Enamorada Del Idiota (TERMINADA)

Nuestro secreto

Un nudo frío se aloja en mí garganta y baja a mí estómago creando la impresión de que he comido piedras. No me gusta esto que estoy sintiendo...

Jimin me ayuda a salir del cuarto metálico con extrema delicadeza. No me pasa por alto el detalle gentil por lo que aprovecho para tomarlo del brazo. —qué sucede? Pensé que harías bromas respecto al momento vergonzoso o algo. Estás más callada de lo normal y eso no me gusta— quita mí mano desprendiendo mí agarre lo que me hace sentir un leve rechazo. Pero lo veo inclinarse indicando que me permitirá que suba en su espalda y mí corazón da un vuelco. Su actitud se siente irreal, pero no me intimida. Me paro detrás de él y lo tomo de los hombros inclinándome hasta llegar a su oído.

—jimin... Te has puesto a pensar el lo que dirá tu madre si descubre que nos acostamos?— me mira sobre su hombro. Hay un astibo de sonrisa en su mirada. —no me causa gracia— en verdad no sé que le ve de gracioso, yo estoy a punto de orinarme con la sola idea.

Dejó salir el aire que no sabía que estaba conteniendo y me recargo en su espalda. Su olor a recién bañado me atonta. Cierro los ojos para apreciarlo mejor y sin darme cuenta comienzo a besar su cuello, él se hunde de hombros a causa de la impresión lo que me provoca mucha ternura. Pero no se queja por lo que continúo.

—de verdad piensas que no lo saben?— da un pequeño salto para acomodarme mejor y tomandome de los muslos comienza a caminar a la salida. —___, ellos se dan cuenta cuando hay tensión sexual en gente de nuestra edad.

—qué vergüenza!— escondo la cabeza en su nuca dejando de lado el mimo pícaro.

—vergüenza? Piensas que ellos no lo hicieron en su juventud?— se detiene en la entrada y voltea su cabeza para enfrentarme. Quedo batiendo las pestañas ante su lógica, pero no puedo dejar de pensar en la probabilidad de que sea verdad. —no te estoy pidiendo que te detengas— afirma refiriéndose al mimo abandonado y termina dándome un beso corto en los labios.

—dudo mucho que mí padre se moleste. Pero no estoy segura en la reacción de tu madre... O, en la mía! Ella puede ser un dolor de cabeza cuando de sermones se trata.

Niega con la cabeza sin dejar de caminar hasta que llegamos a su auto en dónde me baja con cuidado y abre la puerta trasera para mí. Subo con su ayuda y me recuesto a lo largo esperando que él también lo haga, pero eso no sucede. En su lugar se inclina apoyando una rodilla sobre el piso del auto y los codos en el asiento. —no creo que sea buena idea pensar en eso ahora— no me atrevo a mirarlo, pero me acomodo mejor y me coloco el cinturón de seguridad. Supongo que nota que estoy aterrada, porque estira su mano hasta alcanzar la mía y la acaricia mientras continúa hablando. —quizá les resulte extraño pero no pueden impedir que suceda. A demás... Hay que ser coherentes. No es que tengamos una relación, no tenemos que darles explicaciones sólo porque nos acostamos. No es cómo si nos obligaran a casar o algo así.

Ok... Duro pero tierno. Sutil e idiota al mismo tiempo.

—Lo sé... Pero por el simple hecho de estar follando se torna extraño. Vivimos bajo el mismo techo!  Si llega a saberse no verán correcto que sigamos así. Uno de los dos tendría que irse...— quiero decirle que me aterra la idea que verme lejos de él. De perderme verlo despertar todas las mañanas, pero uso la lógica ya que él remarcó que no tenemos una relación y "esto" es sólo una follada más. —sé que tu relación con tu padre no es la mejor y no puedes hacerte cargo de un alquiler ahora, no al menos hasta que termines la carrera. Y yo... Podría irme con mí madre. Ella me lo ha pedido pero no es algo que quiera hacer... Digamos que tampoco tengo la mejor relación aunque no lo parezca.

—mierda!— bufa por lo bajo. —entonces debemos cuidarnos lo mejor que podamos. Ellos no dirán nada si no lo admitimos primero.

Asiento, pero tengo mis dudas.