Not Again || Albalia

Break

POV Alba

Cuando cerré la puerta me encontré de frente con Maria, me miraba con una gran sonrisa victoriosa. Sin duda, nos había visto. Tendría que actualizarla.

A la mañana siguiente me quedé en casa, no me atrevía a salir a la calle después de la inesperada aparición de mi padre. Maria se ofreció a quedarse conmigo pero me negué, ella perdía alrededor de 3 de las 5 clases de la semana. No era plan que los profesores decidieran suspenderla definitivamente por una falta que tuviese que ver conmigo.

Cuando se fué me levanté y me metí en la ducha para relajarme. Al salir, decidí que era hora de ponerme a estudiar y realizar los trabajos acumulados así que encendí el reproductor musical y me puse los auriculares.

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Serían alrededor de las doce del medio dia, estaba en el salón intentando conseguir trazar una curva que se resistía mientras estaba escuchando una de las canciones de Rosalía, la tarareaba por lo bajo.

Me asusté cuando sentí unos brazos rodearme pero enseguida me relaje al sentir su perfume. Me abrazó con fuerza y dejó un beso en mi mejilla.

"Nat, ¿Que haces aquí?" Pregunté quitandome los auriculares. Seguía abrazandome por encima de los hombros y yo le acariciaba los brazos.

"Me he encontrado con Maria y he considerado que sería buena idea darte una sorpresa" Dijo tranquilamente mientras me enseñaba las llaves del piso de Maria.

"¿Te la has encontrado o te ha buscado??" Deduje mientras me levantaba, nos quedamos mirandonos frente a frente.

"Oye, ¿que no podría haberla buscado yo?" Bromeó. Sonreí y la abracé sonriente. Me sentía tan tranquila y en paz con su simple presencia.

"¿Has venido a acompañarme en mi frustación por no poder dibujar bien esa mierda?" Comenté divertida. Natalia nego con la cabeza y se acercó al caballete.

"¿Qué es lo que no te sale? Yo lo veo todo bien" Dijo Natalia, yo negué con la cabeza acercandome al lienzo y señalandole una zona del dibujo.

"¿Ves eso? No esta simetrico con la otra zona." Dije frustrandome de nuevo.

"¿Puedo?" Dijo cogiendo el lápiz del caballete, me encogí de hombros.

"Adelante" En un segundo Natalia con un sólo trazado había arreglado mi problema. Suspiré con alivio.

"Gracias Nat. Literalmente llevaba media hora sólo centrada en ese error"

"Te estabas ofuscando, Albi" Me sonrió. "Yo venía aquí por algo" Comentó, la miré con sorpresa y con una mirada interrogante.

"Venía a sacarte de aquí, iba a proponerte ir a comer juntas o a tomar algo. No sé lo que quieras pero fuera de esta casa" Dijo pasandose su mano por el pelo, visiblemente nerviosa. Le sonreí sonrojandome levemente.

Claro que quería ir con ella por ahí pero la anterior presencia de mi padre hacía que me diese terror salir afuera.

"Quiero ir contigo a comer, tomar algo o 'no sé'" Confirmé sonriendole calidamente. "Aunque salir, me da miedo después de lo de ayer Nat" Natalia me cogió las manos mirandome.

"Por eso mismo tienes que salir, aqui dentro te comerás más la cabeza. No te va a ocurrir nada, te lo prometo." Asentí con la cabeza, tenía razón. Quedarme aquí sólo alimentaría mi miedo. Suspiré y asentí de nuevo con la cabeza.

"A que estamos esperando, ¿Natalia Lacunza?"

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Eran las seis de la tarde, Natalia y yo nos habiamos pasado el día juntas. Habíamos acabado de nuevo en el parque con su skate. Tal cómo la última vez, conmigo aterrorizada y ella muerta de la risa. La odiaba.

"Vamos subete, te agarraré tranquila" Dijo Natalia en posición, riendose detrás de mí.

"Como me sueltes la tendremos, Lacunza" Amenacé mientras me subía al skate. Natalia soltó una carcajada poniendo sus manos en mi cintura, noté su cercanía y como su aliento chocaba contra mi oreja.

"No lo haría nunca, Alba Reche" susurró causándome un escalofrío por todo mi cuerpo, giré mi cabeza encontrándome con su mirada, le sonreí y miré sus labios. Suspiré viendo como se entreabrían, subí mi mirada encontrándome con sus ojos puestos en mis labios y sonreí acercándome a ella. Nuestros labios se rozaban pero decidí picarla y me separé.

''Más te vale'' Susurré. Natalia me sonrió y reforzó su agarre en mi cintura, empezando a empujarme para que rodase. Llegó un momento que íbamos a bastante velocidad y lo estaba disfrutando muchísimo.

''Ahora tú'' Dijo Natalia riéndose mientras me soltaba. Di un grito al verme sola subida en aquel skate a esa velocidad, me intenté no matar manteniendo el equilibrio de cualquier manera, se me hizo eterno el tiempo en el que el skate tardó en detenerse. Cuando por fin lo hizo me bajé completamente cabreada, Natalia venía caminando hacía mi aguantandose la risa.

''Te voy a matar'' le dije acercándome a ella. ''Eres una completa idiota, cabrona. Te dije que no me soltases'' Dije llegando hasta ella completamente seria, ahí estaba ella completamente quieta con los brazos cruzados mostrandome una de sus putas sonrisas que me encantaban no sé que fue pero seguí mis impulsos y me lancé a su boca. Natalia tardo un poco en responder pero cuando lo hizo nos besamos con intensidad y fuerza, nuestras bocas eran una batalla por el control. La cual gané yo y sonreí victoriosa entre besos. Nos separamos por falta de aire, juntando nuestras frentes.

''Wow, tendré que joderte más veces'' Bromeó Natalia. Sonreí dandole un golpe en el brazo intentando parecer molesta pero cuando me miró sonriendo esa fachada se fue a la mierda.

''No lo vuelvas a hacer'' Concluí seria pero más tarde mostrándole una sonrisa. Suspiré cansada. "Estoy reventada, tú no?'' Natalia asintió bostezando.

''Te acompaño a casa, vamos'' Dijo acercándose y recogiendo el skate. No me negué y juntas nos encaminamos hasta mi casa. Me sorprendí cuando sentí que su mano se acercaba a la mía rozándola para más tarde atreverse a agarrarla. Sonreí visiblemente feliz y establecimos un cómodo silencio hasta llegar a mi casa, dónde al girar la esquina nos encontramos a una muy molesta Maria esperando sentada en el portal.

Al notar nuestra presencia se levanto rápidamente y se acercó a nosotras. "Vosotras dos estáis en un problema; Lacunza, ¿recuerdas que tienes mis llaves? ¡Llevo literalmente desde que he llegado de la uni llamandote Alba! ¿Tienes el móvil de adorno?"

"Ups" dijimos a la vez