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Capítulo 151: ¿Wanwan se enoja, se exponen las intenciones del tercer maestro?

Dentro de la tienda de postres...

Song Fengwan se sorprendió un poco al ver a Cheng Lan.  La última vez que se vieron fue en la antigua residencia Fu.  En ese momento, fue expulsada del complejo después de ser regañada por Old Madam Fu.

"Hablemos."  Cheng Lan señaló una mesa vacía.

"¿Qué hay de qué hablar entre nosotros?"  Aunque se habían conocido antes, esta era la primera vez que hablaban entre ellos.

Song Fengwan había sido testigo de todas sus malas acciones y los métodos despreciables que había usado para ayudar a Jiang Fengya.  Odiaba profundamente a Cheng Lan.

Ella ayudó a los malvados a hacer el mal y terminó causando que su propia familia se desmoronara.

"¿No quieres saber por qué te estoy apuntando?"  Cheng Lan se frotó las gafas de sol en la mano y caminó directamente hacia la mesa.  "Por favor siéntate."

Después de todo, este era un lugar público con mucha gente pasando.  Song Fengwan no tenía miedo y se sentó frente a ella.  La camarera se acercó para atenderlos y Cheng Lan pidió dos tazas de café.

"Solo dame un vaso de agua".  Song Fengwan miró a Huai Sheng.  Estaba sentado en diagonal frente a ellos cerca y comiendo su postre mientras los miraba.

Cheng Lan se quitó el abrigo y solo llevaba un suéter negro por dentro.  Estaba un poco delgada para empezar, y después de no verla durante mucho tiempo, ya era piel y huesos.

Tenía las mejillas ligeramente hundidas y los ojos turbios.  Los círculos oscuros debajo de sus ojos no podían ocultarse incluso con su pesado maquillaje, y sus labios estaban secos y agrietados.  Cuando Song Fengwan la conoció anteriormente, Cheng Lan era una oficinista vestida a la moda.  Pero en este momento, un aura de depresión la invadió.

No podía ocultar el abatimiento que venía de sus huesos.

Huai Sheng lamió la crema de la cuchara e inclinó la cabeza para mirar a las dos personas que no estaban muy lejos.  ¿Por qué el ambiente es extraño?

***

Después de que la camarera sirvió el café y el agua tibia, Cheng Lan puso algunos terrones de azúcar, revolvió el café con una cuchara y levantó la cabeza para mirar a Song Fengwan.

Era joven y bonita, y su suéter verde fresco la complementaba para lucir aún más hermosa y encantadora.

La policía se llevó a Cheng Lan para interrogarla, pero ella negó todos los cargos en su contra.  La policía no tenía pruebas de que ella hubiera instigado a Cheng Tianyi y, aunque la reportera tenía una grabación de voz, las pruebas serían demasiado débiles si la procesaban.

Después de pasar una noche entera en la estación de policía, Cheng Lan fue puesta en libertad bajo fianza e inmediatamente fue bombardeada con regaños por todas partes.

Los regaños en línea la hacían parecer como si estuviera colgada de un árbol y cualquiera pudiera azotarla.  Todas las palabras duras e hirientes la estaban obligando al borde del colapso.

Su teléfono sonó sin parar por los acosadores, e incluso arrojaron basura y agua sucia a su casa.

Esta fue la primera vez que experimentó violencia cibernética real.

Afortunadamente, había nevado mucho en la capital anoche, por lo que esas personas finalmente se detuvieron.  Estaba obsesionada con Fu Chen, por lo que salió sin destino y terminó caminando hacia su edificio de oficinas.  No esperaba poder verlo, pero cuando vio el auto de Fu Chen, Song Fengwan salió.

Cazando una esposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora