Enamorada Del Idiota (TERMINADA)

pide

El auto de jimin es bastante amplio. Una pic up 4 puertas. Pero aún así... Me sentí sofocada estando dentro con él a solas. 
Cómo era de esperarse, no me dirigió la palabra en todo el trayecto. Sólo aceleraba y me miraba por el espejo retrovisor de a ratos. Porque sí... Es tan idiota que no deja que ninguna mujer viaje en el asiento del acompañante. Sólo su madre e incluso ella es mandada a atrás cuando alguno de sus amigos llega.

Pero hay algo en su mirada que me inquieta... Ya no se ve tan enojado. Parece herido y hasta podría decir que desilusionado. A veces, cuando veo esa expresión. No puedo evitar pensar en lo mucho que me gustaría tener la oportunidad de conocerlo mejor... Y no hablo de sus gustos que me he encargado de aprender a la perfección. Hablo de sus pensamientos, sentimientos, etc. Pero... Él es tan obstinado que jamás dejaría que una chica lo conozca hasta ese punto. Es tonta mí manera de pensar y no es algo que pueda manejar. Simplemente sale cada vez que me toca viajar con él.

Y aquí debo abrir paréntesis. Llevo una semana en la universidad y sólo los amigos cercanos a jimin saben de nuestro parentesco. No sé porqué, a mí me da igual que sepan que es mí hermanastro pero parece que eso es algo que a él le molesta. Por lo que, cuando le toca llevarme, me deja a dos cuadras para no nos vean llegar juntos.

Demasiado estúpido...

Pero esta vez, no estaciona en la esquina de siempre. Llega al estacionamiento de la universidad y aparca en la zona estudiantil.

Lo veo apoyar la frente sobre el volante del auto y se golpea la cabeza cómo queriendo reprimir pensamientos... Qué pensará?

—necesitas una invitación para bajar?— pregunta, levantando la cabeza y regalándome su ceño fruncido por el espejo.

—esperaba una disculpa—suspiro. —jimin... No quiero llevarme mal contigo. Sé que no te agrado, pero al menos... Podrías ser menos idiota?

Lo veo relamer los labios y pasar un dedo por la comisura. Ese gesto que trae en los ojos me embelesa haciéndome arrepentir de haber sonado tan valiente. —es lo que intento— contesta sereno. —te ofrecí un trato y lo rechazaste. Sería ventajoso para los dos... Yo! —se voltea de su asiento, se inclina quedando frente a mí y se señala. —obtengo tu ayuda incondicional y tú! —con el mismo dedo me señala. —obtendrías lo que todas las chicas quieren.

—qué sabés? No tienes idea de lo quiero— mí voz suena débil. Pero al mismo tiempo emocionada.

—tú buscas satisfacer tus deseos— afirma con seguridad.

—claro que no!— me apresuro a aclarar

—no? mírame— pide inclinando más su cuerpo de manera peligrosa. —niega mirándome a los ojos. Qué no has deseado que te toque, que bese tu cuerpo y que te folle tan rico que te haga olvidar todos tus problemas.

Su voz bajó unos tonos pero se agudizó haciendo eco en mis oídos. No puedo! No puedo negarlo porque tiene razón! —fo-fo-follar?— digo a duras penas provocando una sonrisa burlona que cubre su rostro.

—eso. Dilo! Pídelo! ___, pídeme que te folle— mí nombre suena ridículamente excitante en sus labios. Me tienta y todos mis esfuerzos por resistir se ven peligro.

—no— contesto con una firmeza que me asombra. —no seré otra en tu lista. Yo busco exclusividad.

Vuelve a la comodidad de su asiento y presiona el volante con ambas manos. Sus nudillos se marcan y siento que me ahogo. Ya lo hice enojar...

—crees que ese idiota te dará exclusividad?  No seas estúpida, eso no existe.

Espera... Qué? Ese idiota? —no sé de lo que hablas.

—tu follamigo Jackson. Él es incluso peor que yo con respecto a las mujeres. Al menos yo te ofrezco un sinfín de satisfacciones. Tú sólo debes ayudarme con nuestros padres, decirles lo que yo te pida, emm... No es difícil.

Y ahí está... Ya entendía todo. Había algo que yo podía darle que otras no; no era mí pequeño cuerpo poco desarrollado o mí dulce compañía que aburre a cualquiera...

Lo sentí en el pecho. Algo se rompió dejando un horrible vacío. Siempre tuve miedo de enamorarme de un idiota que me utilizara, pero que pidan mí consentimiento para hacerlo... Era denigrante. O sea, tengo cara de necesitada? A caso cree que tengo las hormonas tan aceleradas para aceptar algo así? Y para qué? Cuando ya no me necesite me dejará votada cómo si fuera basura. —sabés qué? Prefiero ser el juguete de Jackson. Al menos él si sabe ser un caballero y aunque me use, no me lo haría sentir. Tomó mis cosas y golpeo la puerta al notar que el seguro sigue puesto. —jimin abre!— grito horrorizada.

—entonces. Ayúdame de buena fe. Te trataré bien... Pero de verdad, te necesito— suspiro contenido el llanto y la gran duda se instala en mí cabeza. Qué estaba pasando con él?

—qué ocultas? Qué es lo que no quiere que sepan?— pregunto con un tono preocupado. Lo estaba! El solo pensar que Jimin estaba pasando un mal momento, me provocaba un vacío en el estómago.

—eso no te importa.

—entonces lo siento. Siempre tuviste mí ayuda! Cada vez que tú madre llama en la madrugada soy yo quien le dice que estás durmiendo. Qué llegaste cansando del trabajo y que me da pena despertarte. Soy yo! Quien le dice que sí has venido a la universidad cuando no es así!!! Siempre tuviste mí ayuda! No sé que te pasa ahora que inventas historias para que lo haga. Pero ya no más... Me acabas de perder.

Se queda en silencio lo que me parece una eternidad... Sólo se escucha su respiración acelerada y siento lastima... Es obvio que algo le pasa. Algo que lo está atormentando y quiero saber de qué se trata. Así se lo tenga que sacar a los gritos.

—vete. La conversación terminó— dice con una serenidad que me duele. No... Estoy loca por pensar que me contaría sobre su vida y más loca estoy por pensar que él podría querer tener algo conmigo...