Mundos Opuestos

Capitulo 66.

La tristeza invadió Andrea en el momento que el doctor expreso esas palabras '' usted nunca podrá quedar embarazada'', su mundo se vino abajo al instante, recorría las calles de la ciudad sin rumbo alguno mientras en su mente Vivían los sueños que jamás vería cumplir, nunca convertiría en padre a Samuel y eso le provocaba un profundo dolor.

Samuel que ya estaba preocupado por Andrea ya que esta no atendía las llamada hace horas, estaba dispuesto a buscarla cando la vio entrando, sintió un gran alivio pero pronto vio algo en su mirada que lo desconcertó... ¿tristeza?

Samuel: Andrea, ¿qué paso? Estuve llamándote todo el día al celular y no contestabas –trato de encontrar sus ojos pero no le fue posible cuando ella caminaba sin siquiera notar su presencia- ¿Andrea estas bien? –ella se detuvo al pie de la escalera.

Andrea: Solo quiero estar sola –fue todo lo que dijo antes de subir hacia su habitación.

Benjamín llego todo preocupado a casa de Ana, la noto angustiada cando hablaron por teléfono. Inmediatamente llego las empleadas lo dejaron entrar y él se encamino hasta la habitación donde ella se encontraba tratando de calmar la bebe, ahora s angustia fe mayor al ver la bebita con la cara roja llorando sin encontrar consuelo alguno.

Benjamín: Ya estoy aquí –inmediatamente tomo a la bebe en sus brazos, noto la calentura en s pequeño cuerpecito- hay que llevarla con un doctor.

Ana: Te estaba esperando para que vayamos juntos –tomo su bolso para después ir con Benjamín a un hospital.

Ambos preocupados por su bebita mientras la revisaban, Ana se abrazaba a Benjamín esperando tener buenas noticias del doctor que la atendía, mientras tanto Lina caminaba con sus tacones atravesando el largo pasillo que la conducía hacia el departamento de Braulio, hoy tendrían una cena, para eso el la invitó a su departamento. Cuando estuvo frente a la puerta se aseguro de seguir bien arreglada para él, luego toco para que este le abriera.

Braulio: Por fin, te estaba esperando –sonrió tras abrir la puerta- estas precisa –viéndola de arriba abajo e invitándola a pasar.

En seguida Lina visualizo el arreglo de mesa que este había preparado para la ocasión, las luces estaban apagadas quedando totalmente iluminada por las velas.

Braulio: Adelante o se enfriara la cena –la trato con galantería dirigiéndola hacia la mesa, el se sento frente a ella- espero que te guste –comenzó a servirle.

Lina: Me sorprendes Braulio –dijo con admiración- me hubieras dicho así me pongo algo mas adecuado –sonrojo sus mejillas.

Braulio: Nada de eso, l hice porque quiero consentirte un poco y además...

Lina: ¿Qué? –insistió.

Braulio: Poco a poco, ahora disfruta la cena –Lina no dejaba de mirarlo con curiosidad.

Andrea estaba muy desganada y sin ánimos, no quería ni bajar a cenar, por lo que Samuel my preocupado por ella se encargo de subirle la cena.

Samuel: Andrea, traje algo de comer para ti, necesitas cenar –ella oculto s rostro en la almohada, no quería que la viera llorar- no sé qué te haya pasado por ahí, pero sabes que puedes contar conmigo para lo que sea, te amo y no me gusta verte así –tomo s mano.

Andrea: Solo quiero estar sola, por favor –le dolía apartarlo pero necesitaba pesar, no quería hacerlo sufrir con todo lo que le pasaba.

Samuel quiso darle s espacio por lo que accedió a su petición, pero le indico a sus empleados que la vigilaran por cualquier cosa que ella necesite, el se iría a su despacho mientras le daba tiempo.