--- ¿𝘠 𝘲𝘶𝘪é𝘯 𝘦𝘴 é𝘭?--- preguntó JiMin con la ceja alzada.
--- 𝗘𝘀 𝗺𝗶 𝘀𝘂𝗴𝗮𝗿 𝗱𝗮𝗱𝗱𝘆.
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1.- Edades alteradas.
2.- JK top, Tae bottom.
3.- Capítulos cortos o muy largos.
(Subida por primera v...
NamJoon se acomodó en su asiento y miró a los ancianos felicitar a su primo por ser su cumpleaños. ¿No era molesto rodearse de ruido desde tan temprano?
Frunció el ceño y su mentón demostró el cómo se sentía después de escuchar tantas estupideces.
--- ¿¡El cumpleaños del joven señor Jeon?, ¡Vaya, felicidades!
--- Hasta en un día tan perfecto como este nos demuestra que es un imán de la buena suerte.
--- ¡Yo sabía que Jeon JungKook sería el mejor de esta prestigiosa familia!--- habló con un tono de falso orgullo uno de los viejos empresarios. Como si realmente les agradaran los Jeon. Todo era mera hipocresía. Se notaba a leguas que estaban disconformes por no estar ellos en el poder.
Tal y como se sentía Kim NamJoon. Enfadado, molesto porque sentía que esa bola de avaros no lo estaba haciendo lo suficientemente bien. Su primo no era el mejor. Ese título le quedaba grande. ¡Ni siquiera estaba a la altura de los CEOs!
Aún así, el de piel bronceada se preguntaba seriamente el porqué nadie quería cooperar con él. ¿Por qué no conspiraban contra esa familia? ¡Podían quitarles todo fácilmente! Tenía varios planes en la palma de su mano. Los suficientes como para hacerlos caer y llevarse la victoria.
Quizás debía de hacerlo solo. Así nadie más se llevaría todo el crédito. ¿¡Alguien más se imaginaba a los Jeon muertos de hambre o pudriéndose en la cárcel!?, ¿Ganándose mala fama por doquier por acusaciones falsas?
Los metería en problemas. Eso era un hecho. Después de todo, desde que se anunció el compromiso de JungKook, supo que no podría meter las manos directamente para arrebatarle Dal-Lux. Ahora tenía que ser el doble de precavido. Tenía que ser sigiloso con sus movimientos.
NamJoon siempre intentó sobresalir. Estudió arduamente en el extranjero, ganó las mejores competencias a nivel nacional e internacional. Dió convenciones y pláticas en varias partes del mundo, pero nadie podía ver nada de eso.
Lo más decepcionante de todo, es que sabía el porqué. Conocía el motivo por el que no querían ponerlo en el puesto más alto para ponerse la corona. Ser adoptado era una mierda. Había sido abandonado por sus padres biológicos y una familia rica tan solo lo estaba utilizando con tal de ayudarlos a llegar a la cima.
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Todo comenzó cuando era mucho más joven. Hacía más de 10 años atrás, cuando estudiaba junto a su primo en uno de los institutos más cotizados del país.
Ambos se llevaban bien. De hecho, JungKook era la única persona con la que NamJoon podía comunicarse sin miedo a ser juzgado, sin temer el ser lastimado con palabras hirientes. Era su confidente y la rivalidad entre los dos era inexistente.
El chico de lentes observó a su primo llegar a paso lento, lleno de heridas que estaba seguro que iban desde sus pies hasta su rostro. No pudo evitar sentirse mal por eso y preguntarse porqué incluso a su familia no le importaba el cómo trataban al azabache. ¿Por qué nadie hacía nada por detener tal maltrato y abusos?
