49 (forty-nine)

588 68 9
                                    

Nos remontamos 7 años atrás: Luisita y Mateo intentan dar con el paradero de Amelia pero Tomás, avisado por Beltrán y rabioso porque Devoción ha conseguido el divorcio, hace todo lo posible para que dejen de husmear por voluntad propia. En medio de todo este asunto está Ascensión, que está compinchada con Tomás por un motivo que aún no está muy claro pero es la que hace de testigo que luego se echa para atrás en el último momento y te deja con un palmo de narices. Sabemos que Marta escucha aquella conversación entre Tomás y Beltrán así que por aquel entonces ya conocía a Amelia y Tomás la estaba chantajeando para que vigilara a su hija. También avisa a la propia Amelia de que Luisita ha intentado ponerse en contacto con él y le dice que la tiene localizada para amedrentarla y que no se atreva a buscarla. Hasta ahí bien, un pequeño resumen así por encima para refrescarnos la memoria tipo "En capítulos anteriores...". 

Hace 10 capítulos planteé la posibilidad de que fuera cierto que a raíz de la llamada de Beltrán, Tomás viera a Luisita como una amenaza y decidiera vigilarla pero la cosa quedó un poco en el aire y yo supongo que si de verdad hay un topo querréis saber de una vez quien es. En el hipotético caso de que exista este topo, es evidente que no le está pasando información a Tomás ahora mismo, hace dos años tampoco pudo pasársela porque las dos coincidieron en un teatro y no pasó nada... y me da a mí la sensación de que nunca llegó a pasarle ninguna información (al menos verdadera). ¿Por qué? ¿Quién es el topo y cómo se puso Tomás en contacto con él? Dentro escena.

- Beltrán está en Madrid, anoche se pasó a saludar a mi hija.

- ¿Y le ha sacado cuánto tiempo se va a quedar?

- Un par de días, ha ido a una celebración familiar.

- Amelia está por allí con la obra de teatro... no nos podemos permitir que se crucen.

- Se queda en este hotel - le da un papel con la dirección. - Le he pedido que esté atenta por lo que pueda pasar pero no creo que nos dé problemas.

- Eso espero... porque ya casi les tenemos.

- Y vamos a hacer que paguen por lo que han hecho.

- Gracias - le abraza - tú sí que eres un amigo de verdad.

- Pues sí, porque no te imaginas lo agotador que resulta tener que aguantar a Tomás - dice entre risas.

- Te lo compensaré con creces, te lo aseguro - le pone la mano en el hombro. - A ti y a Rocío.

¿Cómooooo? ¿Nuestra Rocío?

- Lo importante es que tu familia pueda vivir tranquila de una vez, que ya habéis pasado mucho por culpa de esos malnacidos.

- Ojalá... yo solo quiero que sean felices y que puedan superar todo lo que les hizo ese monstruo.

- Ya lo estás consiguiendo. Devoción te adora y sus hijos ya te consideran su padre - Germán sonríe agradecido por sus palabras. - Bueno, me voy que tengo cosas que hacer. Luego llamaré a Tomás a ver si me cuenta algo.

- Gracias, Ciro.

- Y tú ve a casa ya, que tu mujer te estará esperando para comer.

Gente... resulta que tenemos dos topos por el precio de uno y no del bando que nos pensábamos. Y es que Tomás no iba a ser el único que jugara a este juego, Germán no podía quedarse de brazos cruzados viendo como a su familia le hacían la vida imposible y que encima el culpable quedara impune. Sabía que el divorcio era una victoria pero que la guerra aún no estaba ganada del todo y ya conocía a Tomás lo suficiente como para intuir que volvería a hacer alguna de las suyas. Por eso acudió a su amigo Ciro, un compañero con el que había compartido comisaría durante muchos años y con el que casualmente tuvo una bronca monumental que rompió su relación de amistad. Tomás estaba tan cegado por el odio que le tenía por haberle "quitado" a Devoción que ni se planteó la posibilidad de que aquello pudiera ser una trampa, solo vio una oportunidad de oro para aliarse con un potencial enemigo de Germán. Y no solo le iba a dar información sobre él, también le iba a servir para tener vigilada a la amiguita de su hija. Rocío se mudó a Madrid para estudiar y no tardó en encontrar trabajo de camarera en el King's y ganarse la confianza de Luisita. Mientras Tomás pensaba que tenía vigilada a Luisita, le contaba y alardeaba de sus planes con Ciro, que luego iba a contárselos a Germán. Germán conoce muchos de los movimientos de Tomás durante estos años y con la ayuda de Alfonso, el hermano de Amelia, ha ido recopilando la información necesaria para que la justicia acabe poniendo a Tomás en el sitio que se merece. Todo esto llevado en secreto, claro. Devoción no supo nada hasta hace poco cuando ya lo tenían bien atado para no preocuparla y ahora faltaba contárselo a Amelia.

7Where stories live. Discover now