Mundos Opuestos

Capitulo 72.

Luego de dos semanas, en los que Andrea ya estaba de vuelta con Samuel, este se dedicaba a su cuidado personalmente, se encargaba de todo lo de ella, incluso de su trabajo en la oficina para que estuviera tranquila. Braulio ayudaba a Samuel para que pudiera estar mas tiempo con Andrea, y Benjamin también se encargaba de algunas reuniones para ayudar a su amigo.

Andrea se sentía muy consentida por su novio, quien le demostraba todos los días lo contento que estaba con ella, y lo ansioso que se sentía por que pasaran los meses para ambos conocer a su bebe.

Andrea: Bebe, lo siento –dijo mirándose al espejo con la blusa levantada al nivel de los senos para ver su vientre plano- te puse en riesgo con mis decisiones tan precipitadas, no me hubiera perdonado que algo malo te pasara –vio el reflejo de sus tristes ojos- pero ahora estamos con papa, y sabes, el nos ama mucho –expreso con ilusión.

Samuel: Asi es –dijo entrando a la habitación, Andrea se sobresalto por la sorpresa, Samuel no perdió el tiempo para rodear su cintura- ustedes son lo mas importante para mi –beso la mejilla de Andrea y luego su vientre- asi que ni se te ocurra volver a escaparte, porque te buscare mil veces, hasta debajo de las piedras de ser necesario.

Andrea: Asi será, yo tampoco podría vivir sin ti –se besaron- te has vuelto imprescindible para mi, te amo tanto...

Samuel: Ahora no habrá nadie que se interponga entre nosotros, somos libres para amarnos preciosa –volvio a besar esos labios que le encantaban.

Lina estaba preparando algo de comer, pan tostado, mermelada de piña, unas frutas, café caliente y jugo de naranja. Vestía con solo una de las camisas de Braulio, el aroma masculino de su novio impregnado en ella le encantaba, así como sabia que a él le gustaba verla con algo de el puesto.

Braulio: Buenos días –apareció frente a ella con una sonrisa, se acerco a ella besando su mejilla- te ves tremendamente sexy con mi camisa –paso sus manos por el vientre de ella y beso su cuello.

Lina: Lo se, pero es hora de desayunar... o mejor dicho almorzar, nos levantamos muy tarde.

Braulio: Mmm pero hoy no trabajamos y usted señorita me debe muchos besos –la tomo nuevamente por la cintura y sujeto su cuello acercándola más para besarla.

Lina: ¿Contento? –el negó volviendo a besarla- ya Braulio, tengo hambre. Además recuerda que debemos ir con el señor Sebastián para mostrarle lo que encontraste.

Braulio: Eso me recuerda a Benjamín, debo llamarlo para que también este presente –saco su celular para marcarle a Benjamín pero Lina se lo arrebato de las manos.

Lina: ¡Ni se te ocurra! Hoy es un día importante para él, así que no lo vas a arruinar –advirtió.

Braulio: Esta bien, solo hablare con Sebastián, pero en algún momento se enterara.

Lina: Si, pero hoy no, ahora vamos a comer –acerco lo que había preparado poniéndolo sobre la mesa, Braulio se sentó llevando consigo a Lina y la sentó en sus piernas, así entre risas y besos empezaron a comer.

Los aplausos resonaban en todo el auditorio, habían figuras importantes exponentes de la música clásica y moderna, iconos juveniles y todo un público esperando la presentación de Benjamín.

Ana: Estas bien amor, todo saldrá como en los ensayos –dijo cargando la niña en sus brazos mientras veía a Benjamín de un lado a otro nervioso.

Benjamín: ¿Y si no les gusta? Sera el fin de mi carrera que apenas comienza, tendremos que mudarnos de estado, no podría con la vergüenza –freno cuando Ana se puso frente a él.

Ana: Lo harás bien cariño, no te preocupes –beso sus labios, benjamín cargo a la niña- eres muy talentoso y si se te olvida alguna parte, improvisa, Amalia y yo estaremos en primera fila viéndote triunfar, no lo olvides.

Benjamín: Gracias, estoy haciendo esto por ustedes, se lo merecen más que nadie, y por mí, que es lo que siempre soñé –beso la cabeza de su hija- prometo dar lo mejor de mí.

Andrea y Samuel habían llegado justo a tiempo, antes de la presentación de Benjamín, caminaron hasta encontrar sus lugares al lado de Ana con la niña.

Andrea: ¿Todavía no comienza?

Ana: o, llegaron justo a tiempo. Benjamín se va a presentar, esta todo nervioso –sonrió a su amiga.

Samuel: Yo no sé mucho de música pero mi oído me dice que Benjamín es bueno, lo hará bien.

En ese momento anunciaron la entrada de Benjamín, entonces apareció con un traje negro y corbata, se acerco a pasos lentos donde estaba el piano y acomodo el micrófono.

Benjamín: Buenas noches, damas, caballeros y niños, quiero darle las gracias por asistir a este concierto –sus ojos se clavaron en las dos personas que estaban en primera fila- este concierto va dedicado a mi mujer, Ana, quien me dio lo más valioso para los dos, nuestra pequeña Amalia. Esta pieza musical la compuse para ella, y tiene el título de ''Mi pequeña Amalia''.

Todos se quedaron en silencio mientras empezaban a sonar las teclas del piano, admiraban la melodía que se empezaba a escuchar. Su música era suave, emotiva, transmitían los claros sentimientos de un padre hacia su hija. Benjamín se concentro en la música, cada tecla que tocaba era exacta, la música que tanto le apasionaba parecía hablar por él, entonces se entrego por completo a la música. Por fin estaba siendo el mismo, en una versión más mejorada ya que ahora estaban Ana y Amalia en su vida, ellas lo ayudaban a dar lo mejor de si, eran su inspiración.

En el momento que la música ceso dando por terminada la pieza musical, los aplausos empezaron a resonar, a la gente le había encantado. Ofreciendo su mejor sonrisa, Benjamín les dio las gracias a su público.

Braulio y Lina llegaron a casa de Sebastián, ahí los recibió la señora Ángela ofreciéndoles te y un poco de galletas.

Sebastián: Braulio –se acerco a ellos y los saludo- es bueno tenerlos por aquí, espero se queden a cenar.

Braulio: A lo mejor otro día, esta noche tenemos planes –guiño el ojo a su novia quien le sostenía la mano- venimos por lo que le comentaba en la llamada, aquí está todo –le paso un folder que Sebastián chequeo de inmediato.

Sebastián: No puedo creer que mi hija fue capaz de hacer todo esto, ¿Cómo no os dimos cuenta antes?

Braulio: Ella utilizaba un nombre falso para mandar todo el dinero a una cuenta en suiza, de ahí hacia otras transacciones logrando así que perdiéramos la pista, pero afortunadamente esta vez dimos exactamente donde las dirigía y logramos escanear la información.

Sebastián: Esto es mucho dinero, toda una fortuna... no puedo creer que ella haya hecho esto a Samuel ¡Era su prometido!

Lina: Creemos que lo hizo en ese tiempo que Samuel se emborrachaba, ella se aprovechaba de su vulnerabilidad y algunos papeles tuvo que hacerle firmar.

Braulio: Por su culpa Samuel estuvo a punto de perder la empresa.

Ángela: Dios mío –sus ojos empezaban a picar sintiendo decepción- ¿Y mi hija?

Braulio: Solo estamos esperando una nueva transacción para saber exactamente donde esta, todas sus tarjetas y cuentas están siendo rastreada, y en cuanto se tenga una información me llamaran. Esta vez no escapara de nosotros.

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¡Hola!

Uff ya entramos a etapa culminante. No sé cuantos capítulos queden pero más o menos, hay que atrapar a Samara antes que haga más daño ¿no lo creen?

Y bueno... se que he estado floja para escribir jejeje pero ayer me dormí sin poder terminarlo, y aquí esta, espero lo disfruten, y tratare de publicar mas pronto, se los debo.

¡Muchas gracias por leer!