Enamorada Del Idiota (TERMINADA)

Maratón (final)

Mí pecho sube y baja de manera enérgica. Mis dientes se presionan con fuerza y mis piernas tiemblan cómo si el piso se moviera bajo mis pies. —oh! Iré a poner algo de los gans!— dice jiyoon mirando a Sangoy y la veo desaparecer entre la gente.

Se está escapando!?

SE ESTÁ ESCAPANDO!???

—hermanita!— grita con los brazos extendidos, cómo si esperara que corra a perderme en ellos. Mis pies pesan y lo único que siento es un montón de insultos atorados en la garganta. Ella estaba con Jimin... Aparecieron Juntos.

Maldición...

Escucho a Nasty murmurar algo que no logro entender, sé que notó que estoy en shock e intenta ayudar. Pero no es hasta que toma mí mano, jala de ella y quedo sentada nuevamente sobre el sillón, que reacciono. —aquí se viene lo bueno— asegura el chico a mi lado pasándome otro pañuelo de maníes pelados. —que se abra el telón.

Trago duro al cruzar miradas con Jimin. Él luce igual que siempre, no podía ser de otra forma... Arruga su ceño unos instantes, pero rápidamente su expresión se relaja y creo que lo siento suspirar.

—voy a vomitar, quiero irme— susurro y la colorada presiona mí mano con fuerza.

—tu puedes. Sólo dile, hola y ya. No tienes necesidad de hablarle— resopla al ver que mí hermana se acerca. —y cambia la cara. Se nota lo tensa que estás.

Respiro hondo y decido hacer lo mismo que la última vez. "evitar el contacto visual"

—hola, soyeon— saludo firme y escucho una carcajada de su parte.

Pasa por mis amigos y los saluda amablemente, obviamente se presenta cómo "la hermana de ___," cosa que todavía dudo. Muchas veces estuve convencida que soy adoptada.

—hola, tú debes ser el nuevo cuñado— asegura una vez que se acerca a sangoy. Se sienta en el suelo frente a nosotros y no deja de mirarlo. Espera una respuesta y eso me saca de mis casillas. —jimin! Ven, te hice un lugar— dice palmeando a su lado.

—porqué tengo el presentimiento que todos buscan emparejarnos— susurra en mí oído.

—porque me odian y me desean el mal. — frunce los labios y asiente conforme con la respuesta.

—hola. Soy Sangoy— me alivia su tono seco y distante. No quiero que ellos tengan mucho acercamiento con esa mujer. No quiero que los contamine!

Mis ojos se clavan en las zapatillas de Jimin. La tentación de mirarlo la cara me quema debajo de los ojos y el ardor es insoportable, pero pongo toda la fuerza de voluntad en no hacerlo. —oye, ___! Haremos una ronda de tequila. El perdedor cumplirá una prenda!— grita jhope preparando una mesa.

—paso! Tengo que trabajar en unas horas— digo y miro con reproche al lunático que se revuelca en carcajadas. —no eres de ayuda— advierto

—no vine a ayudar— aclara

—cuenten! Cómo se conocieron?— pregunta la rubia frente a nosotros y esbozo un puchero suplicante al chico junto a mi. Necesito prepararme mentalmente antes de hablar.

—Yo hago pasantías en un hospital, estudio enfermería y ese día tenía dos horas libres. Así que fui a una cafetería para buscar algo que me quitara el sueño. Y bueno... Ella apareció frente a mí y me derretí cómo un niño frente a una dulcería— cierro los ojos y estiro un brazo con el puño cerrado que va a parar directo a su estómago. Se queja de dolor pero ríe al comprender que me he puesto roja. —ok... Ouch...— dice sobando la zona herida. —en realidad, esta persona tan peculiar, pequeña pero destructiva, chocó conmigo haciendo que mí café recién preparado cayera al suelo.

—por favor...— suelto indignada. —me quemaste el brazo, lunático! Estuve dos semanas vendada! Y no me hagas seguir recordando...

—no! Recuerda, es interesante— dice soyeon pero la ignoro

—es espeluznante la manera en la que te mira el cabeza de tutifruti— susurra la colorada y mis ojos se ven obligados a cerrarce para no comprobarlo.

—me hizo perder las dos horas de descanso. Estuve todo ese tiempo intentado convencerla de que viniera conmigo al hospital, pero no me escuchaba. Morí ignorado. quince minutos después de que yo llegué. Me avisaron que había una emergencia en el área de quemados y supe que era ella— no puedo evitar mirarlo con incredulidad. No siento el sarcasmo normal en su tono de voz... Será verdad?

—yo no recuerdo esa parte de la historia— bato las pestañas en su dirección.

—princesa, yo te atendí. Yo te vendé! Incluso te presté un pantalón porque la falda no prendía— la risa de soyeon me incomoda. Sigo ignorando su presencia.

—me refiero a lo del café! Lo único que recuerdo es que me dejaste con una cuenta enorme!!— aprovecho la ocasión para reclamarle

—qué?— niega con indignación. —esa desgraciada te volvió a cobrar?— carcajea con una diversión exagerada. Ahora me siento avergonzada al decirlo. —yo pagué lo mío. Incluso le dije que te avisara dónde quedaba el hospital para que te hicieras ver.

Muerdo mí labio inferior con fuerza y suspiro derrotada. —de todas formas, me dejaste cómo la hija no reconocida de la momia. Hermosa manera de darme la bienvenida.

—vamos __! Esperamos mucho para que volvieras. No es divertido jugar con los otras chicas, no aguantan nada— suplica jin. Pero vuelvo a negarme.

—ya vuelvo. Iré a orinar— me susurra la colorada y deja un beso en mí mejilla. Por inercia, miro a William y le hago señas para tome su lugar junto a mi. Cosa que hace sin pestañear.

—vamos! Llevo meses practicando! No me dejes así!— ahora es jhope quien vuelve a preguntar pero esta vez, junta sus manos en forma de suplica.

—lo siento jhope. La próxima jugaré— prometo.

—jugar a qué?— pregunta William uniéndose a la charla.

—es un juego con tequila. Ayúdanos a convencer a ___. Ella es la invicta inamovible— sentencia jin y Willy carcajea.

—ella no puede. Está embarazada— mi mandíbula se cae al suelo. La busco desesperadamente pero incluso, los ojos me salen volando de los cuencos.

—que divertido— dice Sangoy con un sonoro y largo suspiro.

—no sabían?— pregunta mi amigo rubio y metedor de pata. Pero no lo culpo, él no sabía que era un secreto y me olvidé en decirle.

Segundos eternos pasan en total silencio y no puedo ni imaginar lo que estarán pensando. Estoy a punto de atravesar mis palmas con mis propias uñas, cuando la voz de soyeon se hace presente. —seré tía... Vaya sorpresa. De cuánto estás?

—mmm... Por la semana dieciocho, no?— la respiración se me corta cada vez más. Tengo miedo de desmayarme por falta de aire.

—basta— susurro entre dientes al lunático que tira leña al fuego dando pistas certeras.

Me animo a encararlo, luce divertido pero su expresión cambia a una de preocupación cuando nota lo terriblemente asustada que estoy. —princesa... Te pusiste pálida.

—voy al baño— aviso antes de levantarme. Pero la mano de Soyeon se encuentra con la mía y me obliga a girarme para encararla y por ende, a Jimin

—de quien es?— pregunta y puedo notar el tono preocupado. Lo cual es altamente extraño.

—tú que crees?— contesto seca y los ojos de Jimin se cruzan con los míos.

No puedo creer lo terriblemente contrariado que luce. Pero eso no es todo, es cómo si acabara de enterarse que será padre lo cuál es estúpido porque él se enteró antes que yo y huyó cómo el cobarde que es.

—tiene que ser una broma— la voz de mí hermana vibra en su garganta. La miró con el ceño fruncido intentado comprender esa actitud poco usual en su persona. Pero niego y ahora más que nunca necesito salir de allí.

—no, no es una broma. Es de Jimin y él lo sabía— afirmo y los susurros de los presentes se mezclan en el silencio abrumador.