Mundos Opuestos

Capitulo 3: El nuevo profesor.

Desde hace varios dias, Samuel empezo a cenar en casa de Samara, ella lo habia convencido con la excusa de pasar mas tiempo juntos, a veces la llevaba a cenar fuera, pero otras se quedaba cenando con Samara y Benjamin. Andrea como siempre se ocupaba de las cosas de la casa, aunque tuvo problemas con una de las empleadas a la cual tuvo que despedir, y ahora tiene mas trabajo que antes, aunque eso la ayudaba en no pensar en que Samuel estaba con Samara, y no con ella.

Una tarde, Andrea iba al mercado a comprar algunas cosas que hacian falta, venia muy distraida mirando la lista de ingredientes cuando sin darse cuenta choco con una chica haciendo que la canasta que llevaba se le cayera al suelo.

Andrea: Oh, lo siento, lo siento –dijo apenada mientras se abajaba para ayudarla- pero que torpe soy... disculpame.

Ana: No se preocupe, yo tambien venia distraida –dijo recogiendo la s tortas que habian caido al suelo.

Andrea: Te pagarelas tortas que se hayan arruinado –saco dinero de su bolsillo para entregarselo.

Ana: No de verdad, no es necesario, igual estas tortas ya no se iban a vender.

Andrea: Insisto, por favor –trato de convencerla pero Ana siguio negandose- esta bien, pero quiero que me llames algun dia si necesitas algo, ¿esta bien? –dijo entregandole una tarjeta con su numero.

Ana: Bueno, lo que si me gustaria es un trabajo, si necesita alguien que le planche o le lave la ropa, algo de medio tiempo, ya ve que estoy en la escuela, pero de verdad necesito trabajar –dijo y Andrea la miro asintiendo- perdone que lo haya dicho asi sin conocernos, me llamo Ana y vivo a la vuelta de la esquina.

Andrea: Ana, me gustaria que un dia te pasaras donde trabajo, creo que puedo ofrecerte algo, mi nombre es Andrea. En la tarjeta esta la direccion.

Ana: Gracias señorita Andrea –dijo antes de despedirse de ella.

Mientras Samuel estaba en su oficina, hoy no tenia mucho trabajo, pero adelantaba un poco lo de la semana que viene, era muy organizado y recto con su trabajo, y siempre le ha gustado recibir lo mismo de sus empleados. Mientras checaba algunos papeles escucho la puerta de su oficina abrirse, no habia recibido ninguna notificacion de su secretaria, pero cuando vio de quien se trataba, dibujo una sonrisa en su rostro y se levanto para saludarla.

Samuel: Mi amor, ¿Qué haces aquí? No me dijiste que venias –dijo antes de besarla.

Samara: Porque era una sorpresa, quiero que almorcemos juntos, en nuestro restaurante favorito, ¿Qué te parece?

Samuel: Bueno yo tenia pensado almorzar en casa... pero esta bien, todo lo que tu digas –dijo y la beso nuevamente para luego salir con ella.

Benjamin, estaba muy emocionado. Hoy era su primer dia de trabajo en una escuela y tenia tantas ganas de enseñar y compartir la musica con los que serian sus alumnos. Llego a la escuela y enganchandose su guitarra al hombro camino buscando la oficina del director, hoy empezaba lo primero de las tantas cosas que queria hacer.

Director: Como hablamos señor Bustamante, este sera su sueldo y aquí la lista de sus alumnos, atendera a tres clases diferentes, espero haga un buen trabajo.

Benjamin: No tendra quejas de mi, se lo aseguro –aseguro estrechando su mano.

Director: Recordandole que los jovencitos de este lugar son algo rebeldes, dificiles de controlar, debera usar mucha autoridad para controlarlos, no deje que lo vean como alguien a quien puedan controlar facilmente.

Benjamin: No se preocupe señor, aunque no tenga experiencia con estudiantes adolescentes, hare mi mayor esfuerzo para hacer mi trabajo.

Director: Tengo buenas referencias de ti, muchacho.