Capitulo 46

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*POV Alba

En el momento en el que sus brazos me envolvieron, tuve la extraña seguridad de que no quiero que me suelte nunca más. Su mano subió hasta mi cabello, uniéndome aun más a ella, su maleta había caído a un lado en el momento en el que choqué contra su cuerpo, obligándola a sujetarme, las lagrimas ya invadían mi rostro y yo no podía creer que realmente estaba con ella. Otra vez.

Me alejé, para poder ver su rostro, por Dios, está tan linda. Sus ojos chocolate, bañados por lagrimas, con el mismo efecto devastador de siempre. El rostro con más trazos de una mujer. Su cabello despeinado. No podía creer que ahora ella es solamente mía.

-Hola, mi amor. -saludó, secando las lagrimas que tenía en mi rostro.

-No puedo creer que estés aquí. -toqué su rostro, solamente para estar segura de que no estaba soñando.

-Te avisé que vendría, no te ibas a liberar tan fácil de mi. -guiñó, sonriendo -Hm ¿que tal si salimos del medio del aeropuerto? No entiendo mucho lo que dicen, pero creo que ya pasaron como tres personas maldiciéndonos por estar en medio del camino.

-¿Cuál es el problema con esas personas? No me dejan tener mi momento. -reclamé, haciéndola reír, mis manos aun temblaban, Natalia entrelazó nuestros dedos, tomó la maleta con la otra y nos hicimos a un lado -Ven aquí, te voy a presentar a madre.

-¿Ya así? ¿Casi ni llego y ya voy a conocer a mi suegra? -fingió estar aterrorizada, arrancando mi primera carcajada.

Con todos los nervios, me había olvidado que ella tiene ese poder de tranquilizarme. De hacerme sentir tranquila.

-Si, pero tu suegra no habla nada de inglés, así que creo que la comunicación entre ustedes será muy restringida.

-Hm, pero las dos te tenemos a ti. Así que podrás ser nuestra traductora. -sonrió -Además, mi papel aquí es ganarme a mis suegros. -rodé los ojos, riendo.

-Creí que era estar conmigo. -hice drama.

-También, mañosa. -me abrazó desde atrás, apretando mi nariz. Sonreí -Es más, lo voy a pensar, porque ni siquiera gané mi beso cuando llegué.

-Claro que no lo ganaste, rompiste todo el momento sacándome de medio del aeropuerto. -bromeé -La gracia de cuando llega alguien de lejos es quedarse ahí en medio de la gente, tipo de las escenas de las películas.

-Dios mío, rompí tu momento Hollywood. -le saqué la lengua y nos detuvimos frente a mi madre.

-Mami, ella es Natalia. -dije en español -Natalia, ella es mi madre. -dije ahora en inglés.

Ella fue practica, la abrazo como saludo en vez de quedarse hablando.

-Ella es muy linda, Alba. -comentó mi madre, viendo a Natalia.

-Lo sé. -guiñé, sonriendo.

-Hey, esto no es justo, no entiendo nada. -Natalia hizo un lindo berrinche, haciéndome reír.

-Ella dijo que eres linda. -informé, mientras nos encaminábamos hacia el auto.

-Ay, que linda tu madre. -sonrió -Dile que ahora sé de donde salió tanta belleza. -rodé los ojos y hablé. Esto de ser traductora ya me está poniendo nerviosa.

Entramos al auto, me fui en el asiento de adelante, sin poder estar junto a Natalia, quien veía todo con curiosidad, con el ceño fruncido hacia las placas que no podía leer.

-No creas que no sé que me estás espiando por el retrovisor.

-Te ves tan turista. -terminé riendo.

The Exchange (ALBALIA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora