XL

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El departamento estaba más silencioso que de costumbre. ¿Cuál era la causa?

Con una bella sonrisa cuadrada, el menor demostró lo feliz que estaba, sintiendo cómo caían varios billetes sobre su cuerpo.

Se sentó en la cama y observó a su futuro esposo, quien se acomodó a su lado y se acercó a intentar besarlo, aunque en su lugar, fue únicamente alejado sin previo aviso.

Entonces, docenas de billetes volaron nuevamente por la habitación. En su mayoría, cayendo sobre la cama o la felpuda alfombra gris.

TaeHyung se cubrió el rostro y negó con un movimiento de cabeza.

--- Eso no es suficiente. Además ya te dije que es un regalo.

JungKook alzó una ceja, provocando que el piercing en esta brillara fugazmente. ¿Cuánto dinero tenía que darle a TaeHyung para que le diera su propio regalo de cumpleaños?

Se dió media vuelta y se acercó hasta la mini caja fuerte, donde había varios fajos de billetes ordenados. Normalmente no usaba efectivo, pero al parecer esta vez era de suma importancia.

--- Bebé, ¿Cuánto necesitas?--- inquirió mientras le arrojaba puñados de billetes, sonriendo ligeramente al ver lo feliz que se veía su prometido por sus acciones. Sabía que a su osito le encantaba el dinero, y como el azabache tenía mucho, no le importaría gastarlo todo en el contrario--- Cada fajo es de cincuenta mil dólares.

El menor se removió en la cama, aún nadando entre el dinero alegremente.

--- Dame todo lo de la caja y ven--- palmeó un lugar a su lado, provocando que uno que otro billete cayera de la cama.

Obedientemente, el mayor sacó cada fajo existente dentro de la caja fuerte y los dejó por ahí, a la vista de su novio. Seguido, comenzó a desabrocharse los pantalones, dejándolos de ese modo y preparado para cualquier cosa.

--- Tienes alrededor de dos millones de dólares ahora mismo. ¿Eso está bien?--- siguió preguntando. Era obvio que solo le estaba siguiendo el juego. Ver sus rosados labios curvarse en una sonrisa valía más que todo el dinero que tenía en ese momento.

TaeHyung evidentemente no solo le estaba sacando dinero a Don Perfecto. ¡Es que al final se había arrepentido de entregar su regalo! Sentía que su trabajo no había resultado perfecto. Tenía muchas fallas en el diseño y seguramente su costura no había sido la mejor. Estaba muy avergonzado, así que estaba intentando deshacerse del outfit y no enseñárselo nunca. Sin embargo, eso no le pareció al Jeon y por eso era que habían terminado en una situación así.

El universitario besó a su mayor y lo obligó a caer en la cama, donde se fundieron en un fuerte abrazo que terminó con beso incluído. Beso para nada inocente, simplemente lleno de deseo y excitación. Con esa química que solo ellos dos tenían. Con ese único chispazo que podía provocar un enorme incendio entre ambos.

Sus lenguas se rozaron una y otra vez, jugueteando entre sí mientras uno de los dos intentaba llevar el control. Cuando uno de los los dos se rindió, el otro decidió atacar el cuello ajeno. En este caso, TaeHyung comenzó a besar y mordisquear la tersa y lechosa piel de su novio, suspirando al sentir cómo se erizaba ante sus acciones.

--- ¿Eso te gusta?--- inquirió con curiosidad el más joven, aunque luego una idea traviesa pasó por su mente--- Quiero ser el de arriba--- anunció, procurando así que fuera lo suficientemente serio para que el otro lo creyera.

--- Si eso quieres, entonces adelante--- le dió permiso el azabache en cuestión de segundos. Al ver que su prometido no le respondía nada, lo atrajo hasta él con sumo cuidado--- ¿Qué sucede?, ¿Necesitas ayuda?

Sugar, but not your baby (KookTae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora