MR DIOR

[ Libro IX ] La esposa Masculina del Señor de la Guerra | Capitulo 80

— ¡Déjame!— No importa cuánto lucho Jiao Qi, Zhang Chenfei simplemente no lo dejará ir. Lo abrazó todo el camino escaleras abajo.

—Al salir del ascensor nos encontraremos con los miembros de tu empresa extranjera. No quieres que te vean siendo llevado por mí, ¿verdad?

Zhangda Diao se agacho y cargo a su pequeña esposa y con una palmada en el trasero la persona en sus brazos se quedo quieta.

Todavía había un centenar de cajas en el vestíbulo, y el vicepresidente Liang estaba indicando a varios empleados que muevan las cosas al almacén. Cuando todos vieron que el señor Zhang estaba viniendo cargando a su propio presidente, dejaron de hacer lo que estaban haciendo y miraron aturdidos.

Jiao Qi incapaz de soportarlo, solo pudo enterrar su rostro en los brazos de esposo y fingir dormir.

—El Señor Zhang realmente ama a nuestro presidente, no esta dispuesto a despertarlo e incluso lo lleva el mismo.

—Oye, los esposos de otras familias nunca me han decepcionado. ¿Por qué mi esposo no es asi?

Zhang Chenfei se pavoneó con su esposa arrebatada en sus brazos hasta al interior del auto y le dijo al conductor que fuera a la residencia donde vive habitualmente.

—El apartamento, ¿verdad?—El conductor de Shifei tenia una gran capacidad de comprensión, con la función de corregir automáticamente los nombres de los lugares y condujo el auto directamente al apartamento en el centro de la ciudad.

Con el conductor aquí, Jiao Qi no podía preguntar nada, por lo que solo podía apretarse en el asiento trasero con Zhang Chenfei. La razón por lo que era apretarse era porque su Zhangda Diao no soltó sus manos por completo, insistiendo en dejarlo sentarse en su regazo.

Jiao Qi no podía confiar en el cerebro de su esposo y dejo que Annie analizara la situación y averiguara qué tipo de guión era este.

Annie:【Según las palabras "armas" "empresa extranjeras" y "Laozi" y otras palabras especiales. Los resultados de la búsqueda de las novelas son los siguientes:

"Regreso a la República de China y Comercio Exterior Abierto"

"Los tiempos difíciles de la República de China: La concubina del señor de la Guerra."

"En la guarida del Bandido: El Bandido dominante se enamora de mí"

"El análisis completo de Tao Te Ching[1]"

—......— Esto no debería tener nada que ver con el sabio LaoZi que escribió el Tao Te Ching. Entonces, ¿Es un bandido o un señor de la guerra? Apuntando con un arma a la cabeza del anciano para agarrar a la esposa, ¿Debería ser un bandido? Jiao Qi miró su esposo.

— ¿Qué estás mirando?— Sintiendo a su pequeña esposa en sus brazos mirándolo, Zhang Chenfei sonrió y bajó la cabeza, pellizcó la barbilla blanca y le dio un mordisco. El sabor suave y tierno era como el tofu de agua recién salido de la olla. La gente se lo tragaba de un bocado.

El joven maestro Jiao era realmente tierno y delicioso, y vale la pena tenerlo despues de tanto esfuerzo.

— Tú ...— Jiao Qi miró al conductor en la primera fila y preguntó en voz baja al oído de Zhang Chenfei.: —¿Eres un bandido?

—Jajajaja, solía serlo — Zhang Chenfei se lamió los dientes blancos y no pudo evitar besar la cara del joven maestro Jiao nuevamente. —Ya no es así.

Llegaron al apartamento mientras hablaban, el conductor salió del auto y abrió la puerta. Zhang Chenfei salió primero del auto y extendió la mano para dejar que su pequeña esposa se acercara a sus brazos.