Capitulo 9: Situación Incomoda.

4.8K 259 41
                                    


Sumergida en un sueño profundo, Andrea comenzó a sentir los músculos de unos brazos que la envolvían, un aroma muy varonil que conocía a la perfección y que tanto le gustaba, la idea de pensar en el la hacia suspirar, soñaba con el día de amanecer en sus brazos, los dos juntos en una cama. Fue despertando al darse cuenta que el sol empezaba a colarse por las cortinas, aun era temprano y se sentía esa brisa mañanera, pero se sentía muy a gusto, su cuerpo permanecía caliente. A medida que abría los ojos pudo visualizar sus labios, al principio no estaba consciente de lo que era, hasta que se dio cuenta que ya no estaba soñando... ¡Era el! ¡Y estaba con ella, en su cama!

Andrea: Ahh –grito haciendo que Samuel despertara de golpe, los dos se separaron cada uno cogiendo por un lado diferente.

Samuel: ¿Qué pasa Andrea? ¿Por qué gritas de esa manera? -se quejo mientras la analizaba con la mirada, Andrea permanecía sin poder pronunciar una palabra, si, habían dormido juntos y eso era algo que no podía asimilar fácilmente- ¿te sientes mal otra vez? –pregunto preocupado mientras se acercaba y ponía una mano en su frente- ya no tienes fiebre...

Andrea: Samuel, ¿Qué hacías en mi cama? –se alejo de el, sus nervios eran tan agudos que no le permitían alejarse mucho, sus rodillas comenzaron a temblar y de un momento a otro sintió una punzada que casi le saca el aire.

Samuel: Ya vez... no puedes levantarte de la cama –se acerco cuando vio su expresión de dolor y la llevo nuevamente a la cama, Andrea lo observo por unos segundos mientras el buscaba algún medicamento que darle.

Andrea: Aun no he desayunado –dijo cuando este le entregaba una pastilla.

Samuel: Tienes razón... iré por algo de comer –salio de la habitación para buscar algo en la cocina, ya su desayuno estaba listo, y el mismo lo puso en una bandeja junto con el desayuno de Andrea, un poco de café, jugo de naranja, un plato de frutas, unas tostadas, seria suficiente para ambos desayunar. Regreso a la habitación, entro sin llamar a la puerta, pero su sorpresa fue encontrarse con Andrea a medio vestir, solo en ropa interior, los proximos segundos le dio tiempo de subir y bajar la mirada varias veces antes que Andrea se diera cuenta que Samuel estaba ahí.

Samuel: Perdón, discúlpame –dijo dándose la vuelta, saliendo rápidamente dejando a Andrea estupefacta.

Ana salio de su casa antes que su madre, no quería verle la cara y hasta ahora lo había conseguido. Llegando a la universidad se encontró con Lina en el mismo lugar de siempre, ambas entraron y mientras caminaban, Ana le contó el plan que tenia.

Lina: ¿O sea que te vas? –pregunto un poco triste, Ana era su mejor amiga, aunque sabia sus razones no podía evitar sentirse triste al saber que pronto se separarían.

Ana: Todavía no tengo dinero suficiente, pero donde estoy trabajando ahora me pagan muy bien, ahorrare lo suficiente para viajar a otra ciudad y poder mantenerme hasta conseguir un trabajo decente, lo único que extrañare de este lugar, sera a ti –dijo sosteniendo su mano con una sonrisa, en ese momento Benjamín se acerco a ellas.

Benjamín: ¿Por qué te vas? –pregunto algo extrañado.

Ana: ¿Ahora te dedicas a escuchar las conversaciones ajenas? ¡Esto es el colmo!

Benjamín: Solo venia pasando y escuche, lo siento...

Ana: Últimamente apareces en todos los lugares, ¿no sera que me estas acosando?

Lina: ¿Son ideas mías o me he perdido de algo entre ustedes? –pregunto mirándolos a ambos.

Benjamín: Lina, déjame a solas con Ana por favor –dijo sin dejar de mirar a Ana.

Mundos OpuestosWhere stories live. Discover now