Capitulo 57

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Vivo un poco más, cada vez que te veo sonreír

Rose se despide de mi en la puerta de mi apartamento, Eliot esta esperándola abajo y se niega a irse sin ella, estoy tan apenada con Alex que no tuve cara para despedirme de él, tengo tantos sentimientos encontrados rabia, decepción, dolor y lo más preocupante, confusión. Como se atreven a ir al evento y hacer de esto un show mediático, salgo de la ducha y me hago un té de manzanilla y miel y me acuesto en la cama con la mirada puesta en el techo, pensando en todo este desastre que ha sido mi vida.

La luz de mi teléfono celular se enciende y no sé porque pero ver el nombre de Alex en la pantalla me llena de tranquilidad.

—Buenas noches.

—Buenas noches Meg.

—Perdona que me fuera sin despedirme, yo estaba....

—Cansada, lo se —me interrumpe — hubo muchísimo trabajo, los niños estaban tan contentos, no pienses en lo que sucedió hoy en el estacionamiento, no vale la pena, mejor dime como te sentiste con los niños.

Me agrada que Alex le reste importancia al tema y quiera hacerme sentir bien, le cuento como la pase con los chicos y cuanto disfrute de sus gestos de cariño y atención, me sonrojo al escuchar de Alex que se sintió feliz de tenerme a su lado trabajando y de lo bien que se sintió al verme sonreír rodeada de todos los chicos de la fundación "Vivo un poco más, cada vez que te veo sonreír" sin darnos cuenta, hablamos hasta las tres de la media noche "fue grato hablar toda la noche contigo Meg" de esa manera se despidió. Me recosté de lado y abrace mi almohada, esa noche no sé porque pero pude dormir en paz, sin pensar, solo cerré los ojos y en un instante me quede dormida.

Fria y Oscura Dulce Desastre IIOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz