The Exchange (ALBALIA)

Capitulo 9

*POV Natalia.

Me asusté con el beso inesperado de Alba, automáticamente llevé mi mano hasta mi mejilla, en el lugar donde sus labios se marcaron.

Me sentí una completa idiota.

Negué con la cabeza y me fui a mi habitación, me tiré en la cama y fue inevitable que la imagen de Alba no apareciera en mis pensamientos. Traté de no dejarla ahí por mucho tiempo, llegué a la conclusión que necesito salir con alguien urgentemente.

Alicia, tal vez.

Caí en el sueño muy rápido, el día siguiente fue extraño levantarme sin mi cabeza explotando a causa de dolor. Bajé las escaleras, frotando mis ojos y bostezando, me encontré con mi mamá y Alba sentadas conversando.

-Buen día! -hablé con mi voz ronca.

-Hola hija. -se levantó, dando un beso en mi frente.

Me senté al lado de Alba, al propio y me comí la mitad de su sándwich.

-Hey. -reclamó, mirándome.

Le guiñe y di otra mordida, entonces saqué algo de mi boca.

-Solo tengo asco de esta cosa. -dije, sintiendo el sabor de la lechuga -Como puedes comer esta cosa en la mañana?

-Es bueno para la salud. -se encogió de hombros.

-Ustedes los españoles son raros. -hice una broma. -Mamá, quiero dos huevos. -grité, ella respondió con un "Ok" de vuelta.

-Después yo soy la extraña. -me lanzó una mirada.

Acabamos quedándonos en silencio después de eso, hasta que Elena despertó.

.LA MADRE QUE LA PARIO, POR QUÉ NADIE ME DESPERTÓ? -bajó las escaleras corriendo. -No voy a poder ir a caminar ahora.

-Tus pies no funcionan después de cierto horario o que?

-Deja que me ría para que la payasa no pierda su empleo. -fue sarcástica - El sol es más fuerte a esta hora.

Volteé los ojos y decidí no hablar nada más, dos palabras más y Elena va a comenzar a gritarme y decirme groserías. Comí mis huevos, sobre una mirada extraña de Alba.

-¿Quieres? -le ofrecí, colocando un pedazo de huevo en el tenedor enfrente de sus labios.

-No, gracias. -alejó mi mano.

Me encogí de hombros y volví a comer, cuando terminé, salí de la mesa y me recosté en el sofá y el teléfono sonó.

-Atiendes ahí Elena. -le dije, aun estando yo más cerca del teléfono.

-Atiende tú.

-No puedo, estoy en el baño . -dije, cambiando el canal de la tv.

Ella se levantó quejándose, cuando llegó al lado del teléfono se quejó.

-Hey, ¿no estabas en el baño?

-Atiende rápido.

-Hola? -habló, matándome con la mirada. -Si está. -tiró el teléfono encima de mi estomago. -Es para ti idiota.

-Hola? -pasé mi mano en donde me golpeó el teléfono.

-No apareciste ayer, ¿porqué? -preguntó Paul - Obedeciste a las ordenes de tu hermanita -dijo siendo sarcástico.

-Nada que ver. -me senté - Todavía no me he curado de aquella mierda que me diste anteayer.

-Cuida como hablas, aquella "hierva" era de primera. -dijo ofendido.