Sinopsis
¿Qué pasara en el momento que te enamoras de la persona equivocada?
Tu jefe.
Y lo peor del caso, es que te ve como su mejor amiga.
Mundos opuestos nos trae la historia de Andrea, una chica humilde, sencilla pero muy decidid...
Habian sido muchas emociones, todas tristes después de lo que Lina le había contado a Ana. Mientras regresaba a casa iba pensando en su amiga, miraba la carretera cuando su mente trataba de asimilar el sufrimiento de su amiga. Todo este tiempo había estado pasándola mal, por eso nunca respondió un mensaje ni contestaba la llamada. Toco su vientre recordando que su amiga había perdido un embarazo, y que a partir de ese momento su vida se convirtió en una desgracia.
Benjamín: Llegamos -dijo cuando se parqueo fuera de la casa de Ana- ¿te sientes bien? -pregunto notando su tristeza.
Ana: Lina, sufrio mucho -guardo silencio. Benjamín salio del auto, le abrió la puerta para ayudarla a salir.
Benjamín: Nada de esto es tu culpa, ¿esta bien? -ella asintió mientras el la acerco a su cuerpo abrazándola.
Ana: Debo entrar a casa -se separo del abrazo, el asintió y para despedirse, se acerco besando su mejilla a pocos centimetros de sus labios, tanto que casi pudo rozarlos- eh... buenas noches -dijo nerviosa por su cercanía. El la miraba mientras ella entraba a la casa, poco a poco ira ganandosela de nuevo.
Al dia siguiente, Andrea amaneció tapada con las sabanas que la cobijaban brindándole calor, se removió incomoda al sentir la luz que entraba anunciando que el día había llegado, busco a Samuel con sus manos, todavía con los ojos cerrados los cuales abrió de repente al no sentirlo y se dio cuenta que estaba sola en la cama.
Samuel: ¿Me buscabas? -se acerco con una bandeja donde traía el desayuno, ella lo miro encantada, tenia una playera puesta, su cabello notablemente alborotado, con una sonrisa se acerco dejando un beso en sus labios- buenos días preciosa, espero no te moleste que haya traido el desayuno.
Andrea: Para nada, me encanta -se levanto para lavarse los dientes, Samuel la miro cuando ella entraba al baño.
Samuel: No se si te encanta mas el echo de que haya pedido el desayuno para que comamos con mas intimidad, o yo -dijo observándola cuando ella terminaba de lavarse los dientes, entonces ella lo miro haciendo un gesto gracioso.
Andrea: ¡Presumido! -golpeo ligeramente su hombro y el se movió para que ella pudiera salir, pero antes de que llegara a la cama donde estaba el desayuno, la tomo arinconandola contra la pared y comenzó a besarla.
Samuel: Antes de comer merezco muchos besos, no crees -continuo deleitándose con sus labios hasta que ella se separo.
Andrea: Ya vamos a desayunar Samuel, después quiero ir a la playa y pasar todo el día contigo -lo condujo para sentarlo, el aprovecho y de un movimiento la sentó en sus piernas.
