Mundos Opuestos

Capitulo 15: Dolor.

Ana: Muchas gracias Benjamín, estaré siempre agradecida por lo que hiciste por mi –sonrió antes de besar su mejilla, cuando estaba a punto de salir, el sujeto su mano atrayendola hacia su cuerpo, dejando sus rostros frente a frente.

Benjamín: En la escuela, iré mas tarde...

Benjamín: Sabes a lo que me refiero, quiero salir contigo, ¿tendrías una cita conmigo? –pregunto mirándola a los ojos.

Ana: Este, yo... -no sabia que decir, pero sin embargo se sentía cautiva de la mirada tan tierna que este le dedicaba- esta bien –respondió sin pensarlo mas, y recibió un beso de Benjamín que la dejo en las nubes.

Benjamín: Gracias, prometo que no te arrepentirás –dijo feliz mientras ella se bajaba del coche y el espero hasta que ella entrara a su coche para irse.

Al entrar, suspiro dibujando una sonrisa, no podía creer que de verdad le estuviera pasando esto con el, el chico de sus sueños, si de eso se trataba no quería despertar jamas... pero se golpeo con la realidad cuando miro a su alrededor, después de todo ya no le quedaba mucho tiempo, dentro de poco tendría el dinero suficiente para largarse de aquí, tal y como lo hizo su madre.

Ana: Aprovechare su ausencia y me iré antes de que regreses, lo prometo –dijo refiriéndose a su madre, entonces subió a su habitación para darse el baño que tanto necesitaba.

Andrea y Samuel habían llegado a su empresa, hacia mucho tiempo que ella no estaba allí, siempre se negaba a ir con Samuel, pero esta vez el prácticamente la obligo a venir con el. Si tenia bastante trabajo, desde que llegaron no habían parado de revisar documento tras documento, de vez en cuando la secretaria les traía café, o Samuel atendía una que otra llamada, pero nunca se dirigieron la palabra a menos que fuera por algo de trabajo.

Samuel: Andrea –dijo y ella levanto la mirada- ¿puedes sacarle fotocopias a estos documentos?

Andrea: Por supuesto –dijo recogiendo los documentos que le había indicado y salio de la oficina de camino a la fotocopiadora.

Samuel volvió su mirada hacia el computador, donde digitaba otro de los documentos importantes, estaba muy concentrado, luego escucho abrirse la puerta de su despacho, primero pensó que era Andrea, pero era muy pronto para que ella regresara, y cuando miro confirmo que efectivamente no era ella, si no su novia.

Samuel: Samara –sonrió levantándose para ir a besarla pero ella retrocedió evitando que lo hiciera, y Samuel la miro desconcertado- ¿Qué sucede?

Samara: Eso deberia preguntar yo, ¿Qué esta pasando? ¿Qué hace tu empleada aquí?

Samuel: Ella me esta ayudando a hacer un trabajo, mi amor...

Samara: ¿Acaso no puedes hacerlo tu solo? ¿Por qué no me llamaste a mi para que te ayudara? A menos que hayas querido estar a solas con ella, en tu oficina –dijo bastante enojada.

Andrea caminaba a pasos gigantes por el largo pasillo, llevaba bajo el brazo las fotocopias que Samuel le había pedido, estuvo a punto de tocar cuando se fijo que la puerta estaba abierta, y escucho claramente la voz de Samara reclamándole algo a Samuel, no quería hacerlo, pero no pudo evitar escuchar cuando mencionaba su nombre...

Samara: No se como no te das cuenta, esa Andrea lo que quiere es meterse por tus ojos, que te fijes en ella y tu no lo quieres ver Samuel –Andrea podía ver la escena desde donde estaba, la puerta no estaba muy abierta pero los distinguía perfectamente.

Samuel: Samara, no tienes que hablar así de Andrea, de verdad no quería incomodarte por eso no te llame a ti... no tienes que tener celos de Andrea, yo solo tengo ojos para ti –dijo y sujeto su rostro para besarla. Lagrimas empezaron a resbalarse por la mejilla de Andrea, si era bastante doloroso para ella, no solo verlos besándose, sino también el confirmar una vez mas que ella no tendría oportunidad alguna con Samuel.