*POV Alba
Es difícil descifrar a Natalia, sus expresiones me confunden, nunca puedo adivinar al 100% lo que ella está sintiendo. Dejé mis dedos deslizarse por sus labios, erizándome, al recordar esa misma sensación en otras partes de mi cuerpo.
-A veces me gustaría leer tus pensamientos. -susurró.
-Claramente a mi me gustaría hacer lo mismo con los tuyos.
-No creo que sea difícil descubrir lo que pasa por mi mente.
-Créeme, lo es.
-Tal vez estás buscando en el lugar incorrecto. O simplemente no lo quieres ver.
-Natalia, ¿te puedo hacer una pregunta'
-Claro.
-¿Qué estás sintiendo? Ahora exactamente.
Ella me vio por algunos segundos, después se puso a hablar.
-Me siento completa.
Eso fue todo. Solamente fue eso lo que ella dijo. Su voz escondía el verdadero significado de aquellas tres palabras. Y yo tenía ganas de golpearla por no decirme cuáles son.
-Si tus libros fueran tan resumidos como las cosas que me dices sería mejor que cambiaras de profesión. -murmuré, haciéndola reír.
-Oh, querida. Eso es lo divertido de la literatura. -sonrió, traviesa -Interprétalo como quieras.
-Tengo miedo de estar entediéndolo todo mal.
-Solo dime, ¿cuando yo hablo tú escuchas con el corazón o con tus oídos?
-Con el corazón, creo.
-¿Entonces por qué dices que te es difícil descifrar mis pensamientos? Alba, olvídalo, no te voy a decir nada con todas las letras hasta no estar segura de que estés lista para escucharlo.
*POV Natalia
Por suerte me salvó mi celular, desvié la mirada de Alba y sujeté el aparato que estaba sobre la cómoda.
-Si?
-Natalia... -la voz de Damion era completamente tensa -...creo que Elena está embarazada. -escupió, de una sola vez. Agrandé mis ojos y me quedé estática sobre la cama.
Alba frunció el ceño, viéndome atenta.
-¿Tú crees? -fue todo lo que pude decir. Mi hermana... embarazada. Cielos.
-Ahora está en la oficina con el medico quién examinará las radiografías. Natalia, no sé si estoy listo para una responsabilidad tan grande.
-Damion, nunca vas a estar listo. -él resopló un gracias, irónico, antes de yo concluir la frase -Esto de verdad da miedo, creo. Pero ustedes van a aprender juntos. -sonreí -Y van a tener el apoyo incondicional de varias personas.
-Estoy aterrado.
-Relájate, tú y Elena ya son gente adulta, maduros, ya tienen una profesión, eso es una bendición.
-¿Por qué presiento que alguien será una tía consentidora? -murmuró, haciéndome reí.
-No bordaré abrigos...te lo prometo. -él rió un poco.
Alba me veía con cara de interrogación.
-El doctor salió de la sala. Me está viendo con una patética sonrisa en el rostro. ¿Qué hago? -dijo desesperado.
-Ve allá, Damion! -ordené, riéndome de la desesperación en la que estaba -Ah... y felicidades, papá. -no dejé de completar, en el intento de calmarlo, después de confesarme el miedo que lo aflige.
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The Exchange (ALBALIA)
FanfictionEsta novela no es mía... pero es muy buena. Tratare de adaptarla lo mejor posible.