siendo piratas – continúa el profesor.
Oye... ¿Luisita no hizo una referencia parecida en su redacción?
And I think you should come live with me and we can be pirates then you won't have to cry
Vaya, ¿y esto? Bueno, los piratas se suelen usar como símbolo de libertad. No tiene más trasfondo... o quizá sí. No sé. Si es algo relevante, tarde o temprano lo acabaremos sabiendo. No hay de qué preocuparse. Volviendo a la clase, esto ya está acabando y Marina está a punto de soltar una exclusiva.
- Te vienes a comer conmigo, ¿no?
- Pues sí, porque de todas formas le tengo que dejar la casa libre a mi hermano.
- Luego nos podemos ir de tiendas o algo, así haces tiempo hasta que la parejita hable sus cosas.
- Ay, ojalá salga todo bien y se correspondan... le he dicho que en cuanto lo sepa me mande un mensaje.
- ¿Tú les ves con posibilidades?
- Yo alguna mirada le he visto a Rafa, eh... y es muy buen chico, así que espero que sí y que tengan suerte, que se lo merecen.
- Ya te podías aplicar el cuento tú también, que te pasas el día haciendo de celestina pero luego...
- Eres una pesada – la interrumpe.
- Sabes que llevo razón – dice antes de mirar el móvil. Bingo.
Amelia
Claro
Lo que pasa es que estoy con un amigo
No te importa que se venga con nosotras?
Marina
Qué va
Que se venga
Luisita también se apunta
Habéis pensado algún sitio?
- No te lo vas a creer.
- ¿Qué pasa? – pregunta Luisita.
- Que Amelia me acaba de decir de ir a comer.
Ha sido al revés, pero bueno, tu secreto está a salvo. No como el de Amelia.
- ¿Qué? Pues me quedo yo a comer en El Asturiano y ya está, que tampoco os voy a joder yo la cita.
- No, no, que le he dicho que tú también venías y me ha dicho que vale. Además, que también viene un amigo suyo.
- ¿Seguro...?
- Que sí, - la agarra del brazo para sacarla de clase – vamos.
Mientras tanto, Amelia ya ha llegado a casa. Le ha dado tiempo a ducharse y ahora va a vestirse... uy, mensaje de Marina.
- ¿Cómo que Luisita se apunta? – dice para sí misma. – Es que soy gafe, de verdad.
Va, si en realidad estás deseando verla. Te estoy haciendo un favor.
Amelia
Vale
Queríamos ir a un chino que está bastante bien
