Capítulo 11

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—¡Jamás haremos algo tan riesgoso como eso de nuevo William! — Louis grita tan pronto entran a la casa. Will se encoge ante el tono que uso con el, pero asiente estando de acuerdo con el mayor.

—Está bien...

—Y nunca más vuelvas a ocultarme ni una mierda. — Louis lo mira con desprecio y el omega menor retrocede. — Nunca he hecho nada para que desconfíes de mi William, y el hecho de que hayas ocultado algo de gran valor que afecta al plan va más allá de lo que puedo comprender. Me das vergüenza.

—Lou...

—No me vengas con "Lou". — Louis murmura enojado. — Esta noche duermes en el sillón. Ahora estas en tiempo de descanso.

William lloriquea, su lobo interior hincándose en sumisión y pidiendo perdón, pero su hermano solo lo ignora y se va a su habitación. El gemelo menor, sí que lo había arruinado todo ahora, lastimo mucho a Louis.

Estaba tan concentrado en jugar y ganarle la partida al alfa que encontraba muy lindo, y quería el teléfono para el mismo. No se había dado cuenta que seria algo muy importante.

Pero, claro, William no observaba los pequeños detalles y las acciones que realizaba. Por eso Louis se hacia cargo, por eso necesitba a Louis, y esta noche fue la prueba de eso.

William toma un manta del armario que estaba en el pasillo y se acuesta en el sillón luego de desvestirse quedando en unas bragas de encaje que amaba usar. Tenia un nudo en el estomago y su corazón encogiéndose ante lo que sentía.

Observa el papel en su mano, mordiéndose el labio inferior viendo los números que formaban el numero de teléfono de Harry. Lo arruga en su puño y lo tira al suelo sin importarle donde caia.

No quería seguir con el plan si iba a separarlo de Louis.

A la mañana siguiente, se despierta oliendo comida que venia de la cocina y se refriega los ojos, queriendo quitar el sueño de ellos. Se levanta estirándose, haber dormido en el sillón, le había dejado dolor en la espalda. Camina hacia la cocina encontrándose con Louis cocinando.

—¿Hermano? — Pregunta suavemente no muy seguro de si las repercusiones de anoche aún estaban presentes. — ¿Lou?

—Siéntate, William. — Lo hace, y su hermano deja los platos sobre la mesa. — El número que conseguiste anoche. ¿Dónde está?

—En el piso junto al sofá, creo, no lo sé, lo tire por ahí. — William dice sin aun tocar un bocado de su plato. — ¿Por qué?

—Continuaremos con el plan. —Louis responde y Will asiente. — Pero tenemos que ser mucho más cuidadosos ahora. Anoche casi nos pusimos en peligro, así que tenemos que tomarlo con calma.

—¿Y qué hacemos con el número de Harry?

—Puedes mandarle un mensaje, pero no le des ninguna información personal sin preguntarme antes. — William asiente dispuesto a hacer hasta lo imposible para arreglar esto. —Mantente alejado de Edward, y deja en paz a Marcel por un rato. Hemos asustado a los hombres lo suficiente, por ahora.

—Está bien. —No le quedaba otra que rendirse y hacer lo que su hermano le indicaba.

—Ahora come. —Louis dice tomando su mano a través de la mesa.

***

—El dice que el trabajo es un poco aburrido. — William murmura y junto a su hermano se sientan en la cama doble, solo en sus bragas. Ha pasado casi una semana, y William ha ganado la confianza de Harry a través de mensajes que se mandan todas las noches o hablaban por FaceTime durante los recreos en el trabajo. El omega le contó que se había quedado sin trabajo por lo que había sucedido aquella noche en el restaurante, lo que el alfa obviamente creyó. — Me pregunta que estoy haciendo ahora.

—Dile que estas conmigo. — Louis sonríe de forma traviesa rozando su cara contra el cuello de Will. — Podemos hacer algunas cosas excitantes para él.

—Louis...—William hace una mueca. — Dijiste que seamos cuidadosos.

—No le dirá a Edward, y estoy seguro de que es un alfa muy sexualmente activo. — William asiente estando de acuerdo con el recordando los mensajes calientes que Harry le mando. — Solo una foto Wiily, no pasara nada.

William se da por vencido dándole el gusto a su hermano. Le manda un mensaje a Harry y espera a que responda. Mientras tanto, Louis se sienta a horcajadas de su hermano menor y en ese momento William capta su aroma.

Louis estaba derramando lubricante natural.

—Louis...—William jadea cuando su hermano mueve sus caderas para crear fricción entre ellos haciendo que el omega menor gima. — ¿Por qué estas mojado?

—No me han tocado en semanas, Willy, ¿por qué no matar dos pájaros de un tiro? —Sugiere pícaramente mordiéndose el labio inferior mirando sus ojos igual de azules que los suyos.

Ahora que lo pensaba, William tampoco ha follado con nadie en semanas y el hecho de que Louis esté haciendo esto, hace que se note más su frustración sexual.

Ambos omegas olvidan rápidamente a Harry concentrados en refregarse el uno contra el otro. Sus labios se unen en un beso caliente y gemidos llenan la habitación. Cuando su teléfono suena, señal de nuevo mensaje, Louis toma el celular desbloqueándolo sin separarse de los labios de su hermano.

"¿Qué es lo que estas sugiriendo? 😉 xx"

El gemelo mayor sonríe y decide tomar una foto de sus miembros rozándose, ambos duros como una roca y en las puntas se podía ver liquido pre-seminal, a través de sus bragas que iban a juego. Se la envía al alfa.

"Estoy sugiriendo que un alfa verdadero y grande venga y nos llene de su nudo..."

Mira los ojos soñadores de su hermano, estando en un estado mágico.

Sus ojos estaban oscuros, la cabeza apoyada contra las sabanas con su boca levemente abierta. Completamente caliente. Louis suelta una risita y se mueve más rápido y duro sobre el viendo como su igual cierra los ojos tirando su cabeza hacia atrás por el placer que estaba sintiendo.

—¡Louis! —Exclama entre gemidos con sus manos agarrando fuertemente el trasero de su hermano apretándolo contra el queriendo más fricción si eso era posible.

—Vamos Willy...—Dice jadeando de placer, pero se baja de el acostándose a su lado boca arriba. — En mi cara, amor, lo necesitas.

Sin dudarlo William se arrodilla quedando a la altura del rostro de su igual liberando su miembro que la braga le apretaba y tocándose a sí mismo rápidamente se corre lanzando chorros de semen sobre el rostro de Louis. — ¡Oh mierda! —Sus ojos se ponen en blanco tirando su cabeza hacia atrás. Se tira a su lado boca arriba exhausto dejando olvidado el sonido constante del teléfono.

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Capítulo largo, espero lo hayan disfrutado :)

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The Alpha Sirens (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora