LET IT BE
El calendario lo señalaba, según él, ya para ese momento tenía que estar al segundo día de haber llegado al siguiente país a visitar; en ese caso, Inglaterra, donde tenían que hacer parada en Liverpool, porque así lo acordaron todos.
Recordó como lo planearon en un principio Camila y él y luego se le unieron Lauren y Louis; que en ningún momento se arrepentía, porque si iba a buscar culpables de aquel desbarajuste y descontrol, eran los padres de Camila por encontrarse ahora varados en aquella situación.
Paseó el cursor por encima del link para comprar los pasajes y luego obligar así a que los otros decidieran si lo seguían. No estaba seguro de que Camila continuara, porque en su estado, era más difícil. Sin embargo, recordaba que ella había dicho que "contra viento y marea" lo acompañaría en aquel viaje, porque aunque ya no fueran novios, ahora eran amigos y los amigos se acompañaban a todas partes.
En cuanto a Lauren, estaba más que seguro que ella iría a donde fuera que estuviera Camila y si eso implicaba seguirla a todo lugar que a Camila se le pasara por la cabeza, eso haría ella. Pero, entonces recordó, que ya estaban a un mes de iniciado aquel viaje y que se fueron de Montreal, lo que quería decir que después de ese mes en el que estaban ahora, iniciaría Lauren sus labores que traía la fama. ¿Qué sucedería? No tenía la menor idea, pero ya consultaría.
Por parte de Louis, no sabía tampoco. No había hecho comentario alguno, exceptuando ese en la noche anterior en el que reconoció extrañar a su madre. Quizá en algún instante, deseara regresar a su Canadá y si Lauren volvía a los Estados Unidos, Camila la seguiría y él mismo quedaría solo en aquella embarcación.
Nunca se había sentido más solo que en aquel momento y muy inseguro de lo que debía o no hacer. Tenía una ex novia que estaba esperando un hijo suyo y estaba enamorado de su mejor amigo, que resultaba estar en una especie de compromiso de "veremos qué pasa" con un chico al que había conocido.
Quizá siguiera, pero estaba Camila con su bebé y había prometido no dejarla sola en ello, por lo que lo mejor y más sensato ahora, era posponer ese ansiado sueño de viajar por el mundo y continuarlo, quizá, dentro de unos años. Cuando estuviera más asentado en su vida, con su norte nuevamente encauzado y su hijo más crecido, tal vez, invitar a Camila y a Lauren para hacer ese viaje, junto con el nene. Le dolía pensar que quizá Louis no pudiera estar, sería realmente genial reiniciarlo con las mismas personas que estuvieron al principio de la travesía.
Su celular comenzó a sonar y sin ver la pantalla, se apresuró a responderlo.
-Aloha, ¿Quién es?
Una risa áspera y un tanto maliciosa traspasó la línea y repentinamente tuvo ese impulso salvaje por colgar la llamada, sólo que, por alguna razón, no lo hizo y sólo apretó el aparato, enojado.
-¿Qué quieres?
-Todavía con ese mismo saludo, hermanito querido, pero en fin... ¿Cómo estás? Cuentame... Los viejos y yo te extrañamos mucho por acá.
-¿No te cansas Harold??
- Después dices que soy el que busco pelea, pero tú estás demasiado a la defensiva. ¿Cómo está Camila de tus amores y pesares? ¿Para cuándo es el martirmonio...perdón, matrimonio?
Harry se levantó de la mesa del escritorio y odió no tener a Harold enfrente suyo para ahorcarlo.
-¡La tenía clara, sabía que fuiste tú! ¡Se lo dijiste a Sinu! Hijo de...
-¡Eh! ¡Eh! No, hermanito...cuidado-cortó Harold, en tono de censura y luego soltando una risita divertida-Que tu mamá y la mía son la misma persona.
