LI

10.4K 1.7K 667
                                    

Corriendo con prisa, fue directo al río, sobre su bolso tenía el saco, y con la corbata suelta en el cuello gruño.

¡¿Dónde diablos estaba Mikey?!

Frunciendo el ceño sabía que debería estar por ahí, y viendo una rubia cabellera corrió con prisa y sin piedad.

—¡Mikey-kun!

Llevándose el polvo del camino por su velocidad, tenía el ceño fruncido, y Mikey le daba la espalda.

—Te dije que estaba ocupado.—Ese pequeño murmullo dió a entender que sabía que estaba ahí.

—¡¿Mirando el río?!—Respirando algo cansado se calmo un poco, dejando su bolso en el pasto, se sentó junto a Mikey.—¿Qué te sucede ahora, Mikey-kun?

—No se de qué hablas.

—Ajá.—Con una pequeña vena en la frente tomó aire.—Me refiero, antes, cuando paso lo de Kisaki y Hanma, te hablé y sólo me alejaste, tu no haces eso, si te pasa algo sabes que estoy-...

—No quiero hablar contigo ahora.

—¿Ah?

—Quiero estar solo, necesito pensar en... Cosas.

—¿Ah...?, Pero podría ayudarte, somos amigos.

Mikey guardo silencio sin verlo a la cara, Takemichi comenzaba a enfadarle esa actitud inusual.

—Mikey-kun.—Takemicchi dejo en claro que quería que voltear hacía él.—¡Mikey-kun!

—¡Ya cállate!, ¡Déjame en paz!

Takemichi era paciente, en sus años de vida había tenido que serlo por bastantes motivos, y justo ahora, esa paciencia llegó a un límite explosivo.

—Dejarte en paz... ¡Cómo si pudiera hacer eso, idiota!

—¿Eh?—Manjiro parpadeo ante ese tono de voz desconocido hacía su persona.

—¡Siempre es lo mismo contigo, maldito tonto!, ¡Deja de alejarme como si nada, soy tu amigo, ¿Me preocupo por ti y tu sólo esperas que me vaya porque si?!, ¡No me jodas!

—Ta... Takemicchi...—Manjiro ahora viendo al rubio enojado sólo pudo dudar y querer pedir perdón.

—¡Nada de Takemicchi!, ¡Eres egoísta, quiero ayudarte, pero siempre eres reservado y no dices tus preocupaciones a nadie!, ¡Odio a la gente así!

—¿Odiar...?—Mikey iba a llorar, palideciendo, su corazón se rompía, como un pequeño gato bajo la lluvia.

—¡Odio que Mikey-kun no me permita ayudarlo!, ¡Lo odio!, ¡Porque Mikey-kun me importa muchísimo!, ¡Deja de preocuparte solo, aquí estoy yo, y estamos todos los de la toman!

Luego del prolongado regaño, Takemichi volvió a la realidad, sabiendo que regañó al más fuerte, supo que su hora llego.

—Takemicchi.

—¡No me retractare!—Pero se mantenía firme.

—¿No me odias, verdad?—Con ojos tristes y algo de temblor lo miraba. El Hanagaki parpadeo.

—¿Eh?—Recordando sus palabras, si era algo que pensar.—Supongo que no me gustan las personas como Mikey-kun.

—¡¿Ah?!

—Pero, si me gusta Mikey-kun porque es Mikey-kun.—Tomando su mentón, elevó su dedo índice, confundido de sus propias palabras.

Con sus oscuros ojos abiertos, y la vista en el Hanagaki, Mikey rió, con el ceño fruncido y una sonrisa algo melancólica.

—Si, definitivamente es Takemicchi.

—¿Qué se supone que significa eso...?—Aún un poco enojado, se calmo ante la risa, Mikey miro hacía adelante, el rió y parte de la ciudad.

—Que eres un idiota.

—¡¿Ah?!

—Pero eso es, algo que me gusta de ti.

El Hanagaki frunció un poco el ceño, bufando ante la burla.

—Lamento lo de antes, Takemicchi, tenía muchas cosas en la mente, estaba nervioso...—Susurrando lo último le sonrió.—Cuando entienda correctamente ésto, serás el primero en saberlo, te lo prometo.

Con su meñique alzado, el Hanagaki frunció la boca.

—Eso espero entonces, Mikey-kun.

Con los meñiques unidos, Mikey rió.

—Ahora, Takemicchi, quería preguntar...—Mikey volviendo a su seriedad lo apuntó.—¿Por qué hay sangre en tu zapato?

—Ah, es sólo ketchup.—Restandole importancia elevó su pie para que lo vea bien.

—No, eso no es ketchup.—Manjiro nego tocando el zapato y mostrando su mano la mancha de claramente sangre.

—...—Takemichi tuvo una epifanía.—¡Inupi-kun!

—¿Inupi?

—¡Ah, tengo que ayudarlo, nos vemos después, Mikey-kun!—Tomando su bolso debía ver cómo se encontraba Seishu, aunque una mano lo detuvo.

—Ten cuidado.

—¿Uh?—Parpadeando, el Hanagaki alzó una ceja ante eso, Manjiro notando su agarre lo soltó.

—Ya sabes, siempre terminas herido a dónde quiera que vas.

—¡Ah, cierto!—Takemichi sonrió, con las mejillas rosadas.—¡Gracias, Mikey-kun!

Y corriendo se fue de allí. Mikey viendo su mano con la que detuvo al Hanagaki suspiro.

—Vamos... Controlate.—Con una mueca y las mejillas rosadas se cubrió.

El rostro desconcertado de Takemichi cuando lo detuvo y le dijo eso...

Había sido adorable.

—Estoy arruinado.—Por lo bajo gruño, asqueado de si mismo.





.
.
.
.
.
.
.
.

Se viene el especial uwu

Llevo unos días con mi muñeca mala por lo que quizás tarde más de lo normal ya que me duele usar la mano

Con que no sea túnel carpiano todo estará bien

Entendiendo eso, espero verlos pronto! Porque sino puede que mi mano no se bien (• ▽ •;)

Baibai!

Comienzo | MitakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora