Capítulo 75

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Había pasado una semana desde el incidente de la leche.

Los gemelos se habían escapado de la casa este día, los tres alfas estaban tan concentrados en el trabajo que no prestaban atención a lo que los omegas estaban haciendo.

—Tenemos — William mira su celular. — Exactamente cinco horas antes de que empiecen a tener hambre y se den cuenta que nos fuimos sin ellos.

—Es bueno que hayamos reservado el primer turno entonces — Louis dice mientras estaciona el auto y salen. El estacionamiento estaba vacío a esta hora de la mañana, solo estaban los autos de los que trabajaban allí, así que Louis encontró un lugar cerca de la entrada. — Apuesto que serán mitad y mitad.

— ¡Apuesto que vendrán mas varones! — William ríe mientras se anuncian y van a la sala de esperar a que los llamen.

No tardaron mucho, ya que la doctora solo tenía que esterilizar la habitación. Son llevados a una habitación normal, Louis primero esta vez.

Se levanta la remera impacientemente y arruga sus dedos cuando le ponen el gel.

—Niños, niños, niños — Louis ruega internamente y la doctora ríe. — ¿Qué son?

—Bueno...

***

William abre la puerta y tiembla cuando alguien se aclara la garganta.

—¿Dónde han estado? — Miran a Harry y entran a la casa por completo.

—Afuera — Louis dice como si nada y el alfa alza una ceja. Se hace a un lado y señala la cocina. — ¿Tienen hambre?

—Coloquen sus culos en las sillas antes de que los golpee! — Harry gruñe y ambos lloriquean en sumisión, apurándose a hacer lo que les ordenaron. Allí, frente a ellos, estaban sentados los otros dos alfas.

—Ahora — Edward dice con calma cuando todos le prestaban atención. — ¿Dónde han estado?

William mira hacia abajo viendo su muñeca brillante mordiéndose el labio inferior, y ve que Louis hace lo mismo. Ninguno responde, nerviosos sin saber que responder.

—¿Listo? — Susurra a William, y los alfas se dan una mirada confundida entre ellos. Ambos dejan al descubierto sus muñecas izquierdas.

En la de Will, había dos pequeñas marcas rosas y dos marcas azules. Louis en cambio, tenía tres pequeñas marcas rosas y una azul.

—¿Qué es eso? — Harry pregunta por todos y ambos chicos le dan una mirada de emoción.

—Los tatuajes de los géneros —William dice suavemente y cada alfa jadea de sorpresa. — Dos niños y dos niñas tengo yo.

—Tres niñas y un niño yo. — Louis asiente orgulloso.

—Oh —Marcel susurra.

—Por —Edward se levanta.

—¡Dios! — Harry termina y toma a ambos omegas embarazados en sus brazos lleno de felicidad.

—Cinco niñas — Edward murmura.

—¡Necesitamos decorar las habitaciones, podemos pintarlas y amueblarlas ahora! — Marcel salta de alegría.

—Son muchas para proteger — El mayor de los trillizos abre los ojos grandes. — Muchos. Chicos. Que. Golpear.

Sonríe ante el pensamiento de golpear a esos chicos malos, y festeja con su hermano menor.

—¡Mierda sí! ¡Finalmente estas manos podrán hacer su trabajo! — Empieza a boxear en el aire. — ¡Vamos a patear traseros!

—Y nosotros éramos los violentos — Louis sonríe mirándolo con amor. — ¡Ven aquí, chico grande! Necesito amor.

William hace manitas agarradoras hacia Marcel y desde ese momento, la casa no tuvo ni un momento de silencio ya que por dos horas mientras los alfas pensaban en situaciones futuras y soluciones, la mayoría terminaba en que ellos golpeaban a quien sea que lastime a sus hijos.

Si, la vida era buena.

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Nunca les pregunté pero quiero saber quién es su alfa favorito, el mío es Marcel♥

The Alpha Sirens (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora