capitulo 33

929 67 0
                                    


La Traviata

Hoy es el gran día nunca hemos ido a la opera y saber que compartiré esta primera experiencia con mi mejor amiga es genial, Piero ha sido muy bueno conmigo, sé que no lo hace por bueno solamente. Rose despierta y abre los ojos como platos al ver que en la habitación esta una bandeja servida con delicioso té de manzanilla y miel, wafles con mermelada de fresas, un platillo de frutas y jugo.

-Woo que hermosa porcelana y que delicioso todo lo que hay en ella.

Me río ante su expresión cuando pasa la lengua por la comisura de sus labios –ve al baño, te esperare para que desayunemos juntas.

-desayuno a domicilio Meg ¿qué más puedes pedir? Piero parece ser perfecto para ti.

- ¿Por qué? ¿Por su dinero? Vamos Rose sabes bien que es lo menos que me importa.

- ¿Entonces si estas dispuesta a volverte a enamorar?

-No, en este momento no estoy dispuesta a nada ¡Entiéndelo!

-Bueno ya solo decía –deja caer sus hombros con resignación y se mete al baño.

Desayunamos en el balcón de la habitación y Rose no para de hablar de lo hermoso que es todo esto, hace un gesto de tristeza cuando recuerda que no puede vivir aquí conmigo y que debe regresar a Manhattan, lo recuerda y vuelve a reprocharme que la universidad no es lo mismo sin mí.

La escucho hablar con Eliot por teléfono y sonrío, siento a la vez un dolor amargo al recordar aquellos tiempos, si hubiese seguido con Josh estaría igual que siempre, viendo como me remplaza por una chica diferente, diciendo que lo nuestro no puede ser porque su familia, sus amigos, sus primos blablablá.

Por lo que vuelvo a sentirme bien de nuevo, al reafirmar de lo que me libré y que ahora estoy aquí en Italia quiero disfrutarlo, quiero vivirlo y eso es exactamente lo que planeo hacer.

En el camino Rose va haciendo miles de preguntas sobre la Opera a la que asistiremos hoy, Clarisse y yo nos reímos con ternura y Leo le responde –se llama la Traviata

A lo que yo le sigo –Y trata sobre una historia de pasión donde renuncias al amor, por momentos de ira, su final tiene una reconciliación en un momento trágico, es una historia hermosa por lo que he leído.

Reímos cuando Rose me dice que le he hecho Spolier como si se tratara de un libro, a lo que Piero la consuela diciendo –Lo que Megan te ha dicho no es nada comparado con lo la obra te hará sentir, por más que te contemos la historia verla y escucharla es otra cosa.

Bajamos de la limousine. El San Benedetto esta vestido de gala y de espectadores de gran renombre social, tomamos champan mientras esperamos que comience el acto, entramos a la sala y nuestro balcón es de asientos exclusivos escogidos por Piero, el salón se va llenando poco a poco, el lugar queda en silencio absoluto cuando apagan las luce y se abre el telón.

Comienza el primer acto con un breve pero brillante preludio que genera una buena predisposición por parte de todos los que estamos en el salón, la cara de todos está llena esta ópera romántica. Siento que estoy envuelta en el mundo de las damas de las camelias de Alejandro Dumas, y en esta historia que comienza con una fiesta de alta sociedad en casa de Violetta a la que asisten los amigos de ésta entre los que figura Gastón, el Barón Douphol, el marqués o Flora.

Gastón representa de forma apasionada a Alfredo Germont ante Violetta y ella queda atraída por él en ese mismo instante, en el banquete él le habla sobre el interés que siente por ella cuando llega el brindis. Cuando acaba el banquete, se van los invitados a otra sala para bailar y ellos se quedan solos, Alfredo se siente preocupado por la salud de Violetta porque fue un mareo lo que la hizo quedarse, esto hace que ella siente que el cariño de Alfredo por ella es sincero, demasiado sincero para su gusto, tanto que teme que tras ese interés haya un amor al que ella no quiera corresponder.

"Da molto è che mi amate?" ella pregunta y él suelta un gran "Un dì, felice, etérea, di quell'amore ch'è palpito leit-motiv" Piero me explica que en este momento Alfredo le revela su amor, pero ella no quiere porque no sabe amar y le pide a solo sean amigos y nunca amantes.

Mis ojos se llenan de lagrimas al recordar a Alex y todas las veces que he rechazado su amor, no sé si a Violetta le rompieron el corazón como a mí, al igual que ella yo no sé amar, no quiero volver a amar, me niego hacerlo.

Piero me mira y me toma la mano, le sonrió porque se que él piensa que es la obra lo que me ha hecho derramar estas lagrimas.

Vuelvo a centrarme en el acto y Alfredo se va de la fiesta con el resto de los invitados, aun así se va con la inquietud y el deseo de volver a ver a Violetta. Ella se queda sola en su casa pensando las palabras de Alfredo, por unos momentos ella llega a pensar en aceptar ese amor que él le ha confesado.

En su debate emocional ella se niega una vez más a ese amor para volver a ser ella misma, la Violetta que sólo quiere gozar en la senda del placer ("Sempre libera deggio!") a lo lejos se oye lo que al parecer son los latidos del corazón de Alfredo "amor è palpito"

Para ellos ha pasado el tiempo y ya viven juntos en una casita cerca de París. Uno de los momentos más importantes en la trama es el encuentro de Violetta y el padre de Alfredo, Giorgio Germont y este le pide un sacrificio, que abandone a Alfredo por el bien de su familia, al principio ella se niega y le recuerda que la vida de ella está envuelta en una enfermedad, aun así acepta el sacrificio a cambio de que con el tiempo, él le confíe el secreto a Alfredo del tremendo sacrificio hecho por ella.

Cuando el padre de Alfredo decide marcharse Violetta le escribe una carta a Alfredo para despedirse cuando éste ya en París, Giorgio ha convencido a Alfredo de volver a su tierra natal con su familia, él decepcionado por el aparente abandono sin motivo de Violetta se va a París para vengarse de ella, desconociendo ese sacrificio que ella hizo por él y su familia.

Pasado el tiempo hay una fiesta organizada por Flora, se genera una tensión en el ambiente porque en esa misma fiesta esta Violetta y aparece Alfredo cuando nadie esperaba su presencia, además de la rivalidad entre él y el Barón Douphol. Violetta le pide a Alfredo que se marche porque debido a su enemistad con el Barón Douphol corre gran peligro, por supuesto él se niega a irse y le dice que se marchará si ella se va con él, ella se niega diciendo que no puede irse y se ve obligada a mentirle diciéndole que ella ama al barón.

La reacción de Alfredo es atroz, pues llama a todos los invitados y delante de ellos tira una bolsa de dinero a los pies Violetta para que todos sean testigos de que ha pagado la deuda, a lo que Giorgio Germont se lo recrimina y Alfredo se derrumba. El gran final es el remordimiento de Alfredo, la pena de Violetta porque sabe que él desconoce los verdaderos motivos de su sacrificio.

Se hacen presente en el ambiente la ira del barón, la triste soledad de una pobre mujer enferma que está antes sus últimas hora de vida, y relee la carta que ella le mandó Giorgio en el que le relata el sacrificio a Alfredo. Alfredo implora su perdón y empieza a sospechar que el estado de salud de ella está mal, ella se despedirse mientras que él le pide que no cierre su corazón a la esperanza y le hace ver a su padre el mal que ha hecho y que observe el fin de Violetta.

Antes de morir ella le entrega una pequeña medalla para que lo conserve como recuerdo de amor y le pide que se enamore otra vez, que cuando eso suceda le entregue la medalla a esa digna doncella en la flor de sus años, Alfredo no puede aceptar ese final sin poder evitar que ella muera en sus brazos mientras que el doctor confirma el fatal desenlace.

Fria y Oscura Dulce Desastre IIOnde histórias criam vida. Descubra agora