XLVIII

10.1K 1.8K 468
                                    

Abriendo algo adolorido sus ojos azules, vio el techo del local de Shin, tomando asiento en una cama bastante incómoda para una sola persona recordó que había llorado tanto que se quedó dormido.

Era definitivamente un adulto patético...

—¿Shinichiro-san?—Viendo alrededor, caminó por el pasillo hacía la tienda principal, mantuvo cerrado el resto del día tal parece, algo normal, era imposible tener humor para trabajar con todo lo que le dijo.

—Takemichi, despertaste, debiste estár muy cansado, ¿Te encuentras mejor?

—¿Shinichiro... San?—Frotando sus ojos para asegurarse que no estaba alucinando lo apuntó.—¿Qué llevas puesto?

—¡Un casco!—Con las mejillas rosadas y sonrisa brillante apuntó su cabeza.—Ya que moriré por un golpe en la cabeza me parece adecuando usar un casco, ¿No crees?

—... Sabía que eras hermano de Mikey-kun.—Su sonrisa condescendiente hizo al mayor Sano suspirar.

—Este casco es lo único que me ha brindado seguridad por las últimas 3 horas, Takemichi.—Tomando asiento, sosteniendo su cabeza río con una cansada expresión.—Morir... Morir da miedo, no puedo creer que tú... Ya hayas... Tantas veces...

—No es algo de lo que se pueda presumir, supongo que dios me odia.

Shinichiro viéndolo con su triste expresión le extendió su cigarro en la mano .

—... ¿Quieres uno?

—¡Tengo 12!

—Si, pero eres mayor por dentro, y ésto a ayudado mucho a relajarme.—Shin río, Takemichi se negó.

—No, gracias, Shinichiro-san.

—Al menos te ves mejor, ¿Tuviste un buen sueño?

—Ah... En realidad no.—Con una mala expresión rodó los ojos.—Un malvado mounstro apretaba mi rostro sin permitirme respirar, fue sofocante, aunque fui salvado por alguien, se parecía mucho a...—Mirando hacía arriba, y luego hacía a un lado.—Y entonces me...—Con el rostro algo sonrojado nego.—Es culpa de Shinichiro-san y sus tontos comentarios...

—¿Eh?

—De todos modos, debo volver a casa, mamá se preocupará.

—Ah, si, creo que volveré también, Mikey ya se fue supongo.

—¿Mikey-kun estuvo aquí?—Takemichi alzó una ceja.

—Si, el te llevo a la cama, yo necesitaba un momento para procesar toda esta mierda.

—No me despertó...—Takemichi nego con la cabeza, cuando sus azules ojos hacía Shin.—Shinichiro-san, en agosto...

—En cuánto agosto comience iniciaremos un plan.—Con confianza afirmó, Takemichi asintió.

—¡Si!

—Takemichi.

Volteando, el primogénito Sano movió su mano.

—Te cuido la espalda a partir de ahora.

Con ojos brillantes asintió, saliendo del local.

Sonriente a su mente vino Chifuyu, la sensación que Shinichiro le brindaba...

Era bastante familiar.

Comienzo | MitakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora