VII

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--- Entonces dices que Jeon JungKook, el poderosísimo y guapo hijo de los Jeon (los señores dueños de Dal-Lux) te llevó a un concierto de BaTz invaSion la vez pasada, te ofreció una beca porque eres un mesero de porquería en esa cafetería mediocre que ahora es de ellos...--- concluyó JiMin meramente sorprendido--- sin ofender, por cierto.

--- Entra conmigo de mesero. Seguro que te verías muy lamentable ahí sin poder cargar con todos los pedidos y aguantando los gritos molestos de los clientes--- se cruzó de brazos. ¿Cómo es que su mejor amigo dudaba de sus capacidades? Claro, como él no tenía que pasar por esas cosas, no entendía sobre el trabajo. Sobre la vida real.

--- No creo que tú te los aguantes, ¿O sí?

El castaño se quedó en silencio. Bueno, no. Por eso todos lo odiaban en aquel lugar. Ni siquiera porque era atractivo lo perdonaban.

--- Algo no cuadra en tu historia de fantasía. Lo siento, amigo, pero no te creo.

TaeHyung bufó. ¿Qué más daba si no le creía? No le importaba en lo absoluto. Él no era un mentiroso.

--- La gente de clase alta es extraña--- rodó los ojos. JiMin podría tener más dinero que él, pero aún así este parecía carecer de neuronas. No conectaba ni una.

--- Te iba a comprar el almuerzo, pero me arrepentí.

Ah, vaya. Se ofendió.

Sugar, but not your baby (KookTae)Where stories live. Discover now