Sugar, but not your baby (KookTae)

II.XVI (2)

Mientras comían, el abuelo decidió hablar. Había tantas cosas en su cabeza que creía que lo mejor era sacarlo todo de una vez antes de que se le olvidara o terminara por revelar más información de la debida.

--- Los ví en Naver. Me aparecieron al inicio...--- habló, mostrándose sorprendido ante el recuerdo--- ¡No hice nada y ustedes tan solo estaban ahí!--- explicó, dejando su bebida a un lado donde no pudiera derramarla accidentalmente.

TaeHyung soltó una risita ante el comentario, llamando así la atención de los otros dos.

--- Papá, eso es mucha tecnología para ti. Deberías de seguir viendo las noticias en la TV o en la radio--- se burló, dejando palmaditas en el hombro del más viejo.

El señor le dió un golpe en la cabeza y lo miró mal, ignorando las quejas del peliazul.

--- ¿A quién llamas anticuado, pitufo? Yo ya le sé al internet. Tu madre me enseñó.

JungKook tan solo sonrió mientras buscaba sanar el dolor en la cabeza azulada del diseñador con varios besitos cariñosos. ¡Sumamente efectivos!

--- Auch, auch. JungKookie, creo que papá me abrió la cabeza--- chilló lastimero mientras intentaba revisarse a sí mismo en la pantalla de su smartphone, asegurándose de que estaba completamente bien--- debería de demandarlo por violencia doméstica.

--- Tengo más de esos puños de oro, por si los quieres, ¡Niño llorón!

El azabache sonrió. Sentía la calidez familiar estando junto a ellos. Le sorprendía mucho el cómo se trataban y la manera en la que su relación parecía estar tan fuerte, llena de amor y confianza.
Disfrutaba de ese ambiente tan ameno, el cual nunca podría tener junto a su familia. El tiempo de calidad entre ellos nunca existió. Mucho menos el amor hogareño que aparecía cada que la familia Kim se reunía.

Estaba tan sumido en sus pensamientos, que no notó cuando la conversación cambió de rumbo drásticamente, retomando una vez más el motivo por el cual habían sido visitados por el abuelo.

--- El atuendo "Black Swan" del señor Jeon fue lo más mencionado durante el día de ayer--- les hizo saber. Quería actualizarlos con lo más hablado del país--- Véndeme una camisa con un cuello similar--- pidió mientras sacaba su billetera, aún si sabía que no conseguiría lo pedido pronto, quería pagarle por adelantado. Apreciaba en demasía el esfuerzo de su nieto en hacer lo que tanto le gustaba y seguir más allá. Tan disciplinado.

--- Uh, están en un sketch. Ya había pensado en ello--- aseguró rápidamente el diseñador mientras lo hacía guardar de nuevo el dinero--- ¡Luego me visitas y vienes por ella!--- sugirió avergonzado. Parecía que su padre realmente quería pagarle por algo que otro familiar podría pedirle regalado.

--- Y de paso, por favor recuérdele a Tae que yo no soy un modelo...--- murmuró JungKook algo tímido, recordando así lo sucedido entre bromas y quejas de parte de los otros dos por no haber usado algo más revelador para llamar aún más la atención.

Claro, el abuelo Kim siguiéndole el juego a su consentido. Deberían de ponerle un stop a todo y dejar de mimarlo tanto. El desgraciado peliazul siempre obtenía todo lo que quería. ¿No era increíble?

Al terminar de comer, el presidente Jeon pagó todo y los otros dos tomaron sus cosas para poder ir a algún lado diferente. JungKook incluso llegó a olvidar que no había chofer disponible debido a su osito, por lo que casi se ofrece a llevar al anciano con ellos.

Se dirigieron hasta el río Han como lo tenían planeado y prontamente se acomodaron en las bancas del parque que yacían justo en la orilla, a pocos metros de la pacífica agua que pasaba con libertad frente a ellos.

TaeHyung se sentó en medio de los otros dos hombres, tomando la mano de su pareja, pero apoyando su cabeza en el hombro de su viejo padre. Lo quería tanto. Le hacía feliz que estuviera ahí con ellos y que hubiera demostrado que podía cambiar. Que no tenía que ser el mismo señor amargado de siempre y que no estaba mal el metamorfosear de opinión respecto a las creencias que se le habían inculcado en algún momento de su juventud.

--- No te vayas, quédate con nosotros hoy--- habló muy bajo el de piel acaramelada. En realidad ni siquiera tenía planeado el pasar la noche en el Palacete de Jeon, sin embargo, ahora sí que deseaba el estar ahí con tal de tener el espacio suficiente para recibir una visita tan importante, como lo era su padre--- de paso, le llevas algo a mamá. Aunque me gustaría que ella viniera también. Después de todo, desde que llegué de Italia no hemos pasado tanto tiempo juntos...

JungKook lo escuchó atentamente mientras el abuelo parecía pensar en una respuesta.

--- ¿Quieres que mande a alguien para que vaya por ella?--- preguntó el fornido a la par que sacaba su celular nuevo--- mi secretaria podría traerla.

El señor Kim negó de inmediato. ¿Para qué causarle tantas molestias a esa pareja tan joven? Estaba seguro de que la pasarían mejor sin ellos, un par de ancianos que seguro y estropearían cualquier muestra de afecto entre los novios.

--- ¡Olvídalo! Odio todo este mundo en el que ustedes se involucran--- explicó gruñón, fingiendo estar meramente enfadado de la clase alta--- Fui al hospital más temprano, así que de todas formas planeaba quedarme en algún hotel--- comentó despreocupado, aunque la mirada de su adorable nieto le hizo saber que había hablado de más--- ¡No comiences!

--- ¿Hospital?--- repitió JungKook a modo de pregunta, recordando así que el señor Kim tenía problemas de corazón desde hacía un tiempo y a veces solía ponerse grave. Ante los primeros síntomas, no dudaba en acudir con el médico que les había recomendado el bienquisto--- ¿Visitó al cardiólogo Wei?

--- ¡Tú... Estás enfermo otra vez!--- acusó el menor, con sus ojitos llenándose de lágrimas ante la posibilidad de tener que verlo decumbente en alguna camilla del hospital. ¡Se rehusaba a verlo caer!--- me dijiste que ahora estabas mejor. ¡Me mentiste!--- chilló.

El hombre mayor no pudo evitar cubrirse el rostro mientras negaba. ¿Ahora qué haría para convencer al nieto que amaba como un hijo, de que todo estaba bien con su salud? Aun si era lo contrario, no quería preocuparlo.

Al no tener los recursos suficientes, jamás les alcanzó para un tratamiento decente que pudiera ayudar al abuelo. Sin embargo, cuando JungKook decidió encargarse del asunto (en ausencia de TaeHyung), terminó dándose cuenta de que ya no había mucho por hacer, puesto que ya era algo tarde.

Tomar medicamento de por vida es lo que se había ganado. Y claro, ese "por vida" había especificado que muchos años ya no le quedaban.

En un pacto de guardar silencio, todos estuvieron de acuerdo. Nadie diría nada a TaeHyung, solo si el señor Kim quería revelarlo.

--- Niño, basta. ¡Si lloras me largo!--- avisó, pero ya era muy tarde para ello, puesto que el peliazul lloriqueaba y se aferraba a su ropa, modo dramático--- ¡Tus mocos!--- horrorizado, miró su camiseta, gruñendo al ver que efectivamente había un algo viscoso sobre la tela.

--- ¡Papá~!--- sollozó--- ¿Cómo puedo dejarte solo si estás así?, No quiero que te vayas--- se giró rápidamente hacia su novio y lo miró fijo--- trae a mamá. Quiero que mis padres se queden aquí.

JungKook asintió y tomó su celular para marcar lo más rápido que podía a su secretaria, la cual tenía un trabajo que realmente no tenía nada que ver con lo que usualmente hacía, pero que de igual modo terminaría cumpliendo, dado que la paga extra seguro y sería buenísima.

--- Vayamos a casa mientras--- pidió Jeon, observando a los guardaespaldas que los rodearon para acompañarlos hasta la mansión.