Comienzo | Mitake

XCII

Corriendo escaleras abajo a todo volumen, escucho a su madre quejarse, pero lo ignoro saliendo de golpe de su casa.

Viendo el cielo despejado, de tarde, podía inferir dónde podrían estar todos.

Ah, estaba nervioso de verlos.

Se había bronceado un poco, su cabello había crecido, estorbando un poco su vista, pero el agradable viento lo ayudaba.

Sus ojos azules como el claro cielo distinguieron a un tumulto de gente en el templo Musashi y sonrió por completo.

No había avisado para sorprenderlos, pero ahora estaba nervioso y no sabía cómo mover las piernas hasta allí.

Viendo a su lado los árboles, pensó que sería más discreto acercarse por allí para no ser visto.

Y así lo hizo, agachado, asomándose entre los árboles y arbustos vio a Chifuyu firme junto al resto de capitanes, en presencia de-

—¿Mikey-kun?—Sus ojos se abrieron de par en par.

Sano Manjiro llevaba su uniforme usual, su estómago vendado y chaqueta en los hombros, el viento lo ayudaba a verse aún más genial, no sólo moviendo la chaqueta, sino también su cabello.

Ese largo cabello rubio que Takemichi reconocía.

Con su pequeña coleta y mechones a los lados de su rostro.

Mikey. Mikey. Mikey.

Era Mikey.

El de siempre, el que conoció por primera vez, el que lo había obligado a ser su amigo.

Mikey.

Estaba tan feliz que sus lágrimas no pudieron no salir, aún en el arbusto, seco sus ojos rápidamente, no podía llorar en cuanto los viera, aunque no sería algo raro, debía mostrarse bien y feliz de verlos.

Necesitaba buscar el momento adecuado para salir y sorprenderlos, quizás si-

—¡Takemicchi, volviste!

Siendo brutalmente tacleado, tirándolo al piso de golpe, bastante doloroso, en un parpadeo notó que era Hakkai el responsable de su golpe.

—Hakkai, ¿Hola?—Nervioso rió al verse en el piso sentado siendo abrazando por el Shiba.

—¿Takemicchi?

El ruido hizo a todos los presentes voltear, viendo al Hanagaki, los miembros de los escuadrón pudieron ver a sus capitanes y vicecapitanes correr hacía el rubio teñido sin esperar nada.

—¡Volviste, compañero, tenías que avisarme!—Chifuyu felizmente lo abrazo, sin ser soltado aún por Hakkai.

—Te tomaste tu tiempo, Takemicchi.—Baji le extendió una mano para levantarse, aunque fue complicado al tener al par encima.

—Hakkai, Chifuyu, denle espacio a Takemicchi.—Mitsuya apartó a su vicecapitan, sonriéndole condecendiente al Hanagaki.—Me alegra verte.

—¡Takemicchi, unos idiotas superiores me hicieron enojar, vamos a golpearlos!—Kazutora lo abrazo del cuello cuando el muchacho se levantó, colgándose de él.

—Hiciste falta, Baji y Mikey se pelearon, al igual que Baji y Kazutora, y Baji con Draken, y Baji con literalmente cualquier cosa.—Pah-chin rió divertido de brazos cruzados.—Posiblemente conmigo también.

—¡Pelea conmigo, Takemicchi!—Smiley lo jaló del brazo sonriente.

—Buenas, Takemicchi.—Con una enojada expresión Angry le hablo.

—Oigan, ¿No le dan un poco de espacio a Takemicchi?—Draken de brazos cruzados y Kisaki acomodando sus gafas dieron una frívola mirada al grupo que ahogaba al Hanagaki.